Jesús Aguilar, presidente del Consejo General de Colegios Oficiales de Farmacéuticos (CGCOF), atiende a ConSalud.es para analizar el papel de los farmacéuticos en áreas como la pandemia de COVID-19, la España vaciada o las tecnologías de la información y la comunicación (TIC).
Hasta el momento, ¿qué rol ha desempeñado el farmacéutico frente a la pandemia de la COVID-19?
Un año y medio desde la declaración del estado de alarma y puedo decir con orgullo que los profesionales farmacéuticos han desempeñado un papel fundamental desde todos y cada uno de los ámbitos de actuación. En los escenarios más sensibles de esta crisis sanitaria había un farmacéutico combatiendo la pandemia.
En los laboratorios clínicos, trabajando para permitir el diagnóstico más preciso; desde los hospitales, gestionando la escasez de medicamentos y participando en ensayos; en la distribución farmacéutica, asegurando la disponibilidad del medicamento; los que trabajan en la Salud Pública, en continua vigilancia de las condiciones higiénico-sanitarias; los de Atención Primaria, asumiendo un importante papel en la distribución de las vacunas dentro del sistema, y por supuesto, en las 22.137 farmacias comunitarias, con una labor incansable apoyando a su vecinos y asegurando su medicación en todo momento.
Pero, sinceramente, creo que podríamos haber hecho mucho más con las propuestas concretas que hemos ido transmitiendo en cada fase de la pandemia.
Las pruebas de autodiagnóstico han sido las principales protagonistas de las ventas de las oficinas de farmacia durante los últimos meses. ¿Qué papel ha jugado el farmacéutico en todo este proceso?
En relación los test de autodiagnóstico nos ofrecimos la colaboración de las farmacias a las comunidades autónomas en el acompañamiento de los ciudadanos en la realización de estas pruebas y en la comunicación de los resultados de sospecha de infección, con el fin de obtener el mejor resultado en términos epidemiológicos.
"Las ocho comunidades autónomas en las que se está contando con la farmacia de una u otra manera, están obteniendo datos epidemiológicos y trazabilidad de los casos, que es lo que de verdad contribuye a combatir la epidemia"
Las ocho comunidades autónomas en las que se está contando con la farmacia de una u otra manera, están obteniendo datos epidemiológicos y trazabilidad de los casos, que es lo que de verdad contribuye a combatir la epidemia.
Resulta evidente que el impacto de la COVID-19 no se ha limitado al escenario sanitario, haciendo extensible su virulencia a la perspectiva social o económica. ¿Cómo contribuye la red de oficinas de farmacia al bienestar económico del país y la creación de empleo?
Ya no podemos entender la sanidad si tener en cuenta el lado social, más aún si cabe en esta pandemia. Por destacar alguna concreta, quizás la más conocida fue Mascarilla-19, que empezó con los compañeros de las Islas Canarias para colaborar en la lucha contra la violencia de género. También hemos colaborado con la Guardia Civil y la Policía Nacional en la detección de pacientes que no iban a la farmacia por los medicamentos y que podían estar en problemas.
Pero además, la Farmacia Comunitaria es motor de empleo y de desarrollo económico generando 210.000 puestos de trabajo, de los cuales 90.000 son empleos directos: nueve de cada 10 son indefinidos; uno de cada 2 es titulado superior; ocho de cada 10 son ocupados por mujeres y más de cuatro de cada 10 tienen menos de 45 años.
¿Las tecnologías de la información y la comunicación han irrumpido en las oficinas de farmacia?
Cuando hace tres años decidimos crear la estrategia Somos farmacéuticos: somos asistenciales, somos sociales y somos digitales; ninguno sabíamos que iba a llegar la pandemia y sobre esos pilares hemos dado la mejor de las respuestas. En el ámbito digital desarrollamos herramientas como nuestro Centro de Información sobre el Suministro de Medicamentos (CISMED), que ha permitido monitorizar a disponibilidad de medicamentos en los últimos meses.
Más recientemente hemos desarrollado FarmaHELP, que ayuda a todos los farmacéuticos a que cuando tenemos faltas de medicamentos, ante una solicitud de una prescripción, podamos saber qué compañero que esté alrededor puede tener ese medicamento. La semana pasada hemos presentado nuestro nuevo portal, farmaceuticos.com, con un arsenal de herramientas e información para todo tipo de públicos: colegiados, colegios, ciudadanos, prensa, estudiantes…
En breve presentaremos nuestra Agenda Digital de la Profesión Farmacéutica, que incluye hasta 28 proyectos ya en marcha o que pronto lo estarán.
¿Qué pasos deben seguir las farmacias en el contexto rural de la España vaciada?
Desde la Organización Farmacéutica Colegial tenemos una hoja de ruta muy estudiada para hacer de la farmacia rural un recurso al servicio del bienestar social de todos los españoles. Tenemos la red de farmacias comunitarias más numerosa de Europa: 22.137. Pues bien, dos de cada tres farmacias están fuera de las capitales de provincia. Ahora bien, hay cerca de 800 farmacias con su viabilidad económica comprometida. Así que lo primero es asegurar la sostenibilidad de todas las farmacias, especialmente las que están en zonas frágiles o deprimidas.
Desde la Organización Farmacéutica Colegial hemos presentado un Plan de Atención Socio-Sanitaria de las Personas en las Áreas Rurales o en Despoblación, que hemos puesto en conocimiento del Ministerio para la Transición Ecológica y Reto Demográfico. Y en estos momentos estamos en conversaciones con la Secretaría General de Reto Demográfico y el Gobierno de La Rioja para ver la posibilidad de poner en marcha un proyecto de atención sociosanitaria que pudiera ser la base de un modelo consensuado para otras comunidades autónomas.
"Tenemos la red de farmacias comunitarias más numerosa de Europa: 22.137. Pues bien, dos de cada tres farmacias están fuera de las capitales de provincia. Ahora bien, hay cerca de 800 farmacias con su viabilidad económica comprometida"
Un proyecto que pasa por desarrollar tres ejes de actuación: Los Servicios Farmacéuticos Asistenciales, la Salud Pública y los Servicios sociales, mejorando la eficacia y alcance de las acciones de detección de personas en riesgo de vulnerabilidad y con necesidades de atención social, como violencia de género, violencia sexual, soledad, negligencia en los cuidados o atención a la infancia, entre otros.
¿Hacia dónde se encamina, a medio y largo plazo, la profesión del farmacéutico?
Como se recogía en el manifiesto con el que presentamos nuestra estrategia corporativa para los próximos años, la verdaderas revoluciones con las que nacen dentro de uno mismo. Esa estrategia que, como antes he señalado, fijó los pilares en los que se debe sustentar nuestra profesión: Somos farmacéuticos: asistenciales, sociales, digitales.
Y es que el futuro de la profesión pasa por potenciar las funciones asistenciales de los farmacéuticos. No solo hablamos de un avance profesional del farmacéutico, sino de reforzar las capacidades asistenciales del conjunto del Sistema Nacional de Salud. Hablar de un uso eficiente de los recursos pasa por apostar por la profesión farmacéutica. Sociales porque el reto demográfico, el envejecimiento, la lucha contra la violencia de género, la prevención del suicidio, las nuevas formas de adicciones, o la soledad son problemas que afectan e inquietan a la sociedad y a las autoridades.
Unas y otras saben que tienen en profesión farmacéutica una aliada, y contar con nosotros mejorará los resultados de cualquier estrategia. Y digitales porque, entre otros motivos, la red de 22.137 farmacias constituye la mayor red de inteligencia sanitaria del país. Pero eso es solo un aspecto.