Cada 13 de febrero se conmemora el Día Mundial de la Cirugía Maxilofacial, a propuesta de la International Association of Oral and Maxillofacial Surgery (IAOMS). Este día Internacional de la OMS celebra las contribuciones que los cirujanos orales y maxilofaciales hacen a la sociedad de todo el mundo y busca elevar el perfil de la especialidad.
Durante los últimos años los avances más significativos en el campo de la cirugía maxilofacial han estado muy relacionados con la medicina 3D. Así lo afirma en declaraciones a ConSalud.es, el Dr. Jose Luis Cebrián, presidente de la Sociedad Española de Cirugía Oral y Maxilofacial (SECOMCyC), quien explica que esta tecnología “nos ofrece a los profesionales la posibilidad de planificar nuestras cirugías en tres dimensiones: desde el TAC y la resonancia del paciente para luego poder llevar esa planificación al quirófano y mediante los métodos de navegación intraoperatoria”.
Gracias a estos avances, señala el experto, “se pueden llevar a cabo cirugías más predecibles y basadas en una planificación virtual con las que podemos realizar prótesis a medida para diferentes situaciones: tanto en cirugía reconstructiva oncológica como en cirugía de las deformidades, de manera que personalizamos totalmente la cirugía de cada paciente”.
“El mayor logro en los últimos años ha sido la personalización de la cirugía gracias al apoyo tecnológico y al desarrollo de las tecnologías 3D”
En los últimos años ha cambiado totalmente la forma de trabajar de los cirujanos maxilofaciales, reconoce Cebrián, “aunque obviamente se puede seguir operando sin esta tecnología”, añade. Estos avances aportan un beneficio fundamental al paciente como es la seguridad y la posibilidad de obtener unos resultados más predecibles. Para el cirujano, la principal ventaja ha sido conseguir que sus tratamientos sean más precisos.
Gracias a estos novedosos sistemas, las cirugías se llevan a cabo con una mayor personalización, tal y como explica el experto: “Dentro de que todo está protocolizado, estos sistemas permiten que cada paciente reciba el tratamiento que necesita y no un procedimiento estandarizado. Una vez empiezas a planificar en tres dimensiones, a realizar biomodelos, prótesis a medida o planificaciones virtuales, constatas que todo va mucho mejor y que lo acabas necesitando”.
“Los cirujanos maxilofaciales españoles somos los que aportamos un mayor número de candidatos al board europeo de cirugía oral y maxilofacial tradicionalmente”
Todos estos avances tecnológicos exigen una mayor formación de los profesionales que desde la SECOMCyC plantean en dos planos: “Por un lado, intentamos formar a nuestros residentes, y, por otro, formar a aquellos profesionales que en su momento no necesitaron acceder a estas tecnologías y ahora precisan conocimientos de medicina 3D”. Esta formación ya se ofrece a través de los cursos de formación continuada ofertados por la sociedad. Además Cebrián reconoce que la sanidad española tiene como “asignatura pendiente” dar cabida a los ingenieros biomédicos “con los que se trabaja a diario y se tiene un contacto laboral muy muy estrecho”.
En este Día Mundial de la Cirugía Maxilofacial, se pone de manifiesto la importancia de que las sociedades de profesionales estén en contacto “para poder ofrecer al paciente un tratamiento multidisciplinar”, afirma Cebrián. “Además, nosotros estamos en contacto con sociedades de otros países, especialmente con la Unión Europea de Médicos Especialistas (UEMS), con la que participamos activamente. De hecho los cirujanos maxilofaciales españoles somos los que aportamos mayor número de candidatos al board europeo de cirugía oral y maxilofacial tradicionalmente”, añade.
“Cada vez realizamos más procesos de cirugía ortognática en pacientes de ortodoncia porque detectamos que el problema está en la posición del hueso”
Los cirujanos maxilofaciales han sido popularmente conocidos principalmente por las operaciones de extracción de muelas del juicio, caninos, etc. Cebrián explica que recientemente, “en el ámbito de la ortodoncia, tanto los ortodoncistas como los maxilofaciales nos hemos concienciado de que muchas de las consultas que realizan los pacientes de ortodoncia es no es porque los dientes estén mal colocados, sino porque el hueso no está en la posición que debería y eso nos lleva a realizar cada vez más procedimientos de cirugía ortognática”. También señala que ha sido muy importante el desarrollo de la cirugía mínimamente invasiva de la articulación temporomandibular, que es una patología muy frecuente y en la que ahora mismo casi todo se soluciona mediante artroscopia. Además destaca que “en cirugía oncológica y cirugía reconstructiva es quizá por lo que más destacábamos los cirujanos maxilofaciales”.
El campo de la cirugía maxilofacial afrontará durante los próximos años varios retos. Cebrián apunta que el primero de ellos “es encontrar y reivindicar nuestro lugar dentro de la patología de cabeza, en un momento en el que muchas especialidades lo reclaman”. Además, añade, “debemos seguir siendo necesarios para tratar tanto la patología de las deformidades, en la que los cirujanos maxilofaciales siempre hemos estado implicados desde el nacimiento del niño hasta la edad adulta; así como la patología oncológica”. Otros de los retos que se proponen desde esta especialidad es “aplicar los principios de la cirugía estética a todos nuestros pacientes, ya que trabajamos en la cara y además nuestros residentes actualmente también están muy interesados en la cirugía estética”.
Y por último destaca: “Tenemos una labor muy importante en el cáncer de cavidad oral, una patología que previsiblemente va a seguir aumentando en los próximos años, y que son pacientes que tratamos nosotros desde hace años y en los que seguimos teniendo un papel fundamental”.
“Dentro de unos años no será raro ver a cirujanos en el quirófano operando pacientes con gafas de realidad aumentada o de realidad virtual”
Sobre el pasado, presente y futuro del trabajo de estos especialistas, Cebrián reflexiona: “Si echamos la vista atrás en el tiempo, los procedimientos que realizamos son prácticamente los mismos que se han venido realizando durante los últimos veinte o veinticinco años, lo que ha cambiado mucho es la forma cómo los realizamos. Pienso que durante la próxima década vamos a ver como se establece de forma total la cirugía 3D y personalizada”, vaticina el experto. “Vamos a ver cómo se incorporan a nuestra práctica clínica diaria una serie de herramientas por las que no será raro ver a cirujanos en el quirófano operando pacientes con unas gafas de realidad aumentada o unas gafas de realidad virtual, algo que ahora es excepcional pero que se generalizará dentro de unos años”, concluye.