Desde hace muchos años, las estadísticas oficiales muestran cómo en España y en el conjunto de la Unión Europea el empleo sanitario tiene cara de mujer. Sin embargo, esta situación no siempre va ligada a la igualdad desde el punto de vista de los derechos laborales. Aprovechando que este lunes, 8 de marzo, es el Día Internacional de la Mujer, en ConSalud.es analizamos ambos aspectos.
A diferencia de otros sectores, el de la Sanidad destacada por su alta presencia femenina. Así lo refleja la última actualización del boletín estadístico del personal al servicio de las administraciones públicas publicado por el Gobierno en diciembre. Según este gráfico, que analiza la evolución por sexo del empleo público entre 2010 y 2020, la feminización del sector sanitario en España ha ido cada vez a más.
A pesar de la importante presencia femenina en el sector sanitario, la mujer suele salir perjudicada cuando se habla de derechos laborales
Los últimos datos, con fecha de julio de 2020, indican que el 75,3% del empleo sanitario está ocupado por una mujer. Según las cifras que aportan las instituciones sanitarias integradas en el Sistema Nacional de Salud (SNS), dependiente de las comunidades autónomas, existen 402.805 mujeres trabajando en el sector sanitario por 131.869 hombres. Este incremento del empleo femenino en Sanidad ha sido una constante en los últimos 10 años salvo en 2013 y 2014, como consecuencia de la crisis económica.
Cada año ha habido más mujeres sanitarias. La evoluciónpor años ha sido la siguiente: 344.976 empleadas en Sanidad en enero de 2010 (70,3%); 346.882 en 2011; 365.246 en 2012; 356.878 en 2013; 348.139 en 2014; 348.699 en 2015; 354.801 en 2016; 363.077 en 2017; 370.380 en 2018; 381.269 en 2019; 386.107 en enero de 2020; y 402.805 en julio de 2020 (75,3%).
La alta presencia femenina en el área sanitaria también es una realidad en el conjunto de la Unión Europea. Según los datos publicados por la Oficina Europea de Estadística (Eurostat), con cifras del tercer trimestre de 2020, hasta un 78% de los trabajadores sanitarios en el conjunto de la UE eran mujeres. La cifra más baja la obtuvo Grecia, con un 61% de empleo femenino en sanidad. Mientras, Estonia y Letonia tuvieron las cifras más altas: más de un 90%.
UGT denuncia que la brecha salarial de género alcanza el 28% en sanidad y dependencia; CC.OO. cifra en 5.756 euros anuales lo que cobra de menos una mujer en sanidad
Pero a pesar de esta importante presencia en el sector sanitario, la mujer suele salir perjudicada cuando se habla de derechos laborales. En ConSalud.es hemos repasado tanto las denuncias como las reivindicaciones que las secciones sanitarias de las principales organizaciones sindicales de España han realizado con motivo del 8-M.
DESIGUALES EN DERECHOS
Desde la Federación de empleados de servicios públicos de UGT (FeSP-UGT) lamentan cómo en estos momentos “la brecha salarial de género alcanza el 28% en sanidad y dependencia”. Por ello, reclaman medidas que reduzcan esta importante diferencia junto a otras actuaciones como la implementación de planes de igualdad en el sector público o el desarrollo de políticas de corresponsabilidad para una mejor conciliación familiar y laboral.
En la misma línea, la Federación de Sanidad y Sectores Sociosanitarios de CC.OO. (FSS-CCOO) subrayan que la brechasalarial alcanzó en 2020 “una máxima histórica” en el sector: las mujeres cobraban 5.756 euros anuales por debajo de la media del salario de un hombre en sanidad. Por ello, se comprometen a luchar “desde los planes de igualdad” y también “contra la brecha vertical” que “dificulta estar en los puestos de alta dirección”, o también “para la racionalización de los tiempos de trabajo”.
CSIF pide más medidas de conciliación; CESM lamenta la desigualdad en el cobro del complemento por guardias en situación de maternidad; y Satse apuesta por más liderazgo de las enfermeras
Por su parte, desde CSIF critican la “falta de consenso” de las fuerzas políticas en torno a las desigualdades de género e insisten en “la necesidad de impulsar medidas urgentes para corregir el retroceso que el Covid-19 ha provocado en la situación de las mujeres”. A través de un manifiesto, piden que se elimine la segregación horizontal y vertical, se mejore “la representación de la mujer en puestos de responsabilidad”, se refuerce la “formación en materia de igualdad” o se fomenten “medidas de conciliación y corresponsabilidad eficaces y evaluables”.
Para este año, la Confederación Estatal de Sindicatos Médicos (CESM) ha querido denunciar de forma particular la brecha salarial ligada a la retribución del complemento salarial por guardias en situación de maternidad. A través de un mapa, esta institución reprocha que “dependiendo del territorio, aún existe mucha desigualdad entre las médicas en cuanto al cobro de este complemento de la atención continuada”. Por ejemplo, en La Rioja, Extremadura, Murcia o Canarias aún no tienen ningún reconocimiento de este tipo.
Finalmente, el Sindicato de Enfermería (Satse) han reclamado “un mayor liderazgo de las enfermeras” en el sector después de una crisis sanitaria del calibre de la pandemia de Covid-19 que ha demostrado “sus grandes capacidades de organización, resolución, adaptación a entornos cambiantes e innovación en busca de una mejor atención y cuidados a sus pacientes y a la ciudadanía en general sin renunciar a su cercanía y valores humanos en unos momentos especialmente duros y difíciles”.