El Ministerio de Hacienda amenazó el pasado año con recurrir la OPE si no se reducía al menos un 50% el número de plazas ofertadas, pero finalmente el Ejecutivo autonómico pudo sacar la convocatoria adelante
Una de las principales novedades, según informa la Consejería de Sanidad, es la posibilidad que se ofrece a los aspirantes para presentar y tramitar la solicitud de participación y el pago de la tasa de forma totalmente online. De las 1.030 plazas, 662 son de acceso libre y el resto de promoción interna. Entre las categorías ofertadas se encuentra la de Facultativos Especialistas de Área, con un total de 148 plazas, de las que 55 corresponden a Anestesiología y Reanimación, 38 de Cirugía Ortopédica y Traumatología, 18 de Farmacia Hospitalaria, 34 de Radiodiagnóstico y 3 a Oncología Radioterápica.
Del mismo modo, se convocarán 48 plazas de Médicos de Familia en Equipos de Atención Primaria y 18 de Pediatras de Área y en Equipos de Atención Primaria, además de 16 de médicos de Urgencia Hospitalaria.
En lo que respecta al personal diplomado de grado, la OPE contempla la convocatoria de 239 plazas de Enfermería, 24 de Fisioterapia, 35 de Matrona y 7 de Terapeuta Ocupacional. En personal sanitario técnico, se han convocado un total de 71 plazas de técnicos superiores sanitarios (5 de Anatomía Patológica, 43 de Laboratorio, 16 de Radiodiagnóstico y 7 Higienistas Dentales) y de 161 Auxiliares de Enfermería.
Por último, la oferta para el personal de gestión y servicios se compone de 106 plazas del grupo auxiliar de la función administrativa y 98 de celador.
El director general de Recursos Humanos del Sescam, Íñigo Cortázar, ha recordado que desde 2010 no se realiza ninguna Oferta Pública de Empleo, ya que la de 2014, de 48 plazas, no se llegó a convocar.
Cabe recordar que, tras anunciar la OPE, el propio consejero de Hacienda de Castilla-La Mancha, Juan Alfonso Ruiz Molina, alertó de que el Ministerio de Hacienda había enviado un burofax al Ejecutivo regional amenazándole con presentar un recurso contencioso-administrativo si no reducía al menos el 50% de la convocatoria, aunque finamente el Ejecutivo central no recurrió la oposición que, no obstante, ha tenido que demorarse hasta 2017.