Los pediatras oncólogos y hematólogos, tras su formación integral en Pediatría, precisan una formación específica para poder afrontar los cánceres en la infancia -en genética molecular oncológica, trasplante de progenitores hematopoyéticos, terapias avanzadas, en investigación (ensayo clínicos I-III) y en medicina personalizada-.
Sin embargo, hasta ahora, la formación en Oncología y Hematología pediátrica en España no ha estado reglada ni se ha reconocido oficialmente, lo que supone un problema importante a la hora de garantizar la adecuada cobertura de las vacantes por los pediatras especialistas con la mejor formación y experiencia en la disciplina. Algo que se agrava todavía más si tenemos en cuenta que el 20% de los especialistas en onco-hematología pediátrica se jubilará en los próximos diez años. Sobre esto alertan desde la Sociedad Española de Hematología y Oncología Pediátricas (SEHOP) con motivo del Día Internacional del Niño con Cáncer, que se celebra el 15 de febrero.
“Es necesario disponer cuanto antes en España de este reconocimiento para garantizar la adecuada dotación de nuestro sistema sanitario con los especialistas en cánceres pediátricos mejor formados”
“Es necesario disponer cuanto antes en España de este reconocimiento para garantizar la adecuada dotación de nuestro sistema sanitario con los especialistas en cánceres pediátricos mejor formados”, advierte la doctora Ana Fernández-Teijeiro Álvarez, presidente de la SEHOP, una de las 24 sociedades de especialidades pediátricas que conforman la Asociación Española de Pediatría (AEP).
En España, la supervivencia de los niños menores de 14 años con cáncer es del 81% a los 5 años, de acuerdo con los últimos datos del Registro Español de Tumores Infantiles (RETI-SEHOP) actualizados en 2021. A pesar de este dato esperanzador, todos los cánceres pediátricos son enfermedades raras y complejas y necesitan la atención por equipos multidisciplinares (facultativos, enfermería, psicólogos, biólogos, etc.) con conocimiento específico y profundo de las distintas patologías tanto en el diagnóstico, como durante su tratamiento y en el seguimiento de los supervivientes.
En este sentido, la SEHOP está trabajando estrechamente con la AEP para revertir la situación y que se reconozca la especialidad, lo cual “sería un avance muy grande porque siempre surgen problemas con la cobertura de las plazas vacantes en las ofertas públicas de empleo o en las bajas por enfermedad o maternidad”, concluye la presidenta de la SEHOP.