Bruselas ha acogido este lunes una nueva sesión del Consejo de Empleo, Política Social, Sanidad y Consumidores (EPSCO), reunión que ha contado con la asistencia de María Luisa Carcedo, ministra de Sanidad en funciones, y el resto de responsables sanitarios de los Estados miembros. En esta ocasión, los asuntos sobre los que han debatido han sido la política farmacéutica y la economía del bienestar.
Sobre el primer punto, los ministros sanitarios han abordado cómo puede fortalecerse la cooperación y la coordinación de los países de la Unión Europea (UE) con el fin de mejorar el acceso a los medicamentos y reducir así problemas como el desabastecimiento que se da en algunos países, incluido España. Entre las medidas que se han puesto encima de la mesa, el EPSCO ha planteado que se fomente “el traslado de la producción de medicamentos a la UE”.
Los países de la UE proponen otras soluciones frente a la escasez de fármacos como el intercambio de información sobre las existencias, mecanismos de alerta temprana o que se intensifique la vigilancia del mercado
Desde este organismo creen que “una de las razones de la escasez y las interrupciones del suministro” se deben a que la cadena “se ha vuelto más larga, más compleja y fragmentada a medida que las empresas han localizado una gran parte de la producción de medicamentos fuera”. Por ello, instan a que se aprueben medidas legislativas para que los Estados obtengan “una capacidad de fabricación de respaldo, una notificación anticipada de las interrupciones y medidas más fuertes para garantizar la continuidad del suministro”.
Por otra parte, los titulares de Sanidad han defendido que se refuerce la cooperación para “mitigar los problemas relacionados con la escasez de medicamentos”. Por ejemplo, han propuesto que se transfiera fármacos “de un estado miembro a otro” aunque con exenciones “sobre los requisitos de la información que acompaña a los productos en cuestión”.
De la misma forma, los países de la UE han formulado otras posibles soluciones como el intercambiode información sobre las existencias, que se empleen mecanismos de alerta temprana sobre desabastecimientos o que se intensifique la vigilancia del mercado. El objetivo común es desarrollar e implementar “una agenda de trabajo de la UE sobre política farmacéutica”.
SALUD MENTAL, ENVEJECIMIENTO Y TRANSFORMACIÓN DIGITAL
Los Estados miembros han apuntado que las políticas nacionales sobre salud mental, envejecimiento saludable y transformación digital de los servicios de salud “debían ser apoyados por medidas y políticas a nivel de la UE”
Al mismo tiempo, los ministros han compartido su visión sobre los pasos que se han de seguir en los próximos años para “invertir en salud” y avanzar hacia una “Economía del bienestar”. Así, han apuntado que las políticas nacionales sobre salud mental, envejecimiento saludable y transformación digital de los servicios de salud “debían ser apoyados por medidas y políticas a nivel de la UE”.
En cuanto a la salud mental, los participantes consensuaron la necesidad de desarrollar una estrategia europea que incluya criterios como la “creación de conciencia” en la población de la UE, que se garantice la “prevención y la intervención temprana” y que se fortalezca la “alfabetización”. En lo que respecta al envejecimiento activo y saludable, los ministros plantearon la implementación de iniciativas para su promoción, a través políticas de prevención que se adapten a los cambios demográficos.
Finalmente, el conjunto de la UE ha apostado por crear un Espacio Europeo de Datos de Salud que permita que los sistemas sanitarios se adapten a la era digital. Asimismo, han indicado que se incremente la inversión en tecnología y que mejore el uso de los datos de salud en la atención sanitaria, la salud pública y la investigación.