Este domingo 11 de febrero se celebra el Día Internacional de la Mujer y la Niña en la Ciencia. Una fecha en la que se quiere dar visibilidad a las figuras femeninas en este campo, pues, según las cifras de las Naciones Unidas, la mayoría de los países, independientemente de su nivel de desarrollo, no han alcanzado la igualdad de género en este sector.
Uno de los grandes ejemplos que se pone sobre la mesa desde la ONU es que “las mujeres suelen recibir becas de investigación más modestas que sus colegas masculinos y, aunque representan el 33,3% de todos los investigadores, sólo el 12% de los miembros de las academias científicas nacionales son mujeres”. Si observamos campos concretos como por ejemplo el de la Inteligencia Artificial, tan en boga en los últimos tiempos, vemos que sólo uno de cada cinco profesionales (22%) es una mujer.
De hecho, “las investigadoras suelen tener carreras más cortas y peor pagadas. Su trabajo está poco representado en las revistas de alto nivel y a menudo no se las tiene en cuenta para los ascensos”. Pero la ONU no es la única entidad que alerta de esta situación, el Ministerio de Ciencia, Innovación y Universidades también daba a conocer hace unos meses su informe sobre “Científicas en Cifras 2023”, y alertaba también de esta situación.
Las investigadoras suelen tener carreras más cortas y peor pagadas
Si bien queda camino por recorrer, no todos los datos son catastróficos y también se han producido avances. En España, el porcentaje de investigadoras sigue aumentando y representan ya el 42% del personal investigador. Además, la proporción de mujeres continúa ascendiendo según avanza la carrera investigadora. En el caso concreto de la presencia de mujeres en los puestos de toma de decisiones, se ha aumentado hasta 3 puntos en los puestos de rectora de universidades, y llegan a representar el 25%.
Igualmente, en el informe “Mujeres e Innovación” del Ministerio de Ciencia, se celebra que hayamos vivido una aceleración en la proporción de recursos humanos en ciencia y tecnología entre las mujeres, con un incremento de casi 4 puntos porcentuales entre 2018 y 2021, el doble que en el caso de los hombres.
También hemos logrado reforzar el papel de las mujeres en las actividades de transferencia de conocimiento emprendidas en el CSIC. Más concretamente, “en 3 de cada 4 patentes de prioridad solicitadas por el CSIC (72,8%) en 2020 al menos figuraba una mujer en la solicitud (107 de 147 solicitudes)”. También se ha dado un mayor protagonismo a las investigadoras en el liderazgo de proyectos financiados I+D+I en el periodo 2017-2020, con un crecimiento de más de 7 puntos porcentuales en estos 4 años.
No obstante, hemos logrado reforzar el papel de las mujeres en las actividades de transferencia de conocimiento emprendidas en el CSIC
Ahora bien, como decimos, queda camino por recorrer. Existe un amplio margen de mejora en cuanto al número de mujeres en las carreras de ciencias como Ingeniería, pues sólo representan el 26,5% de todos los estudiantes. En el caso de Ciencias de la Salud, no obstante, pasa al contrario: son las mujeres quienes representan casi el 72% de todos los estudiantes. Pese a ser una carrera feminizada, eso sí, al llegar a etapas más avanzadas dentro de esta carrera, la mujer no asciende.
Esto se conoce como el “efecto tijera”. A medida que avanza la carrera, la proporción de mujeres desciende, y sólo 1 de cada 4 mujeres ostenta los puestos más altos. Los motivos, según afirma el Ministerio, “son principalmente, además de la precariedad e inestabilidad, la mayor insatisfacción en comparación con sus colegas hombres, y el mayor pesimismo respecto a su desarrollo profesional futuro”. Así lo determinó además el 'Estudio de situación de las jóvenes investigadoras en España', publicado por la Unidad de Mujeres y Ciencia en 2021.
Ello redunda en la situación de que las mujeres siguen sin participar de forma plena e igualitaria en la toma de decisiones en el sistema de ciencia. En 2021, concretamente, hubo 19 rectoras (25%), 333 decanas o directoras de centro (37%) y 240 vicerrectoras, el 33%. Por lo tanto, vemos una clara infrarrepresentación en estos puestos.