Este miércoles 6 de noviembre el Auditorio CaixaForum de Madrid se ha convertido en la sede del Foro de Comunicación Salud Digital, que en su séptima edición se ha celebrado bajo el título: 'Ciencia para vivir mejor'. Organizado por el Grupo Mediforum, ha contado con el patrocinio de Quirónsalud, GSK, Telómera y Oximesa Nippon Gases. Este foro se ha convertido en un punto de encuentro de expertos de primer nivel en el ámbito de las tecnologías sanitarias, la asistencia al paciente y la gestión en salud que han abordado los desafíos y oportunidades del futuro, siempre de la mano de la innovación.
Uno de los expertos que han participado en este encuentro ha sido Gorka Orive, Catedrático de Farmacia de la Universidad del País Vasco, quien durante su conferencia “Ciencia y Cambio climático: Soluciones para el futuro” ha afirmado que “hoy en día conocemos perfectamente que el cambio climático indudablemente está generando una mayor morbilidad y mortalidad por sus diferentes circunstancias y efectos”.
“El calor mata”, ha aseverado. En España cada año se producen entre 4.000 o 5.000 muertes por exceso de calor especialmente entre la población más vulnerable a partir de los 65-75 años. Orive sostiene además que las perspectivas no son halagüeñas: “Hay más de 250.000 muertes anuales a causa del calor y también se debe valorar la cantidad de gasto derivado de estos efectos”. Numerosas investigaciones han unido intrínsecamente el cambio climático con el empeoramiento de la salud global y con circunstancias a las que “si no se le dan vuelta pronto, solo pueden ir empeorando progresivamente”, alerta el experto. Otro de los aspectos alarmantes es que la mayor parte de la población tiene microplásticos en su organismo", ha añadido Orive.
“Cualquier etapa del ciclo de vida del medicamento puede implicar un riesgo medioambiental”
El uso de medicamentos es cada vez superior debido a que "somos más y vivimos más". Cualquier etapa del ciclo de vida del medicamento puede implicar un riesgo medioambiental, ha explicado Orive, alertando de los efectos de los fármacos en las aguas residuales. Y es que, como ha recordado, estos fármacos están diseñados para ser estables “y eso también se refleja a nivel medioambiental”. Su diseño para tener efectos en bajas concentraciones, “también tiene consecuencias también para pequeños animales”.
El concepto de Farmacia sostenible debe abordar el impacto en el medio ambiente, ha expuesto Orive. Por ello ha destacado la importancia de la creación del Basque Sustainable Pharmacy, un ambicioso proyecto, que pretende investigar, divulgar y promover la docencia en materia del impacto ambiental de los medicamentos y la sostenibilidad. “La sostenibilidad tiene que ver mucho con la parte educativa”, y se ha reafirmado en la importancia de seguir apostando por la formación y la educación. “Hay que introducir estos temas de sostenibilidad en los planes formativos de las universidades”, añadió.
“El campo de la farmacia tiene que avanzar hacia un enfoque sostenible y holístico”, ha indicado Orive que ha recordado que “hoy en día de los 4.000 fármacos existentes, ya hay mil que se han detectado a nivel medioambiental. En el 25% de los ríos monitorizados las concentraciones eran lo suficientemente altas para producir un problema ecotoxicológico”, ha alertado, ya que este hecho aumenta el riesgo de que haya resistencias antibióticas.
Los inhaladores también tiene efectos en el calentamiento global: “La mitad de los gases procedentes de estos medicamentos está asociados a 400 mil toneladas de CO2”, lo que se podría afrontar con desarrollo farmacéutico, innovación y con la utilización de otro tipo de soluciones como el polvo seco.
“Debemos trabajar en evitar que lleguen más fármacos al medio ambiente y mejorar que los que están allí se limpien correctamente”
Orive ha destacado que la concienciación por la farmacontaminación: “Desde que se inició este proyecto hace cinco años ya se ha eliminado un medicamento en Escocia por sus implicaciones medioambientales”. En esta línea el experto recordó que es importante “integrar el concepto de sostenibilidad a nivel de instituciones y población en la repercusión de los medicamentos en el medio ambiente”.
Durante su ponencia, Orive ha explicado que el diclofenaco acabó en Nepal con muchos buitres dado que este fármaco es altamente nefrotóxico para esta especie. “Cuando alteramos el ecosistema y una especie desaparece, otra ocupa su lugar. En esa zona hubo más casos de rabia y aumentó la mortalidad” lo que es una muestra clara del enfoque One Health, según Orive.
“Este foro de comunicación es importante para dar las señales correctas para hablar de la importancia de los medicamentos, pero también de sus implicaciones en casos como los comentados”. Orive cree necesario establecer medidas en el ámbito puramente regulatorio, empresa privada, pero también los responsables de la depuración de las aguas. “Hay que trabajar en dos ámbitos, prevenir y tratar: evitar que lleguen más fármacos al medio ambiente y mejorar que los que están allí se limpien correctamente”.
Además, Orive ha recordado la importancia de premiar la apuesta por la sostenibilidad. “Para reducir la presencia de fármacos en el medio ambiente es importante la concienciación con el fomento de puntos verdes así como el uso racional de los medicamentos. También es importante promover que la industria farmacéutica desarrolle medicamentos más verdes”, ha concluido.