Captar pacientes que transitan por el primer nivel asistencial del Servicio Madrileño de Salud (Sermas). Ese es el objetivo del Equipo de Atención Primaria, uno de los colectivos que participa como grupo de investigación en el proyecto GenObIA, un estudio coordinado por el profesor Antonio López Farré y que está financiado tanto por la Unión Europea (UE) como por el Gobierno de la Comunidad de Madrid.
El especialista del Centro de Salud de Villanueva de la Cañada e investigador principal del grupo, el doctor Joaquín Figueroa, explica en ConSalud.es que la función principal de los profesionales de Atención Primaria en este estudio se basa en dar a conocer a los pacientes la existencia de esta red y, si les atrae el proyecto, invitarles a participar.
Los médicos de Familia, señala el facultativo, tienen un papel determinante a la hora de combatir el sobrepeso o la obesidad: "Estos especialistas educan sobre hábitos de vida, conductas en la dieta o patrones de sueño, y ponen en antecedentes a los pacientes sobre todos aquellos factores y prácticas de riesgo que son nocivos para la salud", manifiesta el doctor Figueroa, quien añade que "el sobrepeso y la obesidad llevan ligadas comorbilidades como la diabetes, la hipertensión arterial y otros tantos problemas cardiometabólicos que, al final, son una bomba de relojería cuando se juntan".
"El sobrepeso y la obesidad llevan ligadas comorbilidades como la diabetes, la hipertensión arterial y otros tantos problemas cardiometabólicos que, al final, son una bomba de relojería cuando se juntan"
En la misma línea se muestra la doctora Olga García Vallejo, médico de Familia del Centro de Salud Comillas (Madrid) y coordinadora de uno de los grupos de Atención Primaria del consorcio GenObIA. En declaraciones a este diario, la facultativa entiende que es necesario aumentar la inversión en el área de la prevención, dirigiendo nuestra sanidad desde el curar hacia el cuidar.
"Para nosotros es muy importante poder predecir el riesgo de sufrir obesidad y sus comorbilidades asociadas", subraya la doctora García Vallejo, agregando que los pacientes deben prevenir la aparición de esta enfermedad a través de un cambio en sus hábitos de vida y fomentando el ejercicio físico, "individualizando cada caso con la ayuda de la genética".
Cuestionado por el rol que jugará el algoritmo predictivo que se está desarrollando en este proyecto de investigación, Joaquín Figueroa anuncia que este sistema aportará una información "muy interesante". "Probablemente, desde el momento en que se ponga en marcha y se difundan informaciones accesibles a todos los públicos, que hagan entender el alcance del estudio genético y la incidencia en el sobrepeso y la obesidad, ciertos perfiles de pacientes podrán revertir, incluso evitar, esta situación de morbilidad", sostiene.
"UNAS EXPECTATIVAS MUY PROMETEDORAS"
"A nivel grupal, las expectativas son absolutas, muy prometedoras. Y, a nivel personal, tanto o más", resalta el doctor Figueroa. "En muchos casos la genética se puede modular por medio de parámetros externos a la genética individual, lo que se conoce como epigenética", expresa el investigador principal. Por todo ello, insiste Joaquín Figueroa, este es el camino en el que están inmersos: "Buscamos tener este tipo de instrumentos en la mano y llevarlos, de forma aplicable, a todos los ámbitos de la salud pública".
"Buscamos tener este tipo de instrumentos en la mano y llevarlos, de forma aplicable, a todos los ámbitos de la salud pública"
Para la doctora García Vallejo, este proyecto es "muy novedoso". "Cuando planteé la iniciativa con todos nuestros investigadores, sobre todo con los profesionales de Enfermería, que son los que más contacto tienen con los pacientes, les encantó la idea porque la inteligencia artificial nos puede aportar muchos datos", concluye la facultativa, agradeciendo a López Farré la inclusión de su grupo en el estudio.