El verano de 2024 siempre será recordado como aquel en el que España volvió a convertirse en una potencia futbolística a nivel mundial. Primero fue la Selección Femenina la que, justo un año antes, en agosto de 2023, se hizo con el Mundial en Sidney por primera vez en historia, y ahora han sido los chicos los que han ratificado esta tendencia con sendos triunfos en la Eurocopa de Alemania y en los Juegos Olímpicos de París. Pero, aunque muy poca gente es consciente de ello, no son los únicos que están de enhorabuena…
El pasado mes de julio tuvo lugar, en Australia, el Mundial de Fútbol Médico (WMFC, por sus siglas en inglés), una cita que se celebra anualmente y que reúne a profesionales de todo el planeta unidos por, en este caso, dos mismas pasiones: cuidar de los pacientes y hacer deporte. Este año, España ha estado representada por la ciudad de Córdoba, cuyos jugadores proceden en su mayoría del Hospital Universitario Reina Sofía. “Aquí no hacen como en otros países, que tienen selecciones puras y duras con médicos de todos lados. Aquí hay una liga nacional, que ya va por la edición treinta, y el ganador es el que va al Mundial”, explica a ConSalud.es Rafael Reyes Vallejo, médico del Servicio de Urgencias en el mencionado hospital cordobés y “central o lateral, según lo requiera la ocasión” cuando se calza las botas de fútbol.
"Nos lo tomamos muy en serio, intentamos que sea lo más parecido posible a un club"
En este Campeonato Nacional de Fútbol Médico compiten dieciséis equipos, que se reúnen, también cada año, en una misma ciudad. En 2024, la sede ha sido Jerez de la Frontera, y hasta allí se han desplazado profesionales de Cantabria, Guadalajara, Badajoz, Murcia, León, Mallorca, Madrid… e incluso Las Palmas. Sin embargo, fue la edición de 2023, en Salou, la que le otorgó a Córdoba el privilegio de viajar a Australia, después de que el equipo ganador, el de Vizcaya, decidiese no presentarse por las complejidades que presenta un desplazamiento así.
“Sí que recibes algo de financiación por parte del colegio de médicos de tu provincia, y conseguimos algunos patrocinadores para las camisetas, pero el resto corrió a cargo de nosotros. La verdad es que el resto de países sí que han tenido algo más de apoyo, pero también es lo que yo digo: esto al final son como unas mini vacaciones, así que es complicado conseguir el dinero”, reconoce Reyes Vallejo. El Mundial de Fútbol Médico dura una semana, y, explica el facultativo, su “único” compromiso es el de jugar por las mañanas. Las tardes las dedican a hacer turismo, e incluso ha habido algunos médicos -y futbolistas- califales que han viajado a Australia antes o que se han quedado después: “Ha sido una experiencia increíble”.
"Durante el año jugamos torneos locales para intentar ayudar en actos benéficos y para promover la salud de los pacientes"
Pero también en lo futbolístico. A pesar de que el equipo de Córdoba comenzó a participar en la liga hace apenas tres años -aunque ya llevaban siete u ocho jugando al fútbol y buscando entrar en ella-, alcanzaron las semifinales del torneo… perdiendo en los penaltis contra la anfitriona. Después, se jugaron el tercer y cuarto puesto contra Polonia, que les venció por 4-0. Toda su evolución en el Mundial se pudo seguir a través de las fotos y vídeos que fueron publicando en su perfil de Instagram. “Esto es un hobby, nuestra profesión es la de ser médicos, pero nos lo tomamos en serio. Intentamos que sea lo más parecido posible a un club, con entrenador, presidente de honor, entrenamientos todas las semanas…”, afirma el médico.
De hecho, para no poder práctica de cara al torneo nacional anual, durante el año juegan campeonatos locales en la propia ciudad de Córdoba o en regiones cercanas, “siempre colaborando con asociaciones contra el cáncer o de índoles parecidas”: “También intentamos juntarnos para jugar con los bomberos, y este año incluso tuvimos la oportunidad de jugar un partido en El Arcángel, el estadio del Córdoba Club de Fútbol, por la despedida del futbolista Javi Flores y en favor de los niños con oncohematología”. “Por un lado buscamos ayudar en actos benéficos y, por otro, promover la salud tanto nuestra como de los pacientes, porque al final somos los que más tenemos que dar ejemplo”, señala Reyes Vallejo.
CASI TODAS LAS ESPECIALIDADES PRESENTES EN EL VERDE
El equipo lo forman médicos de todas las especialidades. Urgenciólogos, cirujanos, ginecólogos, digestivos, cardiólogos… y, claro está, traumatólogos. “Este año hubo un jugador que sufrió una luxación de hombro, y el traumatólogo del equipo tuvo que actuar rápidamente. Nunca viene mal tener uno”, reconoce entre risas el facultativo, presidente del equipo de Córdoba y uno de los miembros de la junta que organiza el campeonato nacional, que están intentando ampliar a 20 o 24 equipos: “Hay muchos que están detrás, pero tienen que cumplir una serie de requisitos. Por ejemplo, dentro del campo tiene que haber personas mayores de 35 años, con la idea de limitar un poco la competitividad. A veces es difícil”.
"Dentro del campo tiene que haber personas mayores de 35 años, con la idea de limitar un poco la competitividad"
Y es que el objetivo final, insiste Reyes Vallejo, no es otro que echar el rato con compañeros de otras partes de España… o, en su caso reciente, del mundo: “Hemos conocido gente de Australia, de Polonia… con la que incluso hemos quedado en jugar más torneos además del Mundial. Es algo súper bonito”. “Además, es que en nuestro caso fue de un día para otro. Nos dijeron que el equipo ganador se había caído, y en un mes tuvimos que conseguir un nuevo entrenador, organizarlo todo… porque, claro, la coordinación tampoco es fácil, y hay que avisar con un año de antelación. Es complicado comprometerte, y son muchos médicos que dejan el hospital a la vez”. De hecho, reconoce, en muchos campeonatos nacionales se han tenido que organizar “mini congresos” para poder justificar esos días de ausencia.
Con la resaca del Mundial todavía latente, y una derrota en penaltis que les dejó “destrozados física y mentalmente”, el próximo objetivo es claro: ganar el próximo torneo nacional, que se juega en Murcia, y acudir al Mundial de Canadá. “En tres añitos creo que hemos conseguido bastante. Nos hemos movido bien, tenemos mucho apoyo en Córdoba, yo personalmente he realizado multitud de entrevistas, y eso nos hace tener ganas de continuar”, sentencia.