Los especialistas en Salud Mental del grupo sanitario Ribera recomiendan paciencia, escucha y apoyo por parte de los padres a sus hijos en el inicio del curso escolar. Pomba Liñares, psiquiatra y pediatra de la Unidad de Psiquiatría y Psicología Infantil y de la Adolescencia del Hospital Ribera Povisa en Vigo, recomienda que los niños tengan un entorno seguro para poder volver a la normalidad.
“Lo más importante es mantener la calma, escucharle y tener paciencia. Poniendo atención y no siendo crítico, pues puede que aumentemos sin querer la presión que siente, intentando validar sus emociones”, indica la especialista.
En esta misma línea, la doctora María Victoria Rodríguez Noguera, psiquiatra de la Unidad Infanto-Juvenil del Hospital Universitario del Vinalopó, destaca la necesidad de mantener la tranquilidad y no alterar a los niños junto con el refuerzo positivo de que el colegio es “un lugar enriquecedor, donde van a aprender y a disfrutar”.
“Cuando el niño o adolescente no es feliz con el contacto y relación con los iguales en el ámbito escolar, puede surgir algún síntoma de corte depresivo, como tristeza, reticencia a ir al colegio o las molestias corporales"
“No hay un manual de crianza ni instrucciones sobre cómo calmar a cada niño y seguramente cada padre ha desarrollado un conocimiento singular, para ser capaz de no perder los nervios y tranquilizarle en situaciones de estas características, que forman parte de una vida normal”, señala la enfermera especialista de la Unidad de Salud Mental Infanto-Juvenil del Hospital Universitario de Torrejón, Nuria Lázaro.
Entre los consejos que aportan para recibir de la mejor manera posible estos primeros meses se encuentran: una dieta sana y equilibrada que incluya cinco comidas al día; mantener un buen descanso nocturno; hacer ejercicio físico de forma regular y ayudar al menor a organizar bien las tareas y actividades.
La doctora Rodríguez Noguera señala que el tiempo de adaptación suele ser de entre una a tres semanas, aunque en algunos pasos se alarga hasta los dos meses mientras que la doctora Helena Diaz, jefa de la Unidad de Salud Mental del Hospital Universitario de Torrejón resalta la negativa del niño a la hora de ir al colegio como uno de los principales síntomas. La doctora Liñares añade que en los casos de los adolescentes, “nos debería alertar si los observamos más preocupados, estresados o frustrados”.
“Cuando el niño o adolescente no es feliz con el contacto y relación con los iguales en el ámbito escolar, puede surgir algún síntoma de corte depresivo, como tristeza, reticenciaa ir al colegio o las molestias corporales y los síntomas antes mencionados y si se prolongan en el tiempo, es un buen momento para contactar con un profesional”, concluye Jorge Pernia, psicólogo de la Unidad de Salud Mental del Hospital Universitario de Torrejón.