La FJD forma en radiofrecuencia con su “I Curso en Rehabilitación Intervencionista"

El Servicio de Rehabilitación de la FJD emplea esta técnica para controlar el dolor durante los procesos de recuperación de los pacientes

Almudena Fernández-Bavo Rueda (Foto: FJD)
18 octubre 2023 | 14:15 h
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La radiofrecuencia se está consolidando como una alternativa segura y eficaz para controlar el dolor durante el proceso de recuperación de los pacientes. Esta técnica consiste en la aplicación de corriente alterna de baja energía y alta frecuencia en los tejidos, para alterar la conducción nerviosa y evitar la transmisión del dolor. Con el objetivo de formar en esta técnica, la Fundación Jiménez Díaz ha organizado recientemente el “I Curso de Radiofrecuencia en Rehabilitación Intervencionista”. El curso está dirigido por los doctores Carmelo Fernández García y Almudena Fernández-Bavo Rueda, jefe del Servicio de Rehabilitación del hospital madrileño y jefa asociada del mismo servicio.

“En el Servicio de Rehabilitación de nuestro hospital llevamos mucho tiempo realizando bloqueos nerviosos guiados por ecografía para ayudar a controlar el dolor en los procesos degenerativos y facilitar al paciente los tratamientos de rehabilitación”, explica el doctor Fernández. Además, recuerda que “cuando disminuye el efecto de los bloqueos analgésicos, la radiofrecuencia es capaz de prolongar dicho efecto terapéutico”.

Carmelo Fernández: “En el Servicio de Rehabilitación de nuestro hospital llevamos mucho tiempo realizando bloqueos nerviosos guiados por ecografía para ayudar a controlar el dolor en los procesos degenerativos"

Durante el encuentro formativo, se explicaron los principios fisiológicos del procedimiento, que es mínimamente invasivo. “Cuando la energía aplicada mediante el generador de radiofrecuencia atraviesa los tejidos, se modifica la temperatura interna, lo que altera la estructura molecular de las fibras nerviosas que participan en el proceso de generación del dolor”, detalla el experto.

Por otro lado, la doctora Fernández-Bravo especificó que existen dos modalidades distintas en esta técnica. Así, se encuentra la radiofrecuencia convencional o térmica, que produce una denervación dependiente del nervio al que se le aplica un aumento de temperatura, con el objetivo de impedir el paso de los estímulos nerviosos dolorosos. A su vez, está la radiofrecuencia pulsada o neuromoduladora, que consigue que, a menor temperatura, se bloqueen las conducciones sensitivas que provocan el dolor.

Los tratamientos de radiofrecuencia ayudan a prolongar el efecto terapéutico de los bloqueos analgésicos, que en ocasiones puede ser limitado. Así, se mejora la calidad de vida de los pacientes y se puede incluso llegar a evitar la intervención quirúrgica.

 

Las indicaciones más frecuentes para su aplicación en hombro, rodilla y raquis “son procesos degenerativos de pacientes que no pueden someterse a una intervención quirúrgica, aquellos que han pasado por cirugías en las que no se ha conseguido controlar el dolor ni con medicación analgésica, o situaciones de dolor crónico”, añade la especialista.

La sesión formativa, una vez concluida la parte teórica, dio paso a tres sesiones prácticas de hombro, rodilla y raquis con grupos formados por alumnos del curso, pacientes y un profesional médico referente. “Los integrantes de cada grupo fueron rotando por cada taller durante dos horas, en las que se aplicaron las técnicas a tres pacientes”, concluye la Dra. Fernández-Bravo.

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