Los adolescentes menores de 16 años se han convertido en los mayores consumidores de dispositivos con acceso a la red. Según los datos del estudio del Observatorio Nacional Tecnología y Sociedad (ONTSI), en nuestro país se calcula que un 95% de los menores de 16 años utiliza el ordenador y el 98% usa internet. La adopción del teléfono móvil es inferior, pero siete de cada 10 menores disponen de este dispositivo, al que acceden desde los 11 años y uno de cada tres está enganchado a las redes sociales, a las que se conectan todos o casi todos los días, según una investigación de Unicef.
Debido a esta información, la Asociación Española de Pediatría (AEP), a través del grupo de trabajo de Salud Digital del Comité de Promoción de la salud de la AEP, ha elaborado el Plan Digital Familiar de la AEP, una guía de recomendaciones adaptada a las necesidades de cada familia y a la edad de los menores que la componen. “Lo primero que debemos tener claro es que las tecnologías han venido para quedarse. Los niños y adolescentes son especialmente vulnerables a sus riesgos al estar en desarrollo”, apunta la doctora María Salmerón, coordinadora del grupo de trabajo de Salud Digital del Comité de Promoción de la Salud de la AEP.
"Es difícil que los niños, de forma autónoma, hagan un buen uso de la tecnología"
“Lo que sí debemos tener en cuenta es que es difícil que los niños, de forma autónoma, hagan un buen uso de la tecnología. Por eso, es importante que nosotros, como padres, eduquemos a través del ejemplo”, añade la experta.
CÓMO SE ESTABLECE UN PLAN
El Plan Digital de la AEP se materializa en un documento que las familias pueden adaptar a sus circunstancias particulares. Así, ofrece la opción de elegir entre una serie de propuestas basadas en recomendaciones científicas; unas en función de la edad y otras generales para todos los miembros. Tras la selección, se puede descargar un documento ‘personalizado’ para aplicarlo en el hogar.
La recomendación es que los padres y las madres lo estudien y valoren antes de establecer los límites, ya que estos serán para todos los miembros de la familia. “Antes de poner normas, debemos establecer un diálogo y ver qué límites nos sentimos capaces de cumplir”, expone la doctora Salmerón.
Uno de los objetivos del plan es dotar a los pediatras de una herramienta sencilla que pueda usar en la consulta para informar y acompañar a las familias con el objetivo de prevenir los riesgos. “Lo mejor sería sensibilizar a las familias cuanto antes, incluso durante el embarazo, que es un momento en el que estamos muy abiertos a recibir información y a mejorar nuestra salud”, explica la doctora Salmerón. En cuanto a la edad adecuada para tener un dispositivo, explica que va a depender de cada familia y del grado de madurez del menor.
"Lo mejor sería sensibilizar a las familias cuanto antes, incluso durante el embarazo"
El Plan Digital Familiar cuenta con el respaldo de la Agencia Española de Protección de Datos (AEPD), “En la Agencia somos conscientes de cómo el uso inadecuado y excesivo de Internet por los menores tiene consecuencias muy graves sobre el desarrollo de su personalidad, llegando a casos de adicciones, sexting o ciberbullying, entre otros”, afirma Mar España, directora de la AEPD.
“Por eso es importante el Plan Digital Familiar y que las familias conozcan que existen unas pautas basadas en la evidencia científica sobre cómo afecta el uso de las pantallas a los menores y unas recomendaciones acerca del número de horas máximo, según edades, del uso de los dispositivos, sumando el tiempo en las aulas y el tiempo en casa”, concluye España.
“El ejemplo que reciben de nosotros es lo más importante; nuestros actos van a tener siempre más peso que nuestras palabras. Cuanta más exposición a las tecnologías tengamos en casa y menos límites haya establecidos, más fácil va a ser que los niños interioricen conductas de riesgo como llevarse el móvil a la cama”, concluye la autora del Plan Digital de la AEP.