La Mesa Sectorial de Sanidad de Extremadura aprobó este martes la redacción del nuevo Plan de Ordenación de Recursos Humanos, que contempla un aumento de la jubilación forzosa de los 65 años a los 67, aunque “sólo excepcionalmente”.
Estos sindicatos, a diferencia de los que sí han apoyado el cambio en la redacción del Plan (UGT, CC.OO., Satse y Usae), son favorables a que los profesionales puedan alargar su período de actividad laboral hasta los 70 añosy además ven lagunas en el nuevo plan, puesto que, consideran, no quedan claro los criterios para que la administración decida si se aprueba o no una prolongación de la actividad, y además porque la jubilación forzosa se podría interpretar como un instrumento para adelgazar las plantillas.
El director gerente del Servicio Extremeño de Salud, Ceciliano Franco, ha recordado que a partir del año 2020 va a haber un número elevado de jubilaciones en todas las especialidades, tanto en Medicina de Familia como en las especialidades hospitalarias, es decir, “en número absolutos, del año 2020 al 2016 se van a jubilar unos 600 médicos de familia de una plantilla de 1.129 profesionales, con lo que podemos tener un problema importante de asistencia si no vamos previendo acciones de este tipo”, comentó al término de la reunión con los sindicatos.
En este sentido, Franco considera que aunque sea poco el número de jubilaciones en los próximos años, si a esto se une un número de plantilla menor y una escasez crónica de estos especialistas “hace que determinados servicios su permanencia pueda verse en peligro”.
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El asunto de la jubilación ha dividido a los sindicatos, ya que algunos facultativos defienden poder trabajar hasta los 70 años si consideran estar en condiciones para hacerlo
El asunto de la jubilación, que hasta ahora estaba establecida en 65 años por una normativa estatal, ha generado división entre los propios sindicatos. De hecho, la propuesta de prolongación opcional de la actividad de los facultativos ha sido rechazada por CSIF y el Sindicato Médico de Extremadura.Estos sindicatos, a diferencia de los que sí han apoyado el cambio en la redacción del Plan (UGT, CC.OO., Satse y Usae), son favorables a que los profesionales puedan alargar su período de actividad laboral hasta los 70 añosy además ven lagunas en el nuevo plan, puesto que, consideran, no quedan claro los criterios para que la administración decida si se aprueba o no una prolongación de la actividad, y además porque la jubilación forzosa se podría interpretar como un instrumento para adelgazar las plantillas.
El director gerente del Servicio Extremeño de Salud, Ceciliano Franco, ha recordado que a partir del año 2020 va a haber un número elevado de jubilaciones en todas las especialidades, tanto en Medicina de Familia como en las especialidades hospitalarias, es decir, “en número absolutos, del año 2020 al 2016 se van a jubilar unos 600 médicos de familia de una plantilla de 1.129 profesionales, con lo que podemos tener un problema importante de asistencia si no vamos previendo acciones de este tipo”, comentó al término de la reunión con los sindicatos.
En este sentido, Franco considera que aunque sea poco el número de jubilaciones en los próximos años, si a esto se une un número de plantilla menor y una escasez crónica de estos especialistas “hace que determinados servicios su permanencia pueda verse en peligro”.
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