La formación policial, escudo para prevenir las agresiones a profesionales sanitarios

Comunidades autónomas y consejos generales están blindando a sus profesionales, con el apoyo de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad, para combatir una "lacra" que asola el Sistema Nacional de Salud (SNS).

Indicativo de la Policía Nacional (Foto. Europa Press)
Indicativo de la Policía Nacional (Foto. Europa Press)

"Las agresiones a profesionales sanitarios son una de las grandes lacras a la que nos enfrentamos en el Sistema Nacional de Salud y tenemos que actuar todos, organismos profesionales, administraciones y demás instituciones para poner una solución inmediata". Así de rotundo se muestra Florentino Pérez Raya, presidente del Consejo General de Enfermería (CGE), a la hora de analizar esta problemática que asola la sanidad española.

Consciente de esta realidad, la corporación enfermera ha decidido dar un paso más y, de la mano de la Policía Nacional, impartirá un curso y varios webinars gratuitos en los que se darán las pautas sobre cómo actuar en un momento de riesgo. De este modo los más de 325.000 enfermeras y enfermeros de España podrán manejar "herramientas y pautas de prevención antes de que se produzca la agresión, durante la agresión y cómo actuar después de ella", precisa Sandra Pérez, agente del Equipo del Interlocutor Policial Sanitario de la Policía Nacional.

"Los profesionales de la Enfermería podrán manejar herramientas y pautas de prevención antes de que se produzca la agresión, durante la agresión y cómo actuar después de ella"

"Queremos que cuando haya una agresión se denuncie porque es la única forma de perseguir a los autores. Debemos evitarlo, creando campañas de concienciación y dando herramientas a las enfermeras. También estamos fomentando que se creen departamentos de seguridad, se haga una valoración de riesgos, en qué lugares se producen estas agresiones y otras variables para que se contraten vigilantes de seguridad. Pretendemos que, además de una prevención por parte del personal sanitario para que eso no vaya a más, haya alguien que lo proteja y evite en el caso de que ocurra", resalta Manuel Yanguas, comisario principal de Policía Nacional e Interlocutor Policial Sanitario.

SISTEMAS DE ALARMA EN NAVARRA

En este sentido las Comunidades Autónomas también tienen mucho que aportar. En el caso de Navarra, el Departamento de Salud, en su apuesta por reforzar la implantación de medidas preventivas para proteger a los profesionales sanitarios, en 2021 prácticamente ha culminado la instalación en todos los centros de salud y en la red de Salud Mental de Navarra (a falta del Pabellón Blanco y el Hospital de Día Irubide), del sistema de alarma mediante el botón de seguridad en el ordenador de sobremesa.

La prevención primaria enfocada a evitar agresiones a su personal, como medidas estructurales, organizativas, de adquisición de habilidades conductuales y de comunicación; la secundaria dirigida a que, si la agresión no ha podido evitarse, cause el menor daño posible (cursos de autoprotección), y que dicho daño quede documentado y vinculado a la contingencia profesional; y la terciaria que sería la dirigida a restaurar el daño causado a los profesionales sanitarios.

Además del despliegue del sistema de alarma mediante el botón de seguridad en el ordenador de sobremesa, se ha continuado con la coordinación establecida con el Interlocutor Policial Territorial Sanitario de la Policía Foral, para funciones de prevención asesoramiento y adopción de medidas con la mayor inmediatez.

CONSIDERACIÓN DE AUTORIDAD PÚBLICA

En el año 2015, la reforma del Código Penal resaltó que los profesionales del sistema sanitario público tienen la consideración de autoridad pública, estableciendo una pena de prisión de hasta cuatro años para los sujetos activos. Esta norma jurídica aplica consecuencias jurídicas "en el ejercicio de las funciones propias de su cargo, o con ocasión de ellas".

El perfil del agresor detenido suele coincidir con el de un varón de entre 36 y 55 años y de nacionalidad española, mientras que el perfil de la víctima es una mujer de edad similar y también de nacionalidad española

Según los datos presentados por la Policía, el perfil del agresor detenido suele coincidir con el de un varón de entre 36 y 55 años y de nacionalidad española, mientras que el perfil de la víctima es una mujer de edad similar y también de nacionalidad española.

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