El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha recibido este lunes a Pablo Casado, presidente del PP, en el Palacio de La Moncloa, reunión que supone el primer encuentro entre ambos líderes desde las elecciones generales que se celebraron en noviembre. En un intento de acercar posiciones, estos políticos han abordado diferentes asuntos entre los que no se ha encontrado ninguno relacionado con la sanidad pese a las diferencias que PSOE y PP presentan en algunas cuestiones.
Uno de los desencuentros más evidentes llegó la pasada semana, durante el debate de la ley socialista para regular el derecho a la eutanasia. En el pleno, María Luisa Carcedo, exministra de Sanidad y actual diputada del PSOE, se enfrentó, dialécticamente hablando, con José Luis Echániz, diputado del PP debido a que éste afirmó que la ley supondría “recortes sociales en toda regla” dando a entender que de ella subyacerían “ahorros para el coste de las personas mayores”.
El desencuentro más reciente ha llegado con el trámite de la ley de eutanasia; el ministro de Sanidad considera que el PP se equivocó en los argumentos que empleó para votar en contra
Esta polémica posición de los populares, similar a la que defendió Vox, ha provocado el desagrado del ministro de Sanidad. Durante una entrevista a TVE, Salvador Illa denunció que aunque “puede haber posiciones distintas” sobre diferentes asuntos, hay algunas manifestaciones que “caen por su propio peso”. A su entender, “PP y Vox se equivocaron con los argumentos que utilizaron”.
También ha sido reseñable la discrepancia entre ambas formaciones políticas en relación a la universalización de la asistencia sanitaria en el SNS. Bandera de los socialistas a su llegada a la Moncloa, supuso un choque con los consejeros autonómicos populares, quienes afirmaban que ya se practicaba. En su programa electoral, el PP hacía mención únicamente a garantizar la sanidad “a todos los españoles”, mientras que el PSOE proponía que se ampliase a “toda la población residente”.
FUERA DE LOS PACTOS DE ESTADO
Durante el encuentro de este lunes se ha evidenciado la falta de entendimiento entre ambos y la dificultad para llegar a acuerdos. Pese a ello, Pablo Casado le ha ofrecido a Pedro Sánchez tender la “mano tendida” para alcanzar “acuerdos de Estado” sobre diferentes ámbitos. En una propuesta que ha denominado “compromiso por España”, el líder del PP no ha mencionado la búsqueda de consenso en el ámbito estrictamente sanitario.
Alarcó, portavoz de Sanidad del PP en el Senado, trasladó al Gobierno de coalición que "nos tendrá dialogando ante planteamientos sensatos y no ideológicos dentro del ámbito sanitario"
Por su parte, Casado ha mostrado su disposición a negociar los Presupuestos Generales del Estado (PGE) “si rompe con sus socios de Gobierno”; a emprender la reforma de la financiación autonómica; apoyar la posición de Moncloa en la negociación del marco financiero plurianual en Bruselas; a retomar la renovación del sistema de pensiones del Pacto de Toledo; a lograr un acuerdo educativo; a apoyar la ley de protección de la infancia y la adolescencia; o avanzar en “recuperar el orden y la convivencia en Cataluña”.
LOS POPULARES LO PIDEN
Recién iniciada la XIV Legislatura, varios dirigentes del PP han reclamado la búsqueda de consensos en el ámbito sanitario. Un ejemplo de ello lo protagonizó Rosa María Romero, diputada del PP, tras su designación como presidenta de la Comisión de Sanidad y Consumo del Congreso de los Diputados. Durante su discurso, Romero invitó al resto de integrantes de la Comisión “al debate y a llegar a grandes acuerdos, de forma responsable y en base al sentido común”.
Por su parte, el senador Antonio Alarcó, portavoz de Sanidad del PP en la Cámara Alta, ofreció una entrevista a ConSalud.es en la que subrayó que su partido “estará siempre buscando grandes consensos, porque la salud no tiene ideología, es un hecho individual”. En este sentido, trasladó al Gobierno de coalición que “nos tendrá dialogando ante planteamientos sensatos y no ideológicos dentro del ámbito sanitario”.