La unión de las especialidades sanitarias de Análisis Clínicos y de Bioquímica Clínica en una sola ha dado un nuevo paso. El Ministerio de Sanidad, una vez finalizado el plazo de consulta pública de este proyecto normativo, ha abierto a audiencia e información pública -proceso que tiene por objeto “recabar la opinión de los ciudadanos titulares de derechos e intereses legítimos afectados por un proyecto normativo ya redactado”- el Proyecto de Real Decreto por el que se establece el título de especialista en Laboratorio Clínico. Un nuevo avance que, si bien acerca un poco más esta reivindicación de más de una década, también cuenta con algunos puntos cuyos profesionales consideran necesario revisar.
Desde la Sociedad Española de Medicina de Laboratorio (SEQCL), asociación que representa a estos sanitarios que trabajan alejados de la asistencia directa al paciente, abogan por un cambio de nombre. Quieren que la especialidad no se denomine Laboratorio Clínico, sino directamente Medicina de Laboratorio. “No queremos que el concepto se asocie solo a un espacio físico, como es el laboratorio clínico. El área de la Medicina de Laboratorio es un concepto mucho más amplio”, afirma a ConSalud.es su presidente, Antonio Buño.
“No queremos que el concepto se asocie solo a un espacio físico, como es el laboratorio clínico"
“Además, es la denominación que se propugna desde infinidad de entidades y organismos de todo el mundo. De hecho, las federaciones europea, americana e incluso internacional se llaman así. Por cada vez que lees Laboratorio Clínico, lees veinte veces Medicina de Laboratorio. También, de esta manera será más fácil la potencial homologación de títulos al espacio europeo desde Medicina de Laboratorio, porque la federación europea así lo recomienda”, añade. Firmes con su decisión, la SEQCL ya hizo esta aportación al proyecto de Real Decreto “con toda la evidencia científica que hay, especialmente en Europa”.
Sin embargo, comenta Buño, desde la Sociedad Española de Medicina de Laboratorio tampoco descartan, después de “revisar en detalle” cómo ha quedado la redacción final, hacer alguna aportación en lo que respecta a la definición de las competencias: “Quizá más de matices semánticos, pero viendo que el Real Decreto de las anteriores especialidades es de 2006, cuando se quiera publicar este casi habrá tenido una vigencia de veinte años. No quiere decir esto que el que esperamos que se publique en breve vaya a tener una vigencia de otros veinte años, sino todo lo contrario, pero ahora mismo nadie está en condiciones de poder asegurarlo".
"De esta manera será más fácil la potencial homologación de títulos al espacio europeo desde Medicina de Laboratorio"
“No sabemos si dentro de cinco, diez o quince años, un matiz de la redacción del Real Decreto podría llegar a ser relevante para los profesionales que entonces estén desarrollando esta especialidad”, insiste el biólogo clínico, licenciado en Medicina y Cirugía y Jefe del Servicio de Análisis Clínicos del Hospital Universitario La Paz. “No obstante, estamos hablando de matices. Trascendentes, importantes, pero que no dejan de ser matices”, recuerda. Así, Antonio Buño se muestra optimista ante la creación de esta nueva especialidad “polivalente” y que va a abarcar distintas disciplinas del ámbito del laboratorio.
“Entrará, lógicamente, Bioquímica. Pero también Inmunología, Microbiología, Genética… lo hará del mismo modo que Medicina Interna no puede no abordar competencias de Cardiología o de Neumología, y a la vez es compatible con que convivan cardiólogos, neumólogos, reumatólogos, nefrólogos o endocrinos”, apunta Buño, quien critica también que los programas formativos de las especialidades, del citado año 2006, están lógicamente muy desfasados: “Al igual que cualquier especialidad clínica o quirúrgica, no hay nada dentro de la Medicina que dure más de veinte años”.
UNA DE LAS ESPECIALIDADES MÁS TRANSVERSALES DE TODO EL SISTEMA NACIONAL DE SALUD
Y es que la clave del buen funcionamiento de los futuros servicios de Laboratorio Clínico -o, como quiere la SEQCL, de “Medicina de Laboratorio”- está en la transversalidad. Especialistas en un ámbito sanitario que tiene muchos frentes abiertos, no solo el de la Bioquímica Clínica y el de los Análisis Clínicos, y al que pueden acceder tanto médicos como farmacéuticos, químicos o biólogos. De hecho, estos últimos son el grupo más numeroso en la oferta de plazas de Formación Sanitaria Especializada (FSE).
“Dentro de la troncalidad, somos conscientes de que no todas las especialidades vamos a estar de acuerdo, tampoco podemos negar que hay áreas comunes de laboratorio que todos compartimos"
“Dentro de la troncalidad, somos conscientes de que no todas las especialidades vamos a estar de acuerdo. De hecho, tanto Inmunología como Microbiología fueron algunas de las que impugnaron el anterior Real Decreto, por los motivos que fueran”, recuerda Antonio Buño. “Pero tampoco podemos negar que hay áreas comunes de laboratorio que todos compartimos. Más alaá de la parte tecnológica, hay diversas patologías que son muy difíciles de entender si los especialistas de laboratorio no trabajan juntos. Enfermedades autoinmunes o de base inmunológica cuyo seguimiento se realiza con pruebas bioquímicas”, señala.
De hecho, indica, hay muchos hospitales que ya han unificado sus servicios de Medicina de Laboratorio y trabajan como uno solo. En otros, en cambio, están totalmente confundidos “de quien es quien” en cuanto a las especialidades de origen. “Aragón fue pionera en normalizar lo que estaba siendo una realidad, y convoca ofertas de empleo público para Medicina de Laboratorio sin distinguir la especialidad. Pero en la mayoría siguen saliendo de forma independiente, y eso genera muchos agravios comparativos y, no lo vamos a negar, conflictos entre profesionales”, concluye.