Estatuto Marco: un rompecabezas para Sanidad que prevé saturar las agendas médicas de movilizaciones

Los facultativos han iniciado una cruzada para reclamar un marco de condiciones laborales que ampare sus particularidades como profesión y planean culminar con una huelga frente al Ministerio de Sanidad el 23 de mayo

La ministra de Sanidad, Mónica García, durante una rueda de prensa. (EP)
La ministra de Sanidad, Mónica García, durante una rueda de prensa. (EP)
Javier Leunda, redactor ConSalud.es
26 febrero 2025 | 11:35 h

La reforma del Estatuto Marco está suponiendo un quebradero de cabeza para el Ministerio de Sanidad. Después de más de veinte años de vigencia, la renovación del texto que regula las condiciones laborales del personal estatutario del Sistema Nacional de Salud es vista por los diferentes colectivos como una oportunidad para recoger sus respectivas reivindicaciones. Por ello, el último borrador dado a conocer por Mónica García ha levantado algunas ampollas entre gremios como el de los médicos, que no han dudado en salir a la calle para mostrar su malestar y tienen programada una huelga el próximo 23 de mayo.

Con el comienzo de 2025, el Ministerio de Sanidad decidió retomar las negociaciones con los sindicatos para seguir avanzando en el documento definitivo. Sin embargo, el primer borrador que plantearon recogía una serie de puntos que pronto comenzaron a generar fricciones. Algunos de los aspectos más controvertidos fueron la propuesta de reclasificación profesional, sobre la que muchos criticaron la ausencia de una mejora retributiva asociada a la misma; la regulación de las jornadas y guardias; o la inclusión de incompatibilidad para puestos de dirección, entre otros muchos puntos.

El pasado 10 de febrero, las batas blancas se concentraron  frente a centros asistenciales de todo el país para mostrar su descontento. Tres días después, médicos de toda España se unieron para protestar  frente al Ministerio de Sanidad

Desde el departamento de Mónica García quisieron rebajar la temperatura y aclarar que se trata todavía de "un texto vivo” abierto a propuestas y debate. Se marcó un calendario de reuniones con las organizaciones del ámbito con vistas a culminar el próximo 3 de abril. Igualmente, trasladaron una serie de aclaraciones en relación con los aspectos más polémicos del borrador. Pese a todo, nada de esto sirvió para convencer a los facultativos, que observaron en los planes del ministerio un estancamiento en sus condiciones laborales y la ausencia de reconocimiento a sus particularidades como colectivo.

A partir de ese momento, la respuesta médica no se hizo esperar. El pasado 10 de febrero, las 'batas blancas' se concentraron frente a centros asistenciales de todo el país para mostrar su descontento. Tres días después, médicos de toda España se unieron para participar en una protesta frente al Ministerio de Sanidad con la clara intención de reclamar un estatuto propio. Saben que se trata de un momento crucial para decidir el futuro de la profesión y no quieren dejar pasar una oportunidad histórica para mejorar significativamente sus condiciones de ejercicio.

Los sindicatos presentes en el Ámbito de Negociación -FSES, CCOO, UGT Servicios Públicos, CSIF y CIG-Saúde- lanzaron un órdago a Mónica García y cancelaron la reunión prevista para el 13 de febrero

De manera paralela a esta escenificación médica, los sindicatos presentes en el Ámbito de Negociación -FSES, CCOO, UGT Servicios Públicos, CSIF y CIG-Saúde- lanzaron un órdago a Mónica García y cancelaron la reunión prevista para el 13 de febrero. Estas organizaciones demandaron a la ministra su presencia física en los encuentros y lamentaron que se estuviese desviando la negociación del Estatuto Marco fuera de los “cauces colectivos” marcados. Una semana después, la propia García consiguió aplacar sus ánimos y reconducir la situación.

En este punto, el tablero se presenta complejo. Por un lado, el Ministerio de Sanidad tiene la difícil misión de contentar a las organizaciones que representan a todo el personal estatutario del SNS. Por el otro, los médicos ven cada vez más difícil que esa negociación colectiva pueda servir para implementar las mejoras laborales que ven necesarias en su profesión. Un laberinto de intereses en el que la salida se presenta todavía muy lejana, pese a que la intención ministerial pasa por encontrarla de cara a la última reunión prevista del 3 de abril.

MOVILIZACIÓN ACTIVA MEJORADA

Entretanto, los médicos no estarán de brazos cruzados. Este pasado martes, la Confederación Española de Sindicatos Médicos (CESM) y el Sindicato Médico Andaluz (SMA) llevaron al Congreso de los Diputados una petición para reunirse con todos los grupos parlamentarios con el fin de explicar su postura respecto a la modificación del Estatuto Marco y las causas de su “unánime rechazo”. Formaciones como el Partido Popular habían mostrado ya su descontento por la manera de actuar de la ministra en este asunto.

Los técnicos superiores sanitarios también ven la reforma del Estatuto Marco como una tabla de salvación ante el “menosprecio profesional” que llevan tiempo denunciando 

De la misma manera, las próximas semanas llevarán a los médicos españoles a afrontar una amplia agenda de actividad. Nada a lo que no estén acostumbrados en su ejercicio diario, por otra parte. En concreto, han convocado concentraciones en ciudades de toda España para los próximos días 5 y 12 de marzo, como parte de la campaña de movilizaciones que culminará en una gran manifestación convocada para el próximo 22 de marzo en Madrid. A todo esto habría que sumar como guinda final la huelga prevista para el 23 de mayo, a la que están llamados todos los facultativos del país.

Finalmente, otro de los colectivos que se ha puesto en alerta es el de los técnicos superiores sanitarios, quienes también ven la reforma del Estatuto Marco como una tabla de salvación ante el “menosprecio profesional” que llevan denunciando durante muchos años. En esa línea, han convocado concentraciones nacionales frente a sus centros de trabajo para los días 20 y 25 de febrero, 6 y 18 de marzo y 3 de abril.

Los contenidos de ConSalud están elaborados por periodistas especializados en salud y avalados por un comité de expertos de primer nivel. No obstante, recomendamos al lector que cualquier duda relacionada con la salud sea consultada con un profesional del ámbito sanitario.