Este pasado lunes se presentó de manera oficial la Federación Española de Asociaciones de Médicos Iberoamericanos (FEAMIB). Un proyecto que trata de agrupar a los facultativos extranjeros que han llegado a España desde el otro lado del ‘charco’ para velar por sus intereses y hacer mayor fuerza en sus reclamaciones. Inicialmente, estaría conformada por las Asociaciones de Médicos de Venezuela, Argentina, Colombia, Cuba y Ecuador, quedando abierta a poder incluir en el futuro a cualquier otra asociación del área que pudiera surgir.
El presidente de la Asociación de Médicos Venezolanos y recientemente designado como responsable de FEAMIB, Dr. Giovanni Provenza, explica a ConSalud.es que el proyecto surge con la idea de formar “un frente de lucha común” para elevar sus necesidades profesionales. “Cuando acudíamos a diferentes reuniones con las instituciones nacionales, autonómicas o profesionales nos dábamos cuenta de que, al no ser una masa importante, muchas veces se nos ignoraba”, para contrarrestarlo,las cinco asociaciones decidieron crear esta iniciativa que agrupa a “más de 12.000 médicos iberoamericanos”, relata.
“Solamente pedimos que se agilicen todos los procesos burocráticos y se valore que hay efectivos altamente cualificados a disposición del SNS”
En este sentido, Provenza ha destacado la “gran acogida” que ha tenido el proyecto, que en su presentación oficial en el Palacio de la Comunidad de Madrid reunió a importantes representantes políticos, colegiales y sindicales del ramo. “Nos hemos sentido arropados por todas las autoridades”, agradece, destacando el papel de la consejera de Sanidad madrileña, Fátima Matute, quien “ha sido una de las principales facilitadoras de la creación de esta Federación, nos ha abierto las puertas de su despacho y siempre ha estado a nuestra disposición desde el primer día”.
La Comunidad de Madrid ha sido una de las regiones que más está reclamando al Gobierno central que agilice la homologación de títulos y más facilidades ha ofrecido al colectivo de médicos extracomunitarios a la hora de lograr su integración en la sanidad pública. “Eliminaron el requisito de la nacionalidad para poder trabajar en el Sermas -Ley Ómnibus-, ya que antes para trabajar en la sanidad pública tenías que ser español; parece una cosa absurda. Han cumplido y estamos muy satisfechos con esta gestión del departamento de Sanidad madrileño”, aclara.
“Tenemos colegas trabajando de ‘ryders’, conductores VTC, limpiadores, actores o de lo que sea para poder vivir. Lo único que quieren es poder ejercer la profesión de médico especialista para la que se han formado”
El mismo día en que se presentaba FEAMIB se hacía efectivo también el traslado de competencias al País Vasco en materia de homologación de títulos para extranjeros. Con ello, Euskadi pretende acelerar los dilatados plazos que los facultativos extracomunitarios afrontan hasta ver reconocida su formación por parte del Ministerio de Universidades y de Sanidad, respectivamente. Una de las principales problemáticas que les han llevado a unir fuerzas. “Solamente pedimos que se agilicen todos los procesos burocráticos y se valore que hay efectivos altamente cualificados a disposición del SNS”, remarca.
TALENTO EN ESPERA
Si una persona tiene hambre, puede utilizar una aplicación que le acerca la comida a casa en veinte minutos. Sin embargo, en el momento en el que un paciente debe ser operado, puede afrontar esperas de meses. Lo paradójico del caso es que ese mismo repartidor de comida rápida que llama a la puerta, podría contar con una especialidad médica y la experiencia suficiente como para realizar la intervención. “Tenemos colegas trabajando de ‘ryders’, conductores VTC, limpiadores, actores o de lo que sea para poder vivir. Lo único que quieren es poder ejercer la profesión de médico especialista para la que se han formado”, lamenta.
De esta manera, un reciente estudio llevado a cabo por el Colegio de Médicos de Barcelona señala que un 87% de los facultativos extracomunitarios colegiados disponen del título de especialista en su país de origen, mientras que el Ministerio de Sanidad solo había homologado al 13,6% de ellos. Igualmente, el análisis del colegio profesional barcelonés estable la media de espera para que un facultativo extranjero vea reconocida su especialidad en alrededor de 5 años, lo que lleva a un 44% de ellos a desistir o ni siquiera solicitar este reconocimiento formativo.
“Pedimos que los responsables nacionales y autonómicos escuchen la realidad de los médicos iberoamericanos y que se pueda resolver esto"
Para acelerar el embudo de solicitudes, en los últimos años las instituciones públicas han tratado de poner en marcha algunas iniciativas, aunque sin éxito hasta la fecha. “Pedimos que los responsables nacionales y autonómicos escuchen la realidad de los médicos iberoamericanos y que se pueda resolver esto en beneficio, no solo de nuestro colectivo, sino del conjunto de la sociedad. Hablamos de salud”, insiste el presidente de FEAMIB, que asegura que no quiere generar “falsas expectativas”, pero desea que la Federación aporte su “granito de arena”.
Por el momento, los médicos iberoamericanos han decidido dar un nuevo paso al frente y mostrarse más unidos que nunca en la búsqueda de soluciones. Entre los objetivos fundacionales de su nuevo proyecto, se han marcado algunos como servir de punto de encuentro del colectivo; asesorar en el proceso de homologación de títulos; trabajar con las entidades responsables en la eficiencia de estos procesos y la reducción de sus plazos; u orientar sobre los requisitos migratorios en España y el acceso al examen MIR.