El Ministerio de Sanidad y Sociedad Española de Anestesiología, Reanimación y Terapéutica del Dolor (SEDAR) anunciaron el pasado jueves su adhesión a la Declaración de Sostenibilidad de Glasgowde laESAIC, una iniciativa europea pionera que busca reducir la huella de carbono y promover la sostenibilidad en la anestesiología y los cuidados intensivos. En este acto estuvo presente Héctor Tejero, responsable de Salud y Cambio Climático del Ministerio de Sanidad, quien concede una entrevista a ConSalud.es para hablar de esta iniciativa y otras prioridades en la hoja de ruta de su equipo de trabajo.
¿Podría trasladarnos brevemente cómo se ha fraguado la adhesión y en qué se basa exactamente la Declaración de Sostenibilidad de Glasgow?
El pasado mes de abril, la Ministra Mónica García anunció en el Congreso Nacional de la Sociedad Española de Anestesiología, Reanimación y Terapéutica del Dolor (SEDAR) la creación de un Grupo de Trabajo sobre Anestesia Verde que se pondrá en marcha en las próximas semanas. En ese congreso, entramos en contacto con miembros del Comité de Sostenibilidad de la Asociación Europea de Anestesiología y Cuidados Intensivos (ESAIC), quienes nos propusieron que el Ministerio de Sanidad apoyase la Declaración de Glasgow.
"La Declaración de Glasgow de Sostenibilidad en Anestesiología y Cuidados Intensivos plantea la necesidad de avanzar hacia sistemas sanitarios sostenibles y de bajo impacto ambiental promoviendo una serie de medidas"
La Declaración de Glasgow de Sostenibilidad en Anestesiología y Cuidados Intensivos plantea la necesidad de avanzar hacia sistemas sanitarios sostenibles y de bajo impacto ambiental promoviendo una serie de medidas que van desde reducir los residuos sanitarios o aumentar las tasas de reciclaje o reducir el uso de los gases anestésicos más contaminantes y promover técnicas con menor impacto como la de bajos flujos u optimizar el consumo eléctrico de quirófanos y apostar por equipamiento de bajo consumo.
El Gobierno de España es el primero que se adhiere a la misma. ¿Es una declaración de intenciones sobre la preocupación y el foco que el Ministerio de Sanidad tiene puesto en la sostenibilidad medioambiental del sistema de salud?
El Gobierno de España y el Ministerio de Sanidad han mostrado un fuerte compromiso con la descarbonización y la sostenibilidad ambiental y, sin duda, apoyar esta declaración es un ejemplo más de dicho compromiso. Un paso adelante para seguir fomentando una cultura de concienciación y responsabilidad ambiental entre los profesionales sanitarios. Ahora toca seguir avanzando en esa dirección tanto en el ámbito de la anestesia como en otros impactos ambientales del Sistema de Salud.
¿En qué punto se encuentra la sanidad española en la actualidad en términos de incidencia en la huella de carbono?
Se calcula que el sistema de salud global supone un 5% de las emisiones mundiales de gases de efecto invernadero. España, según datos de la ONG ‘Salud Sin Daño’, se encuentra entre los países con emisiones ligeramente superiores a la media, en línea con la Unión Europea y por debajo de los sistemas de salud más emisores como Australia, Estados Unidos, Alemania, etc.
Una herramienta importante es el Observatorio de Salud y Cambio Climático del que forma parte. ¿Cómo definiría este organismo, así como sus funciones y objetivos?
El Observatorio de Salud y Cambio Climático es un órgano de coordinación interministerial entre Sanidad, el Ministerio de Transición Ecológica y Ciencias y Universidades. La idea es coordinar desde un mismo organismo del Gobierno la evidencia y las políticas públicas asociadas con los impactos que tiene el cambio climático en la salud.
El Observatorio funciona mediante la creación de grupos de trabajo donde participan investigadores, miembro de la administración y también de la sociedad civil para abordar diferentes áreas de la relación entre salud y cambio climático
Eso abarca, por ejemplo, desde fomentar la investigación básica epidemiológica en los centros de investigación, a la mejora los sistemas de alerta en caso de olas de calor de las administraciones públicas, asesorar a los agentes sociales para adaptar la legislación laboral a los nuevos impactos climáticos o recopilar las mejores prácticas para que las ciudades y municipios estén mejor adaptados frente al cambio climático desde una perspectiva de la salud.
El Observatorio funciona mediante la creación de grupos de trabajo donde participan investigadores, miembro de la administración y también de la sociedad civil para abordar diferentes áreas de la relación entre salud y cambio climático: por ejemplo, temperaturas extremas o salud laboral. En los próximos meses seguiremos creando nuevos grupos.
Detectar las necesidades y posibles mejoras en la sostenibilidad del sistema de salud es el primer paso, luego hay que poner las soluciones. ¿De qué herramientas dispone el Ministerio para lograrlo?
El Ministerio dispone de muchas competencias para avanzar hacia la sostenibilidad del Sistema Sanitario. Hace unos meses anunciamos que modificaremos el marco normativo para introducir un compromiso de descarbonización del Sistema Nacional de Salud antes de 2050. También estamos trabajando para introducir el impacto ambiental de los fármacos en la próxima reforma de la Ley de garantías y uso racional de los medicamentos y productos sanitarios y en la Estrategia de Industria farmacéutica. A otro nivel, el Ministerio puede y debe liderar la transición ecológica del Sistema Nacional de Salud mandando señales claras al resto de actores que lo conforman: Comunidades Autónomas, profesionales sanitarios, sociedades científicas, etc.
La tarea del Ministerio es, en mi opinión, recoger toda esa experiencia y esas buenas prácticas que ya están en marcha, darlas a conocer y tratar de extenderlas bien a través de sus competencias directas, su ejemplo y su liderazgo
Creo que una tarea importante que debemos asumir es la de dotar de una dirección y coordinación a dicha tarea. España es un país con un SNS descentralizado y eso ha permitido que haya mucha gente individual, muchos centros sanitarios y algunos sistemas regionales que ya estén avanzando por su cuenta hacia la sostenibilidad. La tarea del Ministerio es, en mi opinión, recoger toda esa experiencia y esas buenas prácticas que ya están en marcha, darlas a conocer y tratar de extenderlas bien a través de sus competencias directas, su ejemplo y su liderazgo.
¿La concienciación de los responsables autonómicos, los gestores sanitarios, los profesionales e, incluso, los propios pacientes es esencial no? ¿Considera que existe ese compromiso decidido, a todos los niveles, en nuestro país?
Algunos más que otros, como pasa siempre pero mi sensación general es que el sector sanitario esta en general concienciado con la amenaza que supone el cambio climático con la salud y deseoso de ser un actor fundamental en la transición ecológica, tanto reduciendo el impacto ambiental de su sector como ayudando a concienciar a las personas y otros sectores de la necesidad de abandonar los combustibles fósiles de forma rápida, ordenada y justa.
¿Cómo valora estos meses en su labor responsable de Salud y Cambio Climático del Ministerio de Sanidad? ¿Qué experiencias destacaría?
Creo que recogiendo el trabajo previo de muchas de las unidades del Ministerio de Sanidad el equipo actual está consiguiendo poner a España como uno de los referentes en materia de sostenibilidad ambiental del sistema sanitario, aún queda mucho por hacerpero creo la Ministra y su equipo hemos mostrado la voluntad inequívoca de avanzar en esa dirección. Personalmente solo puedo agradecer la oportunidad de formar parte de esta tarea y empujar un poco hacia un mundo más justo, más saludable y lo menos cálido posible.