Durante los últimos años, sólo la subida del salario mínimo interprofesional (SMI) ha hecho aumentar la nómina de las Enfermeras Internas Residentes (EIR). Así lo afirma en una entrevista con ConSalud.es, Guillermo Vera, enfermero de Familia y presidente de AEIR que añade que "esta subida no se ha producido por la voluntad de ningún servicio sanitario de incrementar el salario de las enfermeras residentes”.
Precisamente, el Estudio SEYRE ha analizado la evolución del salario medio de las enfermeras residentes (EIR), que como apunta Vera, “desde que comenzó el estudio en 2023, y respecto a este 2024, tomando Andalucía como ejemplo, en 2023 el salario bruto de una R1 de cualquier especialidad era de 1.087 euros. En 2024 el salario de una EIR R1 es de 1.098 euros. Esto supone una subida de 11 euros mensuales, que equivale a un 1’001% de aumento”, apunta Vera.
“El sueldo base es el mismo para toda la FSE, excepto para las enfermeras”
Esta cifra aumentará, según indica el presidente de AEIR, “ya que el salario mínimo a fecha de hoy es de 1.134€ y se tendrá que ajustar y abonar la diferencia, pero es una vergüenza que las EIR cobren el salario mínimo y dependan de las guardias para poder llegar a fin de mes. Al final una residente hace el doble de trabajo que una enfermera, pero cobrando la mitad”.
Vera recuerda que en el caso de las enfermeras residentes “las guardias suponen entre el 15 y el 45% de su salario final, según la especialidad y las horas que cada Unidad Docente (y su salud física y mental) les permita hacer”. El presidente de la Asociación EIR indica que esta remuneración depende de si los puestos de especialistas permiten realizar jornada complementaria en concepto de guardias o no y si su impacto sobre la remuneración total requeriría un estudio pormenorizado de cada situación particular en cada territorio.
“Si comparamos EIR con MIR, administrativamente la solución de base es la reclasificación de la categoría profesional. El sueldo base es el mismo para toda la formación sanitaria especializada, excepto para las enfermeras. Y la única diferencia con el resto es que somos enfermeras y no otra cosa. Como grado que somos, no tiene sentido esta discriminación por parte de la Administración Pública. No obstante, y aunque el A1 sea una cuestión que compete tanto al Ministerio de Sanidad como al Ministerio de Hacienda y Función Pública (este último es quien debe realizar la reclasificación, recordemos), es importante destacar que tampoco las Consejerías de los Gobiernos Autonómicos hacen absolutamente nada para compensar salarialmente esta desigualdad.
“La remuneración es algo que nos pertenece y que hay que reivindicar”
“Es muy sencillo incluir un concepto en las nóminas referente al grado universitario, pero no lo hacen. Esta sería una alternativa temporal mientras se produce la esperada reclasificación: un aumento salarial acorde al nivel y responsabilidad que nos corresponde”, reclama Vera.
“La remuneración es algo que nos pertenece y que hay que reivindicar”, sostiene Vera. “Somos especialistas para dar los mejores cuidados en determinados entornos, pero esa voluntad de hacerlo mejor no debe ser un cheque en blanco para el Sistema Nacional de Salud y los gobiernos autonómicos, mucho menos cuando hacer un EIR supone una pérdida de poder adquisitivo y de puntuación en bolsas de trabajo que los complementos hoy existentes por ser especialista ni de lejos lo compensan”, concluye el presidente de AEIR.
ESTUDIO SEYRE POR ESPECIALIDADES
El estudio SEYRE realizado por la Asociación AEIR apunta que en la especialidad de Familiar y Comunitaria, el 88’4% de las residentes cobran menos de 12 euros la hora de guardia, y el 35’6% menos de 10 euros la hora. La nómina neta total, teniendo en cuenta las guardias y el sueldo base, oscila entre los 1.000 y 1.400€ en el 68’1% de las encuestadas. Las residentes de FyC hacen mayoritariamente menos de 60 horas de guardias al mes (69’3%), estando la mayoría en un rango de 40-60 horas/mes (39’5%).
En cuanto a la especialidad de Geriatría, el estudio concluye que cobran en un 75% entre 10 y 12 euros brutos la hora de guardia. La nómina mensual, incluyendo guardias y sueldo base ronda mayoritariamente entre 1.000 y 1.200 euros en más del 50%; apenas un 43% cobra más de 1.200 euros, ninguna persona encuestada llega a los 1.600 euros brutos al mes. Las residentes de FyC hacen mayoritariamente menos de 60 horas de guardias al mes (69’3%), estando la mayoría en un rango de 40-60 horas/mes (39’5%).
“Es muy sencillo incluir un concepto en las nóminas referente al grado universitario, pero no lo hacen”
En la especialidad de Matronas, la hora de guardia se cobra a menos de 12 euros brutos en el caso del 87’1% de las encuestadas y un 9’7% cobra más de 14 euros la hora. La nómina mensual neta ronda entre los 1.000 y los 1.400 euros (81’1%). Un 22’9% realiza entre 40 y 60 horas de guardia al mes, y el 45’7% realiza menos de 40 horas al mes. Llama la atención que un 20% realiza más de 100 horas al mes de guardia.
En cuanto a las EIR de pediatría, el 87’3% cobra menos de 12 euros la hora de guardia y la mayoría realiza menos de 60 horas de guardias al mes (un 93’8%). Entre las residentes de Salud Mental el 84’8% de las residentes cobra menos de 12 euros la hora de guardia. El sueldo total neto es en el 73’8% inferior a los 1.400 euros al mes, y en el 9’5% es inferior a los 1.000 euros netos y realizan en un 87’2% menos de 40 horas al mes de guardias.
Y finalmente, en cuanto a las EIR de Trabajo, en el 86’7% de los casos a menos de 12 euros, y en el 40% de los casos a menos de 10 euros. El sueldo mensual oscila en un 86’7% entre 1.000 euros y 1.400 euros. Un 6’7% cobra menos de 1.000 euros al mes neto contando con guardias y sueldo base. El 100% de las encuestadas realiza menos de 60 horas de guardia al mes; el 66’7% hace menos de 40 horas al mes.