La cirugía bariátrica es una intervención que puede ayudar a muchos pacientes de obesidad, pues permite perder peso adicional y reducir el riesgo de que se presenten otros problemas de salud. Actualmente, en España se realizan en torno a 11.000 y 12.000 cirugías bariátricas al año. Sin embargo, debido a que aún no se registran de forma correcta, se trata de cifras inexactas, pero reflejan que solo se llega en torno al 2% o 3% de los potenciales beneficiarios de la misma.
En los últimos años, se ha visto un incremento de tratamientos para hacer frente a la obesidad, una enfermedad crónica y compleja que aún carece de la suficiente concienciación por parte de la sociedad y los propios profesionales que la abordan. Por ello, cada tercer sábado de mayo, se busca visibilizar este grave problema de salud pública con el Día Europeo contra la Obesidad.
Uno de los profesionales que intervienen en el manejo de la obesidad son los cirujanos bariátricos. “Como cirujano bariátrico, trabajo con pacientes que viven con obesidad y que requieren de tratamiento quirúrgico para abordar su enfermedad. Actualmente mi trabajo consiste en la evaluación preoperatoria, la cirugía y el seguimiento postoperatorios”, explica para ConSalud.es el Dr. Amador García, presidente de la Sociedad Española de Cirugía de la Obesidad (SECO).
“Es imprescindible que los profesionales sanitarios hagamos un especial esfuerzo en prevenir el desarrollo de esta epidemia”
Desde la SECO promocionan de forma intensiva la formación de cirujanos bariátricos, la creación y acreditación de equipos multidisciplinares, y la información a los pacientes que padecen obesidad y sus enfermedades asociadas, según explica el doctor.
Cuando un paciente se va a someter a una cirugía bariátrica, sigue un proceso desde la primera consulta hasta la intervención que puede variar de un centro a otro. “Sin embargo, en líneas generales, consiste en la realización de exploraciones complementarias y preparación para la cirugía”. Estas exploraciones complementarias evalúan que no haya contradicciones o limitaciones para la realización de la cirugía.
La preparación para la cirugía tiene varias vertientes. “En nuestro centro, se remite a los pacientes al Servicio de Rehabilitación para hacer una preparación física adecuada. Además, se inicia un seguimiento nutricional con consejos y recomendaciones para una dieta saludable, y las indicaciones de dieta específica antes de la cirugía. Por último, en aquellos pacientes que así lo deseen, se les ofrecen una serie de sesiones presenciales con información sobre lo que es la obesidad, el tratamiento quirúrgico de la misma y recomendaciones básicas para el pre y el postoperatorio”.
Esto evidencia que el manejo de la obesidad debe hacerse partiendo de la coordinación entre numerosos especialistas. “Por ello, la gran mayoría de los centros trabajan con equipos multidisciplinares. Para esta patología tan compleja, es imprescindible este abordaje”.
De este modo, los equipos suelen mantener reuniones periódicas, y hay comunicación constante para mejorar el abordaje integral. Además, la mayoría de los equipos han desarrollado protocolos que permiten integrar y coordinar los esfuerzos, evitar consultas repetitivas y conseguir la máxima eficacia.
Una vez que el paciente se ha sometido a la cirugía, se realiza un seguimiento por parte de cirujanos, nutricionistas y endocrinólogos. “En función del momento postoperatorio tendrá más peso un especialista u otro. Las recomendaciones son que el seguimiento más intensivo sea durante los primeros dos años y se mantenga hasta al menos cinco años. Pero la obesidad es una enfermedad crónica, y será necesario integrar a la Atención Primaria para continuar con esta labor de por vida”.
Los profesionales son conscientes de que la obesidad es un problema de salud pública, y lo enfocan siguiendo dos orientaciones. La primera hace referencia a la prevención e información de la sociedad de que se está viviendo un grave problema “de presente y futuro”. “Es imprescindible que los profesionales sanitarios hagamos un especial esfuerzo en prevenir el desarrollo de esta epidemia”.
"La obesidad es una enfermedad crónica y recidivante, es algo con lo que la persona va a tener que lidiar toda la vida"
Sin embargo, el Dr. García indica que “ya vamos tarde, por lo que tenemos que tratar el problema que ya está delante de nosotros. Por ello, es imprescindible orientar y organizar los recursos para tratar a las personas que ya viven con obesidad y padecen sus efectos secundarios. Estos recursos son limitados y por este motivo debemos organizarlos y orientarlos para tratar a cuantos más pacientes, y sobre todo a los que más se puedan beneficiar y los que más lo puedan necesitar”.
Finalmente, el experto recuerda que la educación del paciente, tanto en obesidad como en cirugía bariátrica, es determinante. “Hay pocas patologías en las que la educación del paciente sea tan importante. La obesidad es una enfermedad crónica y recidivante, es algo con lo que la persona va a tener que lidiar toda la vida. Por eso, la educación es imprescindible, y posiblemente sea uno de los talones de Aquiles de muchos equipos”.
El doctor Amador García concluye que “hay pacientes que solo ven un exceso de peso, otros una talla más grande de la que les gustaría, y otros que simplemente acuden por imitación de una persona cercana. En líneas generales hay un gran desconocimiento de lo que es la obesidad, que es una enfermedad, y que es grave. Esta falta de concienciación también se traduce en el desconocimiento de los tratamientos y de las implicaciones que estos tienen”.