Hoy, sábado 27 de mayo, se celebra el Día Mundial de la Medicina de Urgencias y Emergencias, que representa al segundo colectivo de la sanidad española con mayor número de profesionales después de los enfermeros. Cerca de 25.000 de estos médicos forman parte de SEMES (Sociedad Española de Medicina de Urgencias y Emergencias), organización fundada en 1987 y que tiene muy presente esta fecha en un año en el que esperan convertirse, tras mucho tiempo de espera, en especialidad MIR de pleno derecho.
SEMES ha elegido para la ocasión el lema “Tu seguridad, nuestra prioridad”, términos que la Sociedad considera sinónimos para los urgenciólogos. “El salto hacia la especialidad primaria de Medicina de Urgencias y Emergencias supondrá una mayor seguridad de asistencia en los pacientes, además de la homogeneización definitiva de estos profesionales con todo el resto de Europa y con la mayoría de países de la comunidad internacional, además de la planificación adecuada de los recursos humanos en los servicios”, explica el Dr. Tato Vázquez Lima, su presidente.
Con motivo de este día tan especial para los médicos de urgencias y emergencias españoles, que han visto aplazados sus actos públicos por parte de SEMES debido a que coincide con la jornada de reflexión de las Elecciones Autonómicas y Municipales 2023 que se celebran este domingo (todas las actividades previstas tendrán lugar en unos días, a partir del 7 de junio, cuando se inaugurará el 33 Congreso Nacional de SEMES), ConSalud.es ha podido hablar con Carmen Camacho, vicepresidenta 2ª de la Sociedad. “Tenemos que dejar de ser de los escasos países que no tienen especialidad de urgencias y emergencias”, reclama Camacho.
¿Cómo se afronta este día desde la Asociación? ¿Aprovecharán para reivindicar el papel de los médicos, enfermeros y técnicos de urgencias y emergencias en la sanidad española?
Este año, de manera coordinada con todos nuestros homólogos en el mundo, queremos poner el énfasis en la seguridad del paciente, uno de los principales retos de la salud pública tal y como ha puesto de manifiesto la OMS en su ‘Plan de Acción para la Seguridad del paciente global, 2021-2030’.
Hay que ser consciente de la importancia de garantizar la seguridad del paciente en todos los procesos de la atención sanitaria, y, por supuesto, también en los servicios de urgencias y emergencias, donde la atención adecuada es crítica en muchas ocasiones para la supervivencia de los pacientes. Por ello, desde España estamos muy contentos con la perspectiva de la aprobación inminente de la Especialidad de Medicina de Urgencias y Emergencias (EMUE), que, sabemos, contribuirá a aumentar la seguridad del paciente.
Queremos aprovechar este día para dar visibilidad a nuestro trabajo y a nuestro compromiso con los pacientes y con la sociedad como médicos y enfermeros urgenciólogos y emergenciologos y también como técnicos de emergencia sanitaria, que son las tres categorías profesionales mayoritarias en SEMES.
SEMES es la tercera sociedad científica de España por número de socios
-Resulta curioso cómo, sin gozar de una especialidad en el sistema de formación de los MIR, la suya sea la segunda en número de profesionales dentro de la comunidad médica en España. ¿Es quizá por ello que el Ministerio de Sanidad sigue sin incluir la especialidad?
Efectivamente, SEMES es el segundo colectivo sanitario más numeroso de España y la tercera sociedad científica por número de socios. Además, tiene presencia en todo el territorio gracias a una estructura federal con 17 delegaciones autonómicas y 32 grupos de trabajo nacionales.
Es por esto que debería de ser lo contrario, una razón más para aprobar la especialidad, de la misma manera que se han aprobado en otros países de Europa e incluso en nuestro mismo país en el caso del ámbito militar. La Especialidad EMUE es necesaria para poder garantizar la atención de calidad que los ciudadanos merecen y la seguridad del paciente, que es el lema de nuestro 27M.
Además, es parte de la solución de los problemas de planificación de recursos humanos que están viviendo nuestros compañeros de atención primaria y que cuentan con todo nuestro apoyo, y queremos dar la posibilidad de estudiar esta especialidad al gran número de jóvenes que sienten vocación por la Medicina de Urgencias y Emergencias.
Tenemos que dejar de ser de los escasos países que no tienen especialidad de urgencias y emergencias, ya que existe en la práctica totalidad de los países de la Unión Europea y de la comunidad internacional.
-¿Se sienten de alguna forma infravalorados por este hecho con respecto a otras profesiones de la sanidad en España?
Por supuesto, este es un hecho diferenciador con otros profesionales. Pensemos que las urgencias suponen la entrada de casi el 60% de los pacientes que ingresan en hospitales y, en muchos casos, son el único dispositivo accesible, ya que su horario es de 24/7/365 días al año.
Los urgenciólogos tienen un papel imprescindible en servicios de patologías tiempo-dependientes, pero no tienen una formación específica y reglada.Cuando un médico quiere ser urgenciólogo, no tiene el camino diseñado, no hay un itinerario formativo que garantice la cobertura de todas las áreas asistenciales que se tratan en urgencias como sí ocurre en el resto de especialidades reconocidas oficialmente. Como decía anteriormente, en prácticamente todos los países de la unión europea existe la especialidad de urgencias y emergencias, y la movilidad y el intercambio de profesionales con otros países tampoco está en igualdad de oportunidades cuando en el nuestro no existe la especialidad.
La realidad es que cada uno de nosotros nos hemos formado de diferentes maneras, y eso me parece que es una clara infravaloración por parte del sistema. El derecho de los urgenciólogos a una formación reglada no será una realidad hasta que no se apruebe oficialmente en nuestro país la especialidad de Urgencias y Emergencias.
Cada uno de nosotros nos hemos formado de diferentes maneras
-La anterior ministra, Carolina Darias, confirmó en el pasado mes de febrero en el Senado que la de Urgencias y Emergencias será próximamente una nueva especialidad MIR junto a Genética Clínica y Enfermedades Infecciosas. Sin embargo, la presidenta de la Asociación Española de Genética Humana nos comentó recientemente que, por su parte, “no hay ningún avance significativo”. ¿Cómo va el tema con su especialidad? ¿Algo ya más en firme?
Confiamos en la aprobación de la EMUE en las próximas semanas y lo recibiremos, si es así, con gran alegría e ilusión. Cuando el Ministerio resuelva la solicitud positivamente, tal y como esperamos, deberá iniciarse la elaboración y tramitación del Real Decreto de creación de la EMUE, para posteriormente entrar en vigor con su publicación en el Boletín Oficial del Estado: La EMUE será una realidad de pleno derecho solo cuando esté publicada en el BOE.
Además, consideramos que el acuerdo alcanzado alrededor de la solicitud de nuestra especialidad constituye un hito político muy importante, porque se ha logrado un consenso casi unánime en el apoyo a su presentación. Es decir, la EMUE cuenta con el apoyo transversal de la gran mayoría de fuerzas políticas tras haberse dirimido las diferencias entre sociedades científicas y entre varios territorios con opiniones encontradas. Agradecemos al Gobierno de España y a los partidos políticos su apoyo y capacidad de llegar a este consenso que creemos que conseguirá que la EMUE sea posible.
Nuestra especialidad MIR ha logrado un consenso casi unánime en su presentación
¿Qué otras reivindicaciones lanza SEMES cuando se reúnen con el Ministerio de Sanidad?
Los problemas actuales de los servicios de urgencias y emergencias radican, principalmente, en el aumento de la presión asistencial, sobre todo en lo relacionado con patologías habituales, virus estacionales, salud mental, dificultad de acceso al sistema de atención primaria y demora en ingresos (drenaje de la urgencia); en la escasez e inestabilidad de personal debido a las plantillas no dimensionadas (excesivo índice de temporalidad), en el envejecimiento y en la falta de relevo generacional en las plantillas; y también en la falta de formación reglada y homogénea al no existir la especialidad de urgencias y emergencias, ya que el sistema no es capaz de garantizar una atención de calidad e igualitaria en todo el territorio nacional.
Andrés Cuartero Barbanoj, Jefe de Psicología del Sistema de Emergencias Médicas de Cataluña (SEM), comenta cómo, al menos en Cataluña, están muy orgullosos con el papel que realizan, ya que además son muy pocos países los que tienen instaurada esta especialidad dentro de los servicios de urgencias y emergencias. ¿Cómo es a nivel español? ¿Creen que se debería potenciar más?
La asistencia sanitaria de urgencias y emergencias debe atender a las necesidades de los pacientes de una manera integral, dando respuesta a las necesidades también que surgen no sólo con la persona que estamos atendiendo sino también con su entorno. La incorporación de los psicólogos a la emergencia, algo que comenzó en 2004, ha sido beneficiosa para los pacientes, pero también para nosotros, los profesionales. No todos los servicios de emergencia en la actualidad cuentan con psicólogos en sus plantillas, pero cada vez son más los que los incorporan. Sin duda, esa es una de las líneas de trabajo para cualquier servicio de emergencias que aun no los haya incorporado.