Inglaterra se enfrenta a una importante crisis tanto para su sistema educativo como sanitario. Cientos de colegios han tenido que cerrar y casi veinte hospitales podrían hacer lo propio por riesgo de derrumbe debido al material con el que fueron construidos: un tipo de cemento más ligero, débil… y barato.
Dicho material se conoce como hormigón celular reforzado tratado en autoclave (RAAC, por sus siglas en inglés). Tal es la gravedad del asunto, que desde los altos estamentos del National Health Service (NHS) británico ya han pedido a sus trust (organizaciones encargadas de dirigir los hospitales de Inglaterra) que estén preparados por si tienen que evacuar al personal de los hospitales.
"Los hospitales deberían familiarizarse con un plan de evacuación regional"
En concreto, les ha solicitado el Dr. Mike Prentice, director nacional de planificación de emergencias y respuesta a incidentes del NHS, deberían familiarizarse con un "plan de evacuación regional" enfocado en la zona este de Inglaterra y elaborado por la organización para que los hospitales puedan implementarlo en caso de que los edificios que contienen RAAC comiencen a desmoronarse.
Según recoge The Guardian, que ha tenido acceso a la carta, Prentice hacía especial hincapié en que los 19 trust de Inglaterra con el mayor número de instalaciones construidas utilizando RAAC lo hicieran con carácter prioritario (aunque, según reconoce el NHS, podrían ser más de 19): De ellos, siete están construidos principalmente con RAAC y doce tienen al menos un edificio construido con este material.
"Parte del Queen Elizabeth Hospital ya ha tenido que ser domolido"
De hecho, parte del Queen Elizabeth Hospital ya ha tenido que ser domolido por esta causa, y el Hinchingbrooke solo permite operar a pacientes obesos en la planta baja por el riesgo de que los pisos se agrieten. Otros han tenido que incorporar elementos estructurales de seguridad alrededor de los edificios afectados.
El RAAC, que se utilizó en los hospitales y colegios británicos entre la década de los 60 y la de los 90, tiene una vida útil aproximada de 30 años, por lo que el problema ya viene afectando al país desde el año 2019. Muchas miradas están puestas ahora sobre el primer ministro británico, Rishi Sunak, a quien acusan haber ignorado las advertencias de lo que podía ocurrir y de haber reducido, en 2021, cuando era ministro de finanzas, el presupuesto para reparar las estructuras de los edificios a la mitad.
LAS ENFERMERAS PIDEN SEGURIDAD
El Royal College of Nursing de Inglaterra, “la voz de las enfermeras” en el país, asegura que tanto profesionales como pacientes están “alarmados” por esta carta del NHS. “El NHS tiene la obligación de informar adecuadamente al personal y proporcionarle información pertinente sobre su lugar de trabajo, así como garantizar que el personal y otras personas que puedan verse afectadas, como pacientes y visitantes, estén seguros”, señalan.
“Para aquellos trust en los que existe un riesgo constante de que los edificios se derrumben, esperamos que los responsables de la gestión y el mantenimiento actúen con urgencia. Esto significa investigar dónde se ha utilizado RAAC y tomar las medidas adecuadas para que los edificios sean seguros”, denuncian.