Ampliar la jubilación activa en Primaria: "Su impacto en reducir la falta de médicos es irrisorio"

El secretario general de CESM, Víctor Pedrera, considera que extenderla hasta los 72 años no solucionará el problema y llama a mejorar las condiciones laborales, ya que en España "se gradúan médicos suficientes"

Víctor Pedrera, secretario general de CESM. (Foto: ConSalud.es)
Víctor Pedrera, secretario general de CESM. (Foto: ConSalud.es)
Javier Leunda, redactor ConSalud.es
31 enero 2025 | 11:00 h
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El pasado jueves el Partido Popular planteó en el Senado una PNL para instar al Gobierno a extender la jubilación activa mejorada hasta los 72 años para todos los médicos de familia y pediatras de Atención Primaria que voluntariamente lo deseen. Una posibilidad para alargar su vida laboral cobrando un 75% de su pensión, que estos profesionales tienen ahora disponible desde los 65 hasta los 70 años. Todo ello, con el fin de mitigar la falta de especialistas en el Sistema Nacional de Salud.

Sin embargo, cabe preguntarse: ¿Quién querría trabajar hasta los 72 años, por mucho que esté incentivado económicamente? El secretario general de CESM, Víctor Pedrera, tiene una respuesta clara para ConSalud.es: "nadie o casi nadie". Si bien valora que los facultativos tengan flexibilidad voluntaria en su jubilación –que también desearía para antes de los 65 años-, confiesa que el impacto que ha tenido la actual jubilación activa hasta los 70 en el déficit de médicos ha sido “ridículo y apenas perceptible”.

“Puedes captar a algún médico más que por la razón que sea se sienta capaz, pero es una medida que no soluciona el problema de la falta de médicos en Atención Primaria”

El problema de la escasez de médicos en el Sistema Nacional de Salud y las dificultades que se prevén en el futuro –ya se observan- para dar relevo generacional a las actuales plantillas, especialmente en Atención Primaria, son un asunto demasiado complejo y multifactorial como para subsanarlo con una única medida. “Puedes captar a algún médico más que por la razón que sea se sienta capaz, pero es una medida que no soluciona el problema”, sostiene el facultativo.

La motivación para seguir trabajando más allá de los 65, incluso de los 70, solo está en la cabeza de algunos pocos elegidos. Para ello, se deberían dar unas circunstancias en las que la vocación y bienestar personal –físico y mental- se encuentren en perfecta armonía. Y, precisamente, ese segundo eslabón es el que parece flaquear entre los médicos españoles. “El problema –para el SNS- es que los facultativos se quieren cuidar y retirarse del mercado laboral en cuanto puedan, porque las situaciones que viven y sus actuales condiciones laborales son insoportables”, refleja Pedrera.

“El problema no es que falten médicos, sino que no tienen incentivos para trabajar en Atención Primaria”

Especialmente, la Atención Primaria es el nivel donde más se ceba la sobrecarga asistencial, el burnout entre sus trabajadores o la falta de recursos para dar respuesta a una creciente demanda por parte de los pacientes. Todo ello, en un contexto de tener que acometer la atención a una población cada vez más longeva y afectada por la cronicidad. Por ello, el secretario general de CESM considera que “el problema no es que falten médicos, sino que no tienen incentivos para trabajar en Atención Primaria”.

¿FALTAN MÉDICOS?

En esta línea, Víctor Pedrera niega la mayor y sostiene que en España hay médicos suficientes, pese a lo que sostienen los responsables políticos. “España es el país de Europa que tiene más facultades de medicina por habitante y somos una fábrica de graduados, muchos de los cuales acaban en el extranjero o en la privada”, aclara, no sin dejar de insistir en que el problema radica en que “estos egresados no están dispuestos a trabajar en algunos ámbitos de la sanidad pública por las condiciones que se encuentran al llegar”.

“La mejor manera de que no escaseen los médicos en Atención Primaria sería hacer que este estatuto fuera atractivo para la profesión médica, reconozca su papel e incorpore mejoras laborales en todos los apartados"

Precisamente, en estos momentos se está negociando –no sin la inevitable lucha de intereses entre Ministerio de Sanidad y los sindicatos- el Estatuto Marco del personal del SNS. “La mejor manera de que no escaseen los médicos en Atención Primaria sería hacer que este estatuto fuera atractivo para la profesión médica, reconozca su papel e incorpore mejoras laborales en todos los apartados –retribuciones, guardias, jornadas, etc-”.

En definitiva, el secretario sindical de CESM, más allá de la jubilación activa mejorada hasta los 72 años, aboga por establecer medidas de fidelización para retener a los profesionales. Asimismo, llama a parar la sangría de plazas MIR que quedan vacantes cada año en la especialidad de Medicina de Familia y Pediatría, así como la de aquellos residentes que acaban abandonado la Atención Primaria para cambiarse a otros ámbitos sanitarios.

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