Con la entrada del otoño puede surgir una sensación de cansancio persistente que afecta a muchas personas. Las horas de luz disminuyen, la temperatura desciende y el organismo debe adaptarse, lo que puede generar una mayor fatiga física y mental. En este sentido, existen varios factores que contribuyen a este agotamiento, entre ellos los cambios en los hábitos de sueño, la alimentación y el estado emocional.
"En otoño, el cuerpo responde a la reducción de luz solar produciendo más melatonina, la hormona que regula el sueño. Esto puede generar somnolencia y afectar nuestro nivel de energía", explica Delia García, psicóloga de Blua de Sanitas. "Además, el descenso de luz también hace que se vea reducida la producción de serotonina, la hormona del bienestar, lo cual influye en el estado anímico y hace que las personas se sientan más apáticas o deprimidas", añade.
Para tratar de contrarrestar este cansancio, desde Sanitas recomiendan realizar una serie de ajustes en el estilo de vida para incluir hábitos de sueño saludables, una alimentación adecuada y la práctica de ejercicio físico regular.
"En otoño, el cuerpo responde a la reducción de luz solar produciendo más melatonina, la hormona que regula el sueño. Esto puede generar somnolencia y afectar nuestro nivel de energía"
“Una alimentación equilibrada es esencial para mantener la energía y combatir la fatiga. En esta época del año, es importante incrementar el consumo de alimentos ricos en vitamina C incluyendo, pimientos, brócoli, espinacas o frutas como kiwi, piña, mandarina o frambuesas, que refuerzan el sistema inmunológico. También se recomienda incluir alimentos con un alto contenido en hierro como legumbres, mejillones, almejas, acelgas, sardinas, huevos o frutos secos y, no debemos olvidar incorporar alimentos ricos en magnesio que ayudan a reducir el cansancio, estos pueden ser lácteos, remolacha, alcachofas, plátanos, patata, batata o cacao, por ejemplo”, señala Ingrid Andrea Daniele, nutricionista de Blua de Sanitas.
Ante esta situación, los expertos de Sanitas han elaborado un listado con una serie de consejos para prevenir la fatiga y afrontar esta época del año: Mantener un horario de sueño regular, la rutina es fundamental para que el cuerpo se adapte a los cambios de luz; consumir alimentos como el plátano, los frutos secos y las legumbres, que aportan magnesio y hierro, ayuda a combatir el cansancio; dado que en otoño los días son más cortos y las horas de luz se reducen, es aconsejable aprovechar al máximo la luz solar; y la actividad física, aunque sea moderada, es clave para activar el organismo.
Además, es necesario tener en cuenta que las personas mayores son particularmente vulnerables al cansancio durante los meses de otoño. Los cambios estacionales pueden exacerbar la fatiga, la falta de energía y afectar a su bienestar general. "En el caso de los mayores, el cansancio puede deberse no solo a los cambios estacionales, sino también a una menor actividad física y a deficiencias nutricionales que aparecen con la edad", explica Miryam Piqueras, directora de Gobierno Clínico de Sanitas Mayores.