La Sociedad Española de Cardiología, a través de ConSalud.es, le ha hecho llegar al nuevo Gobierno que ocupe la Moncloa sus peticiones de cara a las elecciones del 23 de julio. Su principal reivindicación tiene que ver con la implementación de la Estrategia de Salud Cardiovascular, la cual, recuerdan, fue aprobada hace más de un año.
“Se trata de una estrategia muy ambiciosa, pionera en Europa, que surge del desafío que suponen las enfermedades cardiovasculares y en cuya elaboración han participado cardiólogos de reconocido prestigio en diferentes áreas de conocimiento”, añaden. Y es que, aunque la mortalidad por estas patologías ha ido en descenso en los últimos años gracias a los avances técnicos en los procedimientos diagnósticos y terapéuticos, “su incidencia y prevalencia continúan aumentando, y siguen siendo la primera causa de muerte en nuestro país”.
Además, continúan desde la Sociedad presidida por el Dr. Julián Pérez-Villacastín, en los últimos tiempos se han sumado nuevos retos a estas enfermedades. Entre ellos, destacan la cronicidad y la disparidad que generan, y de ahí la importancia de implementar la mencionada Estrategia de Salud Cardiovascular (ESCAV), la cual “nace como continuidad y extensión de la Estrategia de Cardiopatía Isquémica, que se aprobó en el Consejo Interterritorial del Sistema Nacional de Salud de 2007”.
"La administración escucha sugerencias de sociedades científicas como la nuestra, pero no les otorga un carácter vinculante"
“No nos podemos permitir que quede en papel mojado, como sucedió entonces. Por esto, la SEC se pone a disposición del Ministerio de Sanidad para ayudar en su puesta en marcha”, reclama la Sociedad. “Por otro lado, también pedimos al Ministerio de Sanidad un mayor diálogo con la SEC y más vinculación con las propuestas de los profesionales. La administración escucha sugerencias de sociedades científicas como la nuestra, o de los colegios de médicos, pero no les otorga un carácter vinculante”, añaden.
La Sociedad Española de Cardiología, que celebra la creación de la Agencia Estatal de Salud Pública en agosto del año pasado, matiza sin embargo que la administración debe ir “más allá”. “Deben contar con profesionales independientes que busquen soluciones a los graves problemas que afronta la Sanidad a corto y medio plazo para garantizar la calidad, viabilidad y sostenibilidad sanitaria”, indican.
“Además, urge mejorar las condiciones de los profesionales, especialmente de los más jóvenes. Según una encuesta sobre la situación laboral de los jóvenes cardiólogos, liderada por el Grupo de Jóvenes Cardiólogos de la SEC, el 80% de ellos solo encuentra trabajos precarios al finalizar su formación”, denuncian.
"Menos de la mitad de los profesionales cardiólogos tiene un contrato de interinidad o una plaza en propiedad"
Por último, encuentran “prioritario” poner en marcha el Registro Estatal de Profesionales Sanitarios, un órgano que fue creado en 2021 “después de años de deliberaciones y acuerdos”, pero que “en 2023 sigue sin ser una realidad”. “Es un instrumento imprescindible para una adecuada planificación y coordinación de las políticas de recursos humanos en el sector sanitario”, subrayan.
La mencionada precarización de los jóvenes cardiólogos tras terminar su residencia MIR fue una problemática que la Dra. Cristina Lozano, vocal del grupo de jóvenes cardiólogos de la SEC, ya abordó en una entrevista concedida a ConSalud.es. “Las condiciones de ese primer empleo distan de ser las ideales””, comentó entonces.
“Más allá de los primeros años de práctica profesional o subespecialización, la situación laboral de los cardiólogos no mejora mucho y la eventualidad en la contratación sigue siendo la norma”, añadió. De hecho, a día de hoy, menos de la mitad de los profesionales tiene un contrato de interinidad o una plaza en propiedad y 1 de cada 10 recibe una retribución económica por su actividad en forma de beca o contrato de fundación de investigación o entidad privada.