El impacto económico de la obesidad en los sistemas de salud y en la sociedad es muy elevado, debido, principalmente, a las morbilidades asociadas y a su alta prevalencia en la población. En este contexto, los costes de la obesidad en España pueden superar el 2% del PIB en la actualidad, según la World Obesity Federation. Además, está previsto que esto incremente en las próximas décadas, comprometiendo la sostenibilidad del sistema sanitario público actual.
Ante este escenario, la concienciación de la sociedad y la correcta coordinación entre profesionales se vuelven dos pilares fundamentales para revertir una situación que no solo consiste en mejorar los sistemas sanitarios, sino en preservar la salud de la población. Para dar visibilidad a la obesidad, cada tercer sábado de mayo se celebra el Día Europeo contra la Obesidad.
Uno de los profesionales clave en el abordaje de la obesidad es el endocrinólogo. “Los endocrinólogos son los especialistas que conocen más a fondo las causas, consecuencias y tratamiento de la obesidad. Por ello, son los referentes de esta patología, aunque se trate de una enfermedad, que debido a su elevada prevalencia, deban poder manejar muchos otros especialistas”, explica para ConSalud.es la Dra. Inka Miñambres Donaire, miembro del Área de Obesidad de la Sociedad Española de Endocrinología y Nutrición (SEEN).
La escasez y falta de financiación y de acceso a los tratamientos o a los circuitos adecuados dificulta "conseguir un éxito mantenido"
En este contexto, la doctora subraya que la coordinación con otras especialidades es determinante. “Lo ideal es que sea en el marco de unidades funcionales, fortalecidas por la realización de comités multidisciplinares que ayuden en la toma conjunta de decisiones clínicas”.
Por otro lado, la información es también un punto a favor para lograr combatir la obesidad y, según destaca la especialista, la actualización es fundamental y tiene diversas fuentes. “Entre ellas, destacaría el papel de las sociedades científicas, el acceso cada vez más amplio a las últimas publicaciones, los congresos y, cada vez más, las redes sociales”.
Sin embargo, los endocrinólogos enfrentan un desafío importante a la hora de tratar a pacientes con obesidad: “Conseguir un éxito mantenido en su tratamiento”. Según destaca la doctora Miñambres Donaire, esto se debe a la escasez de tratamientos, la falta de financiación y la falta de acceso al tratamiento o a los circuitos adecuados”.
Esto sucede en el marco de la autorización del uso en España de antiglucémicos para el control de peso. “Los nuevos tratamientos para la diabetes han demostrado, además de seguridad en cuanto al perfil de efectos secundarios, un efecto beneficioso sobre el peso corporal y una disminución en la mortalidad cardiovascular que va más allá del control de la glucemia. Por lo tanto han supuesto una revolución en cuanto al tratamiento de esta patología”.
"Estamos viviendo la llegada de nuevos y prometedores fármacos para el manejo de esta enfermedad, pero nosotros siempre hemos remarcado la necesidad de un tratamiento multidisciplinar y coordinado"
Así, en los últimos años ha cambiado en gran medida el enfoque del tratamiento de la obesidad. “Estamos viviendo la llegada de nuevos y prometedores fármacos para el manejo de esta enfermedad, pero nosotros siempre hemos remarcado la necesidad de un tratamiento multidisciplinar y coordinado entre los distintos especialistas que entran en juego en el tratamiento de la obesidad, como endocrinólogos, médicos de Atención Primaria, enfermería, dietistas o psicólogos, entre otros”.
Otro de los aspectos fundamentales del abordaje de la obesidad pasa por el manejo de las expectativas de los pacientes, en cuanto a los resultados del tratamiento. “Lo más importante cuando tratamos la obesidad es que los objetivos a conseguir sean pactados y realistas en base a las evidencias disponibles. El paciente debe conocer qué resultados se pueden esperar de cada intervención, de cara a que pueda decidir conjuntamente con su médico la mejor estrategia de tratamiento”.
"El paciente debe conocer qué resultados se pueden esperar de cada intervención, de cara a que pueda decidir conjuntamente con su médico la mejor estrategia de tratamiento"
Finalmente, sin concienciación se complica el logro de avances en obesidad, y aún queda mucho trabajo por hacer en este asunto, tanto por parte de profesionales como del conjunto de la sociedad. “A pesar de que los profesionales están cada vez más concienciados, aún falta mucho trabajo por hacer. Por ello, desde las sociedades científicas implicadas estamos trabajando continuamente para mejorar la visibilidad del problema”.
En lo relativo a la sociedad, la especialista considera que el mayor trabajo que queda por hacer es en lo referente al estigma social que sufren las personas con obesidad, que las culpabiliza de su enfermedad”. Para mejorar la concienciación y la comprensión de la enfermedad, “se necesitan medidas a todos los niveles, pasando por la educación y, sobre todo, con la imagen que los medios y redes sociales ofrecen sobre esta enfermedad”.