Ya ha pasado un mes desde que el Movimiento de Resistencia Islámica (Hamás) llevase a cabo su más reciente ofensiva contra territorio israelí, que se saldó con 1.400 muertos y más de 240 rehenes. Durante todo este tiempo han perdido la vida en la Franja de Gaza 16 trabajadores sanitarios.
Así lo confirma la Organización Mundial de la Salud (OMS), cuyo portavoz, Christian Lindmeier, ha expresado su "orgullo" por los trabajadores que "mantienen el sistema sanitario en Gaza a pesar de todo". "Son verdaderos héroes, que trabajan bajo un estrés constante y sin respiro alguno", ha puntualizado según un comunicado de la OMS.
Así, ha recalcado que "todos los ataques contra trabajadores y centros sanitarios están "prohibidos por el Derecho Humanitario" y ha calificado de "inaceptables" los bombardeos contra hospitales, una situación que ha obligado a numerosos pacientes a sufrir las graves consecuencias.
"Todos los ataques contra trabajadores y centros sanitarios están prohibidos por el Derecho Humanitario"
En este sentido, ha insistido en la importancia de "la voluntad política para conceder al menos una pausa humanitaria" que permita "aliviar el sufrimiento de la población civil y de los rehenes en Gaza". "Cada día crees que es el peor, pero no lo es", ha afirmado antes de recalcar la importancia del "acceso" humanitario a la zona.
Lindmeier ha lamentado a su vez que el nivel de "muerte y sufrimiento es difícil de comprender" y ha estimado que cada día mueren de media unos 160 niños en el enclave palestino, donde los bombardeos israelíes se han intensificado.
“Las posibilidades en este momento son enormemente limitadas y empeoran a medida que pasan los días”, señalaba hace unas semanas a ConSalud.es el facultativo de Médicos del Mundo en las comisiones médicas de Gaza Felipe Noya, quien cuenta con amplia experiencia en la zona y cuyo trabajo se basa en el “refuerzo de las capacidades de respuesta a emergencias”.