El Centro de Protonterapia Quirónsalud ha dado a conocer en su quinto aniversario el inicio de las obras de instalación de un acelerador lineal para radioterapia guiada por imágenes de resonancia magnética (linac-resonancia). El aniversario ha contado con la presencia de la gerente asistencial de Hospitales de la Consejería de Sanidad de la Comunidad de Madrid, Mercedes Navío, y la alcaldesa de Pozuelo de Alarcón, Paloma Tejero.
La nueva Unidad de Radioterapia guiada por imagen, denominada Unity y que estará operativa a finales del próximo año, convirtiéndose en la quinta de nuestro país, supondrá un aporte significativo para el tratamiento de ciertos tumores, particularmente aquellos que necesitan una visualización de alta resolución de tejidos blandos y de órganos susceptibles de desplazarse, de deformarse o de moverse inter y/o intra-fracción.
“Con esta clara apuesta de Quirónsalud por la innovación, su Centro de Protonterapia, concebido para una actividad de asistencial, pero también de investigación, desarrollo y formativa para las nuevas generaciones de profesionales en especialidades asociadas en el tratamiento del cáncer, se constituye en polo de radioterapia de alta complejidad, al ampliar su cartera de servicios para tratar de la forma más adecuada otros tipos de cáncer que se benefician de una radioterapia adaptativa en tiempo real, como son los tumores abdominales”, ha afirmado la Dra. Marta Cremades, gerente del centro, al perfilar el “prometedor futuro, con más indicaciones, más y mejores equipos, y para más pacientes” que augura este nuevo avance.
Concretamente, se ha previsto que la actividad del nuevo acelerador se focalice en el tratamiento mediante radioterapia de aquellos tipos de cáncer en los que la evidencia internacional y los estándares de buena práctica clínica consideran que la terapia con linac-resonancia es la forma de elección de radioterapia: los tumores en movimiento, donde los órganos cambian la posición con la respiración, como los de pulmón, hígado o páncreas; y aquellos cercanos a órganos sensibles, donde proteger el tejido sano es crucial, como los de próstata, mama, cuello uterino o sistema nervioso central.
Esta tecnología permite ofrecer tratamientos dirigidos con hipo fraccionamiento extremo en SBRT
En este tipo de indicaciones, esta tecnología permite ofrecer tratamientos dirigidos con hipo fraccionamiento extremo en SBRT (Stereotactic Body Radiation Therapy) adaptados a la anatomía de un tumor en el día, minimizando al mismo tiempo la exposición incidental a los órganos en riesgo gracias a la capacidad de efectuar imágenes de tejidos blandos online, evaluar modificaciones y movimientos, utilizar biomarcadores, evaluar riesgos y cambios de parámetros de tipo radiómica, entre otras aplicaciones.
Una innovación que, como explican los doctores Stephanie Bolle y Alejandro Mazal, jefes respectivos de los servicios de Oncología Radioterápica y Física Médica del centro, se traduce en claras ventajas para los pacientes en términos de mayor precisión en el tratamiento, personalización y eficacia, y reducción de efectos secundarios, y que se esperan puedan beneficiar a unos 100 pacientes al año inicialmente, para alcanzar los 400 anuales en unos cuatro o cinco.
Este nuevo paso hacia la excelencia e innovación en Oncología llega cinco años después de que el Centro de Protonterapia Quirónsalud se convirtiera en el primero en España dedicado a esta terapia. Un primer lustro de trayectoria en el que, tras incrementar su ritmo de actividad de 100 pacientes en el primer ejercicio a los actuales 200 al año, ha alcanzado los 800 tratados, tras haber evaluado más de 2.000 casos, el 50 por ciento de los cuales son pediátricos (más de la mitad correspondientes a niños de muy corta edad), y en el que destaca por la alta complejidad de casos abordados.
Así, abarca todas las indicaciones actualmente autorizadas, que se concretan en tumores pediátricos, particularmente los cerebrales y, en adultos, cordomas y condrosarcomas, que son tumores del hueso cercanos a la base del cerebro o la médula, así como los oculares, tal y como han señalado la Dra. Marta Montero, especialista en Oncología Radioterápica del centro; Juan Castro, físico supervisor de Protección Radiológica; y José Torresano, técnico en Radioterapia y Dosimetría.
“El objetivo de la protonterapia no es sustituir otras técnicas de radioterapia, sino maximizar la posibilidad de elegir el tratamiento más adecuado para cada paciente, de llevar a la máxima expresión la medicina personalizada: persona a persona"
Casos a los que los citados especialistas esperan que pronto se sumen otros, como los tumores de cabeza y cuello, de esófago o de mama, en los que ya hay estudios que demuestran una mayor tolerancia y menos complicaciones y cardiotoxicidad con este abordaje. Y es que la protonterapia mejora la tasa de curación incrementando la dosis de radioterapia y manteniendo una baja tasa de efectos secundarios, puede aplicarse en tratamientos que requieren grandes volúmenes de radiación y, además, minimiza las secuelas mediante la reducción de la dosis a aplicar en los tejidos sanos, sobre todo en aquellos muy sensibles a la radioterapia (como los ovarios o la hipófisis) y la consecuente reducción del riesgo de tumores inducidos por la radiación.
Desde su puesta en marcha, el Centro de Protonterapia Quirónsalud está contribuyendo significativamente a la consecución de este reto, apoyándose en valores diferenciales tales como su alto nivel de experiencia y profesionalidad que atrae el talento más especializado a nivel mundial, en palabras del Dr. Raymond Miralbell, asesor del centro; y su colaboración activa en la formación de profesionales para los nuevos centros previstos en España y de otras instalaciones en Europa, a juicio de la Dra. Begoña Caballero, especialista del Servicio de Oncología Radioterápica del Hospital Universitario de Fuenlabrada.
Y es que, como asevera el Dr. Mazal, con la instalación prevista de diez nuevos centros en España entre 2026 y 2029, en la formación de cuyos profesionales está colaborando activamente el centro de Quirónsalud, “se podría pasar de la capacidad actual de España de tratar al 0,3 por ciento de los pacientes que reciben radioterapia a poder alcanzar al 2 por ciento, tanto a nivel nacional como mundial, e iniciar la tendencia para llegar al 10 por ciento e, incluso, según algunas previsiones, a entre el 20 y el 30 por ciento en una década”.
“Un reto que puede convertirse en la oportunidad de incrementar la capacidad de tratamiento, compartir experiencia, aumentar indicaciones, reducir costes, formar a más profesionales, promover la investigación, también en combinación con otras estrategias terapéuticas, como los tratamientos sistémicos y la inmunoterapia y, como consecuencia, situar a España como un actor relevante en el contexto internacional, contribuyendo a determinar el papel que jugará la terapia de protones como herramienta de elección en la lucha contra el cáncer, y consolidando el papel del Centro de Protonterapia Quirónsalud como clave en este objetivo”, concluyen los doctores Bolle y Mazal.