El número de pacientes anticoagulados en España asciende a más de un millón, y crece cada año. Por ello, con el objetivo de mejorar el abordaje de la patología, el Consejo General de Enfermería, con la colaboración de Daiichi Sankyo, ha elaborado una guía de recomendaciones prácticas, llevada a cabo por profesionales expertos.
“Este patrocinio nos va a permitir seguir trabajando en nuestro compromiso por la prevención de ictus. Estamos muy agradecidos de formar parte de esta guía que ayudará a enfermeras y a pacientes anticoagulados en su tratamiento, para reducir la morbimortalidad de los pacientes con fibrilación auricular, pues no debemos olvidar que las enfermedades cardiovasculares siguen siendo la primera causa de muerte en España y en Europa”, afirma Jorge Muñoz, director médico de Daiichi Sankyo.
Florentino Pérez Raya: “El número de pacientes anticoagulados crece cada año debido al aumento de la esperanza de vida y enfermedades asociadas a riesgo trombótico
Los pacientes anticoagulados se someten a un tratamiento que precisa un control periódico para evitar complicaciones como ictus, hemorragias graves o la muerte. Así, la anticoagulación juega un papel fundamental a la hora de disminuir morbimortalidad en enfermedades como la fibrilación auricular o la enfermedad tromboembólica venosa. Además, el ictus isquémico es una causa frecuente de morbilidad y hospitalización en España, y supone un gasto sociosanitario elevado, con un coste medio en España de 6.739 euros por paciente.
“El número de pacientes anticoagulados crece cada año debido al aumento de la esperanza de vida y enfermedades asociadas a riesgo trombótico. Pero, además, la anticoagulación plantea retos más complicados en caso de pacientes mayores, crónicos y pluripatológicos, sobre todo en relación con interacciones farmacológicas y con el riesgo de sangrados graves”, comenta Florentino Pérez Raya, presidente del Consejo General de Enfermería.
En este contexto, las enfermeras son clave en el abordaje de la situación, tanto en la prevención como en la adherencia al tratamiento o en los seguimientos. Esto se debe a que aportan gran valor al proceso asistencial, y consiguen muy buenos resultados en salud.
"Por tanto, esta guía tiene como objetivo impulsar las intervenciones enfermeras en el control y seguimiento de estos pacientes en su práctica asistencial, para mejorar la calidad y seguridad en la atención y cuidados específicos de la terapia con anticoagulantes”, asegura el presidente de las enfermeras españolas.
Florentino Pérez Raya: "Esta guía tiene como objetivo impulsar las intervenciones enfermeras en el control y seguimiento de estos pacientes en su práctica asistencial"
En lo relativo a la prescripción enfermera, los enfermeros pueden llevar a cabo una prescripción autónoma en el ámbito de los fármacos que no precisan receta médica y de los productos sanitarios de uso habitual en los cuidados de enfermería.
Además, en el caso concreto de los tratamientos de pacientes anticoagulados existe la “Guía para la indicación, uso y autorización dedispensación de medicamentos sujetos a prescripción médica por parte delas/los enfermeras/os de: anticoagulación oral”, que se publicó en el Boletín Oficial del Estado el 5 de agosto de 2023. Las citadas guías pretenden proporcionar respectivamente seguridad clínica y jurídica en los cuidados y seguimientos de los pacientes anticogulados por parte de los enfermeros.