Son muchas las sociedades científicas y de expertos que se han dirigido a la ministra de Sanidad, Mónica García, para plantearle sus inquietudes y peticiones de cara al nuevo año que acaba de comenzar. No obstante, la propia ministra tiene también sus prioridades claras y ya ha ido desvelando cuáles serán sus líneas de actuación en esta legislatura.
El primero de los compromisos de García, y como ella ha defendido en numerosas ocasiones, es con los profesionales sanitarios. No sólo con sus condiciones laborales, sino también con el déficit de los mismos e incluso con la Formación Sanitaria Especializada. Así, en una reciente intervención en el Senado, la ministra aseguraba que "el Ministerio ha estado y estará comprometido con la formación de sus profesionales, y el esfuerzo de Sanidad ha sido notable".
Igualmente, otra de las grandes propuestas de García tiene que ver con la mejora de la Atención Primaria. Tanto es así que, tras las numerosas peticiones por parte de los consejeros y consejeras sanitarias autonómicos, en este mismo mes de enero se va a celebrar un Consejo Interterritorial de Sistema Nacional de Salud con el tema monográfico de la Atención Primaria. Ella misma se ha comprometido a "reforzar la atención primaria, que está herida de muerte y es uno de nuestros sustentos del Sistema Nacional de Salud".
García se ha comprometido a reforzar la atención primaria "que está herida de muerte"
Otro de sus grandes caballos de batalla este año apunta a ser el tabaco. La anestesista avanzó su disposición de ampliar el Plan Integral de Prevención y Control del Tabaquismo. En este sentido, ha propuesto medidas como, por ejemplo, extender los espacios sin humo e impedir que se fume en las terrazas de los bares y restaurantes. Este plan va de la mano también de la lucha contra los vapeadores. "Los vapeadores tienen apariencia de juguetes y sabores dulces, pero son perjudiciales y la antesala del tabaquismo. Vamos a regularlos", ha adelantado.
Igualmente, la ministra se ha comprometido a luchar contra la largas listas de espera que actualmente deben esperar los pacientes, no sólo en atención especializada, sino también en la Atención Primaria. No en vano, en el acuerdo de gobierno de PSOE y Sumar, ambos partidos se comprometieron a regular las listas de espera por ley, con una normativo de tiempos máximos de espera.
Por otra parte, y dentro de la defensa de la salud mental que también ha abanderado la ministra, este año podría ser el momento en el que veamos formalizado el Pacto de Estado por la Salud Mental. Este planteamiento ya se aprobó en el Congreso de los Diputados a finales de diciembre, gracias a una moción del PSOE. Así, García deberá encargarse este año de hacerlo realidad.
Este año podría ser el momento en el que veamos formalizado el Pacto de Estado por la Salud Mental
La ampliación de la cartera de servicios del SNS también está en los planes de la ministra. "Tenemos un proyecto de cuatro años para poner la sanidad en el centro y adaptarla a los retos del siglo XXI", decía, y "la salud es "lo más importante”. Así, su compromiso es el de “abordar la salud mental, reforzar la AP, ampliar la cartera de servicios o estar preparados para nuevas crisis sanitarias”.
Todo ello desde una perspectiva holística, pues la facultativa también ha recordado hasta la saciedad que todas estas mejoras de la salud vienen de la mano también de las mejoras sociales. En este sentido, siempre ha hecho referencia a los determinantes sociales, como la vivienda o el salario, por ejemplo.
Pese a que muchos han cuestionado las competencias que tiene realmente el ministerio para abordar todos estos asuntos, Mónica García también ha sido una firme defensora de la cartera que gobierna. "Hay un mantra como de que el ministerio no tiene competencias, y tiene una que es fundamental: cohesionar y coordinar", afirmaba hace unas semanas.