Un estudio liderado por Centro de Estudios Epidemiológicos sobre las Infecciones de Transmisión Sexual y Sida de Catalunya (CEEISCAT) ha demostrado la importancia de los conocidos ‘autotests’ a la hora de diagnosticar los casos asintomáticos o que no presentan la sintomatología típica de la viruela del mono (mpox) para frenar infecciones.
El trabajo publicado en la revista 'Nature Communications', ha contado con la participación de IrsiCaixa y el Hospital Germans Trias i Pujol, informan en un comunicado.
Han evaluado una estrategia de cribado del virus a partir de la autotoma de muestras biológicas entre gays, bisexuales, otros hombres que tienen sexo con hombres y mujeres trans, colectivos "potencialmente expuestos" a este virus.
Encuestaron a los participantes sobre su satisfacción con la metodología del automuestreo, "certificando un alto grado de aceptación por su facilidad y eficacia"
Según los autores, limitar la prueba sólo a las personas sintomáticas resulta insuficiente para hacer frente a posibles brotes, ya que excluye a otras muchas que podrían estar infectadas y podrían transmitir el virus.
La prevalencia de la infección estimada a partir del estudio fue del 6,19% y, concretamente, del 7,87% entre los hombres cis gays.
También encuestaron a los participantes sobre su satisfacción con la metodología del automuestreo, "certificando un alto grado de aceptación por su facilidad y eficacia".