Un reciente estudio de la Universidad de Cambridge ha revelado que un "abismo de malentendidos y falta de comunicación" entre médicos y pacientes está contribuyendo a diagnósticos erróneos de enfermedades autoinmunes como el lupus y la vasculitis. Esta situación ha llevado a que muchos pacientes sean diagnosticados con trastornos de salud mental o psicosomáticos, causando daños a largo plazo en su salud.
Según la Dra. Melanie Sloan, de la Universidad de Cambridge, "aunque muchos médicos querían tranquilizar a la gente al sugerir una causa psicosomática o psiquiátrica para síntomas inicialmente inexplicables, este tipo de diagnósticos erróneos pueden generar una multitud de sentimientos negativos e impactos en la vida, la autoestima y la atención". La doctora asegura que "estos parecen no resolverse en casi ningún caso, incluso después de los diagnósticos correctos".
El estudio, que incluyó a más de 3.000 participantes entre pacientes y médicos, encontró que los diagnósticos erróneos pueden afectar la salud mental de los pacientes, llevando a ansiedad y depresión. “Un médico me dijo que me estaba provocando dolor y todavía no puedo olvidar esas palabras. Decirme que me lo estaba provocando me ha causado mucha ansiedad y depresión", relataba un paciente.
"Ha dañado mucho mi confianza y coraje para contarle lo que me pasa a los médicos"
Los datos del estudio muestran que más del 80% de los pacientes sintieron que su autoestima se vio afectada, mientras que el 72% afirmó que el diagnóstico erróneo sigue perturbándolos incluso décadas después. Además, estos pacientes tienden a desconfiar de los médicos y evitar los servicios de atención sanitaria. "Ha dañado mucho mi confianza y coraje para contarle lo que me pasa a los médicos. Incluso dejé de tomar mi medicamento inmunosupresor", confiesa otro paciente.
Otro testimonio ha descrito las graves consecuencias psicológicas de estos diagnósticos erróneos: "Cuando un reumatólogo me despidió, yo ya tenía tendencias suicidas, eso me hizo perder el control. Afortunadamente, soy terrible para suicidarme, es mucho más difícil de lo que uno piensa. Pero el terrible desdén de los médicos cuando tienes una extraña colección de síntomas es traumático y empiezas a creerles, que todo está en tu cabeza".
Sin embargo, el estudio también muestra que es posible reconstruir la confianza entre pacientes y médicos. Un paciente relató una experiencia positiva con un doctor que reconoció su error: "Se sorprendió y no tenía ni idea... Fue genial. Lo aceptó, escuchó y se disculpó profundamente. Para mí, la cicatriz del encuentro original se transformó en algo mucho más positivo".
"Necesitamos que más médicos entiendan cómo un diagnóstico erróneo de este tipo puede provocar daños mentales"
Mike Bosley, coautor del estudio y paciente con enfermedades autoinmunes, ha insistido en la importancia de concienciar a los médicos sobre las repercusiones de un diagnóstico erróneo. "Necesitamos que más médicos entiendan cómo un diagnóstico erróneo de este tipo puede provocar daños mentales y emocionales duraderos y una pérdida desastrosa de confianza en los médicos".
Los investigadores recomiendan que los médicos discutan con los pacientes sobre diagnósticos erróneos previos y ofrezcan apoyo psicológico. Además, proponen que los servicios de salud faciliten el acceso a terapeutas para reducir los impactos negativos a largo plazo. El profesor Felix Naughton, de la Universidad de East Anglia, ha subrayado que "el diagnóstico de enfermedades reumáticas autoinmunes puede ser complicado, pero si los médicos clínicos conocen mejor cómo se presentan, podemos reducir el riesgo de diagnósticos erróneos".