El Consejo Internacional de Enfemeros (CIE) insta a los Gobiernos a garantizar la formación de enfermeros en el campo de la prescripción enfermera, de cara mejorar el desarrollo profesional y mantener estas competencias. Así, según informa el Consejo General de Enfermería (CGE), "mientras que algunos Gobiernos autonómicos en España muestran un evidente retraso a la hora de desarrollar el Real Decreto que regula la prescripción enfermera, el CIE insta a todos los gobiernos a garantizar la formación de las enfermeras en este terreno".
Esta petición se recoge en un documento editado por el CIE en inglés, francés y español en el que se incluyen las nuevas directrices sobre la prescripción de enfermería. El objetivo de este informe es "facilitar una comprensión común de la prescripción de enfermería como fuente de información para quienes formulan las políticas, así como para docentes, reguladores, planificadores de la sanidad, enfermeras y otros profesionales sanitarios", explica el CGE. Todo ello, mientras se "pide a los gobiernos que garanticen una formación adecuada para las enfermeras en línea con la autoridad reguladora y el desarrollo profesional continuo de cara a mantener las competencias".
De este modo, el documento incluye evidencia científica histórica acumulada por aquellos países donde las enfermeras prescriben desde hace años, poniendo de manifiesto que los enfermeros que ejercen la prescripción "con niveles de autonomía diferentes pero elevados” en todos los “posibles entornos” donde se lleva a cabo la asistencia sanitaria, realizan esta función “con seguridad y son igual de eficaces que otros prescriptores”. Además, queda reflejado que impidiendo que los enfermeros prescriban, "se provoca fragmentación en la prestación de cuidados y repercute negativamente en la calidad general de la atención de salud".
"La prescripción de enfermería existe desde hace más de 50 años en algunas regiones del mundo y puede jugar un papel importante en la mejora de los resultados de salud"
"Lo que en España ha supuesto una batalla titánica en el ámbito político y legal, en otros países de nuestro entorno se ha considerado, desde hace muchos años, como algo normal, una regulación que resulta muy beneficiosa para los pacientes y para el sistema sanitario en sí. Nos preocupa que algunas Comunidades Autónomas estén dilatando la acreditación de los profesionales o estableciendo discriminación hacia las enfermeras que no ejercen en el sistema público y que, en general, no se esté desarrollando el Real Decreto que regula la prescripción enfermera en los términos establecidos", explica el presidente del Consejo General de Enfermería, Florentino Pérez Raya.
Por su parte, la presidenta del Consejo Internacional de Enfermeras, Annette Kennedy, apunta que "la prescripción de enfermería existe desde hace más de 50 años en algunas regiones del mundo y puede jugar un papel importante en la mejora de los resultados de salud. Sin embargo, es un proceso complejo que requiere una serie de elementos críticos para sostener su desarrollo y potenciación. El CIE insta a los gobiernos a asegurarse de la existencia de niveles adecuados de formación y regulación de la profesión para realizar el trabajo preliminar con vistas a la expansión de la prescripción de enfermería en todo el mundo".
El CGE subraya que el documento "Directrices sobre la autoridad para prescribir de las enfermeras" tiene en cuenta la historia de la prescripción de enfermería y los distintos modelos, a la vez que enumera las razones más comunes de la autoridad para prescribir de las enfermeras y los profesionales sanitarios afines, en particular un mayor acceso a medicina de calidad y prácticas de medicación seguras.
"Una prescripción segura requiere un enfoque sistémico. Las Directrices contienen un marco para el desarrollo de una prescripción segura y competente para la profesión de enfermería considerando cinco elementos críticos que pueden contribuir a una prescripción de enfermería de calidad, segura y eficaz como son la realización de un programa de formación acreditado, el reconocimiento de la competencia para prescribir por parte de la autoridad reguladora correspondiente, la autorización para prescribir, la autoridad para prescribir en el ámbito de práctica y, por último, el desarrollo profesional continuo para mantener y potenciar la competencia para prescribir", concluye el Consejo General de Enfermería.