La salud emocional es un aspecto relevante en los planos sanitario, social y económico. Por ello, y en el marco del Día Mundial de la Salud Mental que se celebra el 10 de octubre, la Asociación ClosinGap, Merck y PwC han elaborado el informe ‘Coste de oportunidad de la brecha de género en la salud emocional’. El documento analiza las brechas de género en el estado de ánimo, la salud laboral, el autocuidado y la salud emocional de los jóvenes.
En el informe se han elaborado dos índices a partir de datos del “Estudio piloto sobre el bienestar emocional”, llevado a cabo por el Centro de Investigaciones Sociológicas en 2020. En este sentido, los índices se han dividido en bienestar y malestar emocionales.
Analizando los datos en función del género, las mujeres presentan valores inferiores en el índice de bienestar emocional (54,6% frente al 67,4% de los hombres) y valores superiores en el de malestar emocional (27,3% frente al 17,5% de los hombres). Así, se puede observar que las mujeres reconocen un peor estado de salud emocional.
La depresión y la ansiedad comportan la pérdida de 18.590,4 millones de euros a la economía española
La mala salud emocional puede evolucionar hacia trastornos de somatización y problemas mentales como la depresión o la ansiedad, que las mujeres tienen mayor riesgo de padecer. De acuerdo con la Organización Mundial de la Salud, el 7,7% de los años de vida perdidos de las mujeres en España son a causa de estas patologías (4,1 puntos más que en el caso de los hombres). La depresión y la ansiedad comportan la pérdida de 18.590,4 millones de euros a la economía española. De ellos, el 37% (6.872,4 millones) se debe a la brecha de género por la mayor prevalencia de dichas enfermedades en la mujer.
"Las diferencias de género en ansiedad y depresión tienen su origen en que desde la infancia a las mujeres se les exige que aguanten la carga emocional de los demás, que encuentren justificación para los actos de otras personas, aunque les generen malestar, que satisfagan las expectativas ajenas y que no conecten con sentimientos transformadores como la ira. Este tipo de educación las lleva a sentirse responsables de sostener emocionalmente a las personas de su alrededor olvidándose de su propio bienestar psicológico y pagando un alto precio en su salud mental", explica el psicoterapeuta y divulgador Luis Muiño.
Por otro lado, la situación laboral de las mujeres afecta también a su malestar emocional, derivando en bajas laborales por depresión y ansiedad. El 63,1% de las bajas laborales debidas a trastornos mentales y del comportamiento en España en 2021 se produjeron en mujeres. A su vez, estas han sido de mayor duración en el caso de pacientes femeninas (24,4 millones de días vs 13,6 millones de días para los hombres). Las consecuencias de esto se ven reflejadas en el impacto económico de la brecha de género, que fue de 1.642,6 millones de euros.
Las mujeres, a pesar de contar con menos tiempo para sí mismas, son más conscientes de la importancia del autocuidado para mejorar su salud emocional (54,9% frente al 43,1% de los hombres). Por ello, juegan un papel clave como impulsoras de la economía del bienestar. Esto se ha convertido en una actividad económica importante a nivel mundial, que representa 1.288,6 miles de millones de euros en Europa.
Finalmente, el 92% de los jóvenes españoles, entre 19 y 36 años, considera la salud emocional como un aspecto importante de su vida. A pesar de ello, en 2023 todavía más de la mitad de las mujeres jóvenes ha sentido tristeza, falta de energía, problemas para concentrarse, poco interés por hacer las cosas y miedo al futuro o a los riesgos del presente de forma recurrente.
En el caso de los jóvenes de entre 15 y 29 años, la depresión y la ansiedad son responsables del 16% de años de vida saludable que pierden por enfermedad. Es también en esta franja en la que la brecha de género alcanza su máximo, con un 21% en el caso de las mujeres, mientras se sitúa en el 11% en el caso de los hombres.
Estos informes son fundamentales para concienciar sobre el impacto que tiene la brecha de género y la salud mental en la sociedad. “Han pasado 5 años desde que Merck lideró el informe sobre el coste de oportunidad que tiene la brecha de género en la salud en España, el primero de la Asociación ClosinGap. Ya entonces las mujeres estaban más expuestas a situaciones de ansiedad y depresión y su probabilidad de tener depresión era 5,5 puntos más alta que la de los hombres", ha explicado Manuel Zafra, presidente de Merck en España.
Anna Merino: "Es importante tener una buena salud emocional en el aspecto sanitario o social, pero también en el económico"
Esta situación motivó a la compañía de ciencia y tecnología a impulsar el nuevo estudio, investigando en el impacto que tiene para el país la brecha de género en la salud emocional. Además, añadieron la variable generacional para conocer cómo afecta a los más jóvenes y hacer un análisis proyectado hacia el futuro del potencial de éstos para provocar una transformación social.
El informe aborda diferentes perfiles de la salud emocional desde una perspectiva cualitativa y cuantitativa. "Es importante tener una buena salud emocional en el aspecto sanitario o social, pero también en el económico. España siempre ha sido vista como un país con una alta calidad de vida y podría pensarse que la salud emocional es mejor que en el resto de los países europeos. Sin embargo, el índice de bienestar emocional nos sitúa en el puesto 17 de los 26 países europeos”, añade Anna Merino, directora de Consultoría Estratégica y Económica en PwC.
Por último, “fortalecer nuestra salud emocional a largo plazo permite alcanzar una sociedad más justa, inclusiva, resiliente y productiva. Por este motivo, la salud emocional tiene una alta relevancia académica, social y política, y debe ser abordada a fin de encontrar soluciones globales", concluye Ana Polanco, directora europea de Asuntos corporativos y Acceso al Mercado de Merck, presidenta de ASEBIO y presidenta del Consejo Asesor de la Asociación ClosinGap.