Las campañas de vacunación frente a la gripe ya han llegado al ecuador en nuestro país. Sobre el papel de las vacunas en la prevención de esta enfermedad vírica tan infecciosa y su gestión por parte de las comunidades autónomas, ha hablado para ConSalud.es la coordinadora nacional del Grupo de Trabajo de Actividades Preventivas de la Sociedad Española de Médicos de Atención Primaria (SEMERGEN), Esther Redondo. La experta también ha remarcado el plus de eficacia de la vacuna tetravalente frente a la trivalente.
Estamos en plena campaña de vacunación frente a la gripe en España. Dada su experiencia, ¿qué respuesta prevé que tendrá una vez termine?
No sé qué va a pasar esta temporada pero si consiguiéramos incrementar un poco las tasas de cobertura de vacunación sería bueno. El año pasado nos quedamos en torno a un 54-55% en personas mayores de 65 años, alrededor de un 38% en embarazadas y en torno a un 34% en profesionales sanitarios.
Son tasas muy bajas, pero lo bueno que tiene esto es que el margen de mejora es amplio y espero que este año podamos alcanzar mejores coberturas. Especialmente en personal sanitario, donde estamos haciendo un esfuerzo especial, y en embarazadas también.
Sí, yo creo que mejoraremos la cobertura sobre todo en estos dos grupos de riesgo: embarazadas y profesionales.
¿Cree que es necesaria una mayor labor de concienciación social para alcanzar las tasas recomendadas de vacunación antigripal en España?
Sí, sin ninguna duda, y especialmente en la vacunación de las embarazadas. En una vacuna prenatal como es la gripe la cobertura llega, como mucho, a un 38% de media porque simplemente se desconoce el efecto que esta enfermedad puede tener no solo en la embarazada sino también en el feto. Porque una embarazada que coge una gripe tiene muchas más probabilidades de tener un aborto, un parto prematuro o el bebé nacer con bajo peso.
También se desconoce el riesgo que la gripe tiene en los niños pequeños. Los menores de seis meses de edad, que de ninguna manera se les puedes vacunar porque no hay vacunas disponibles para ellos, tienen un sistema inmune muy inmaduro por lo cual no solo se pueden contagiar fácilmente de gripe, sino sobre todo no responder bien a las infecciones. De hecho, después de los mayores de 65 años, los niños son el grupo más común en las hospitalizaciones por casos graves de gripe.
“Muchas veces creemos que la gripe es una enfermedad que se cura sola en 7 días y que como mucho te tiene en cama tres días, pero no es así. Tiene unas consecuencias muy graves”
Esto la población general no lo conoce bien: Desde los medios de comunicación, los profesionales de atención primaria, las matronas y los ginecólogos, deberíamos informar más de que, igual que la vacuna de la tosferina, la antigripal también cumple una triple teoría: la madre, el recién nacido y el feto. En cuanto a los pacientes crónicos, en ellos la gripe tiene muchísimo más riesgo de complicaciones que en un paciente normal.
La gran mayoría de enfermos que cogen gripe y se complican son pertenecientes a algunos de estos grupos de riesgo. Y es que muchas veces creemos que la gripe es una enfermedad que se cura sola en 7 días y que como mucho te tiene en cama tres días, pero no es así. Pudiera ser así en una persona adulta, joven y sana; pero en una persona con una enfermedad crónica de base o con una determinada edad, la gripe pudiera tener unas consecuencias muy graves.
Además ahora sabemos que el padecer una gripe aumenta el riesgo de enfermedad cardiovascular.
En relación a este tema, ¿por qué cree que hay tanta reticencia por parte de los profesionales sanitarios para ponerse esta vacuna?
Pues no lo entiendo, pero creo que es el desconocimiento. Más allá de que no gusta especialmente porque se tiene que repetir cada año, muchos profesionales creen que por estar en contacto con el virus adquieren la inmunidad de una manera natural y nada más lejos de la realidad: por estar con un paciente en lugar de estar más protegidos, al contrario, estamos más expuestos.
Como profesional sanitario, tienes tres motivos por los que te tienes que vacunar sí o sí. Primero, no contraer la enfermedad -un motivo egoísta-; segundo, y muy importante, dar ejemplo a los pacientes; y tercero, y más fundamental de todos, no convertirte en un vector de transmisión, es decir, no poder contagiarte tú para no transmitir la gripe a un paciente a quien acaban de trasplantar o que tiene una válvula cardíaca o que tiene una patología respiratoria como el EPOC.
¿La vacunación antigripal es la forma más efectiva de prevenir la infección y sus complicaciones?
Sin duda alguna. La única forma, y la más eficaz, para prevenir la enfermedad es la vacuna. Incluso en aquellas temporadas en las que sea menos efectiva, sigue siendo la forma más eficaz. Ahorra no solo casos de gripe, sino lo que es más importante, ahorra hospitalizaciones, casos graves y muertes.
Actualmente, algunas comunidades autónomas optan por la vacuna trivalente, mientras que otras eligen la tetravalente. Como experta, ¿cuál considera que es la mejor opción?
Yo creo que la vacuna tetravalente es la mejor opción. Sobre todo porque la vacuna trivalente solo contiene una cepa del virus B, que cada vez es más divergente: el virus B tiene dos subtipos diferentes que cada vez son más diferentes el uno del otro. Además, es muy difícil predecir si va a circular el B de un tipo o el B del otro y, por lo tanto, qué cepa B hay que incluir en la vacuna trivalente.
“La vacunación antigripal ahorra no solo casos de gripe, sino lo que es más importante, hospitalizaciones, casos graves y muertes”
Pero esto con las vacunas tetravalentes no pasa, porque además de llevar dos cepas del tipo A (como las trivalentes), también llevan dos del tipo B; por lo que aportan un plus de eficacia en la vacunación antigripal.
Tanto es así, que este año ya se está utilizando en muchas comunidades autónomas de nuestro país, y a futuro la vacuna tetravalente va a ser la vacuna que se utilice en todas. A futuro pero a muy corto plazo, en un año o año y medio a lo sumo.
Las autoridades sanitarias invitan a la población a vacunarse. ¿Cree que hacerlo entre finales del mes de octubre y principios de noviembre aumenta la efectividad de la inmunización de los pacientes y evita problemas de suministro?
Sí. Yo creo que esto es una decisión muy acertada por parte del Ministerio de Sanidad y de las consejerías, porque normalmente el pico de máxima actividad de gripe empieza en diciembre y entonces se extiende hasta marzo-abril casi siempre.