Las elecciones autonómicas del 28M han dejado un reguero de cambios en el panorama político nacional, además de un gran beneficiado: el PP. Los populares han logrado arrebatar al PSOE 6 de las 10 autonomías que hasta el domingo gobernaban. Sin embargo, el partido presidido por Alberto Núñez Feijóo tendrá la necesidad de contar con Vox para tomar posesión efectiva en Comunidad Valenciana, Baleares, Murcia, Cantabria, Extremadura y Aragón. Circunstancia que, por otra parte, no se requiere con la mayoría absoluta deIsabel Díaz Ayuso en la Comunidad de Madrid o Gonzalo Capellán en La Rioja.
De esta manera, la necesidad de un pacto entre el Partido Popular y Vox no será una circunstancia novedosa. Así, Castilla y León ha sentado las bases durante su actual legislatura de la colaboración conjunta de ambos partidos en la gestión sanitaria de una región. Un gobierno en coalición que ha servido para avanzar en muchas de las necesidades del Sacyl. Una de las iniciativas más acuciantes y exitosas fue la puesta en marcha del Programa de fidelización y captación del talento de los residentes que finalizan su Formación Sanitaria Especializada en el Sistema Nacional de Salud.
El propio presidente autonómico, Alfonso Fernández Mañueco, se felicitaba por el hecho de que el presupuesto en salud durante el actual mandato se hubiese incrementado en 1.200 millones de euros anuales
No en vano, recientemente el propio presidente autonómico, Alfonso Fernández Mañueco, se felicitaba por el hecho de que el presupuesto en salud durante el actual mandato se hubiese incrementado en 1.200 millones de euros anuales, así como por el aumento en la contratación de profesionales sanitarios en 5.000 efectivos. En esta línea, la Federación de Plataformas de Defensa de la Sanidad Pública ha reconocido en este sentido que la sanidad pública de las mejores de España. Una colaboración PP-Vox que, al menos en el ámbito sanitario, parece haber funcionado de manera significativa; pudiendo servir de ejemplo para los venideros pactos en otras CC.AA.
La única circunstancia de desencuentro que ha salpicado esta legislatura de coalición entre los populares y Vox ha venido fruto de las medidas en relación al aborto. De esta manera, a primeros de este año el vicepresidente autonómico de Vox, Juan García-Gallardo, presentó un nuevo protocolo de actuación por el cual los sanitarios estarían obligados a ofrecer a las mujeres con intención de abortar la posibilidad de escuchar el latido fetal o hacerse una ecografía en 4D. Tras ese anuncio y la polémica desatada, populares y Vox comenzaron un tira y afloja de desmentidos. Una circunstancia que llevó al Gobierno central a requerir que se pusiera fin a esta iniciativa; lo cual llevó a la propia Junta a aclarar que se trataba de una propuesta opcional para las pacientes y no obligatoria.
C.VALENCIANA: CAMBIO DE MODELO
Todas estas son lecciones de las que podrán aprender en positivo regiones como la Comunidad Valenciana. El vuelco electoral que ha arrebatado de las manos el Gobierno a Ximo Puig se ha sustentado en los 40 escaños alcanzados por Carlos Mazón. El popular deberá contar con Vox -13 diputados- para alcanzar la mayoría absoluta de los 50 apoyos necesarios para gestionar de manera desahogada las políticas de la Generalitat. De esta manera, las líneas consensuadas en Sanidad para la región deberán pasar por afrontar retos como el fortalecimiento de la Atención Primaria, el diálogo con los sindicatos sanitarios o replantear las políticas de reversión en gestión sanitaria impulsada por Puig.
ARAGÓN: UN PACTO EN LISTA DE ESPERA
El candidato del PP, Jorge Azcón, resulto el ganador de las elecciones en Aragón con 28 escaños, cinco más que los socialistas del actual presidente Javier Lambán. Sin embargo, la mayoría absoluta en el parlamento aragonés es de 34 escaños, lo que obligará a los populares a tender la mano al diálogo con Vox –con 7 diputados-. El reto en la región aragonesa ha de centrarse en construir un sistema sanitario capaz de atender a su singular población dispersa y en acometer el envejecimiento de los ciudadanos en el marco de la salud. Del mismo modo, queda pendiente desde el PP la intención de reformar el actual sistema de transporte sanitario en la región y satisfacer las crecientes reclamaciones de sus sanitarios. Todo esto en un contexto de listas de espera quirúrgicas mejorables.
BALEARES: FACILITAR LA LLEGADA DE MÉDICOS
En Baleares el Partido Popular de Marga Prohens ha puesto fin a dos legislaturas socialistas al frente de las islas con una victoria con 25 escaños. Una buena cifra –a 5 de la mayoría absoluta- que, por otro lado, hará inevitable el acercamiento a Vox para sacar adelante sus políticas. Los populares persiguen dar un viraje al modelo sanitario encarnado por Francina Armengol y su consejera Patricia Gómez. Entre los planteamientos a abordar destaca paliar las dificultades a la hora de atraer facultativos. Para ello ya adelantaron durante la campaña medidas como facilitar la vivienda al personal sanitario, la deducción autonómica del IRPF en los titulares de plaza de difícil cobertura o eliminar el requisito del catalán para acceder al empleo en la sanidad pública.
CANTABRIA: ABIERTA LA PUERTA A LA INVESTIDURA
El Gobierno de Miguel ángel Revilla en Cantabria quedará aparcado con la victoria popular de María José Sáenz, la primera mujer que ostentará el cargo de presidenta de la región. Es cierto que para alcanzar la mayoría absoluta no estaría del todo descartado el apoyo del propio Partido Regionalista de Cantabria, si bien parece más improbable. Lo que sí ha aclarado el propio Revilla este mismo martes es que facilitará la investidura del PP ante sus "espectaculares" resultados. Sin embargo, queda abierto que los populares puedan sostener tras ello un Gobierno en solitario, pues la lógica parlamentaria apuntaría más a la colaboración necesaria de los ocho escaños de Vox. La línea de trabajo del PP cántabro, en la que espera contar con el apoyo del partido liderado por Santiago Abascal, se centrará en las políticas sanitarias que quedaron aparcadas tras la pérdida del gobierno en 2015. Iniciativas como la mejora de la Atención Primaria o poner el foco en los profesionales y la cronicidad.
EXTREMADURA: GOBIERNO IN EXTREMIS
La victoria electoral de Fernández Vara no le servirá para revalidar por cuarta vez su Gobierno en Extremadura. Hecho que le ha llevado a su retirada de la política. Será la popular María Guardiola –con los mismos escaños que Vara- la encargada de dirigir la Junta durante los próximos cuatro años. Para lograrlo deberá contradecir sus planes iniciales durante la campaña electoral de no pactar con Vox, pues los 28 diputados de los que dispone no alcanzan la mayoría necesaria de 33. Los retos que deja el legado socialista extremeño pasarán principalmente por la atracción y estabilización de profesionales sanitarios en la región, del mismo modo, los populares abogan por una lista de espera unificada en el sistema da salud de la región.
MURCIA: APOYO NIMIO, PERO NECESARIO
La Región de Murcia es una de las CC.AA. donde el Partido Popular ha estado más cerca de simular la mayoría absoluta alcanzada en la Comunidad de Madrid y en La Rioja. Sin embargo, finalmente dos escaños le han separado de lograrlo. Fernando López Miras tomará el mando de Murcia, en esta ocasión con mayor solidez que durante la última legislatura. Sin embargo, cuesta pensar que Vox vaya a regalar su ligero, pero necesario, apoyo de manera desinteresada. A pesar de ello, Miras tendrá las manos menos atadas que en las regiones anteriores a la hora de negociar con la otra formación de derechas. En el foco, proseguir con el plan de choque contra las listas de espera quirúrgicas, la apuesta en Atención Primaria y la atracción de profesionales a la región, sin perder de vista las estrategias en salud mental.
Por otro lado, el reciente adelanto electoral anunciado este lunes por el presidente del Gobierno, Pedro Sanchez, puede conllevar que el Partido Popular trate de dilatar estos pactos autonómicos con la formación encabezada por Santiago Abascal lo máximo posible. De esta manera, los acuerdos definitivos podrían incluso llegar tras los comicios generales del próximo 23 de julio para evitar el desgaste electoral que supondría el tira y afloja con Vox de cara a las elecciones estivales.