El próximo 1 de enero entrarán en vigor los Presupuestos Generales del Estado (PGE) del 2021. Así ocurrirá tras haberse aprobado en el Senado su texto definitivo por mayoría y tras no haberse incorporado al proyecto ninguna de las enmiendas presentadas por la oposición, de forma que no será necesario que vuelva al Congreso. Son los primeras cuentas estatales desde 2018, una de las más relevantes ya que tratarán de paliar las consecuencias de la pandemia de Covid-19.
Según defendió la ministra de Hacienda, María Jesús Montero, los PGE “protegerán y reforzarán los pilares del Estado del Bienestar, con el objetivo principal de fortalecer las políticas públicas y dar respuesta a las necesidades de los ciudadanos, sobre todo, de los colectivos más vulnerables”. De esta forma, se convertirán “en garantes de la igualdad de oportunidades y generadores de una red de seguridad para las clases medias y trabajadoras”.
Los PGE están marcados por el impacto de la Covid-19 sobre el SNS y por la incertidumbre que aún despierta la pandemia y la administración de las vacunas
Por su parte, el ministro de Sanidad, Salvador Illa, aseguró en el Congreso que las cuentas “son, ahora más que nunca, la palanca más poderosa para enfrentarnos a la Covid-19”. Así, subrayó que servirían para “dar una respuesta financiera única y contundente” en materia sanitaria, dar “cauce para que los fondos europeos desplieguen toda su efectividad para proteger la salud” y para “reforzar el papel del Ministerio de Sanidad sin perjuicio de afectar a la descentralización del SNS”.
Los PGE aprobados están especialmente marcados por el impacto que ha generado la Covid-19 sobre el Sistema Nacional de Salud (SNS) y por la incertidumbre que aún despierta el futuro de la pandemia y la administración de las vacunas durante el próximo año. La previsión es que el Gobierno destine en 2021 un presupuesto de 7.330 millones de euros a política sanitaria, lo que supone un aumento de 3.149 millones (un 75,3% más) con respecto al año anterior.
No obstante, buena parte de esta partida provendrá de los fondoseuropeos que han sido negociados por los Estados miembros con la Comisión Europea para hacer frente a la pandemia, los cuáles fueron desbloqueados recientemente. En concreto, 2.423 millones de euros se gestionarán gracias al fondo React-EU (Ayuda a la Recuperación para la Cohesión y los Territorios de Europa) y otros 522 por el Mecanismo de Recuperación y Resiliencia (MRR).
VACUNAS COVID-19
En torno a los 1.011 millones de euros de los fondos europeos se dedicarán a los gastos relacionados con las vacunas frente a la enfermedad provocada por el nuevo coronavirus. Este montante servirá para adquirir las inmunizaciones, para los gastos de gestión, así como para incrementar la difusión de los beneficios relacionados con la vacuna entre la sociedad a través de campañas de publicidad y propaganda.
Los fondos europeos servirán para adquirir las futuras frente a la Covid-19 (1.011 millones) y para implementar el Marco Estratégico de Atención Primaria (1.089 millones)
Por ahora, el Gobierno ha autorizado la adquisición de vacunas de cuatro compañías farmacéuticas: AstraZeneca, Moderna, Janssen y CureVac. La suma de todas supone la compra anticipada de unas 84 millones de dosis, algunas de ellas dobles, que España va a comenzar a recibir este mismo fin de se semana, una vez ha sido autorizada por la Agencia Europea del Medicamento (EMA) una de ellas. En total, el Ejecutivo espera recibir 140 millones de dosis para inmunizar a 80 millones de personas.
PRIMARIA, DIGITALIZACIÓN Y NUEVOS SERVICIOS
Otra partida importante de los fondos europeos, de 1.089 millones de euros, se destinarán a financiar la implementación del Marco Estratégico de Atención Primaria y Comunitaria, aprobado por mayoríaen abril de 2019 en el Consejo Interterritorial. El objetivo del Ministerio de Sanidad es actualizar el primer nivel asistencial, fuertemente azotado por la pandemia, y proporcionar así “una atención de salud de manera integrada, equitativa y eficiente a la población”.
Los PGE incorporan la renovación tecnológica del SNS, la atención a la salud bucodental o la exención del copago farmacéutico para tres nuevos colectivos sociales
Los PGE también apuestan de forma decidida por modernizar el SNS a nivel tecnológico, aprovechando la llegada de dinero a través de la Unión Europea. Por una parte, 400 millones de euros servirán para impulsar la renovación de las tecnologías sanitarias y otros 295,5 millones para implementar la Estrategia Digital del SNS. Desde la secretaría general de Salud Digital, recientemente creada, esperan lograr junto a las CC.AA. la transformación digital del sistema.
Por otra parte, las próximas cuentas públicas incorporan nuevos servicios sanitarios a la cartera básica, como la atención a la salud bucodental (49 millones). Igualmente, vuelven a dotar con financiación al Fondo de Cohesión Sanitaria, con 34 millones, e incrementan los créditos para el Ingesa hasta los 319 millones. Además, tres nuevos colectivos sociales quedarán exentos de abonar el copago farmacéutico, una de las medidas que pactaron PSOE y Unidas Podemos.
SUBIDA DEL SUELDO A LOS SANITARIOS
En materia laboral, los PGE incorporan un aumento del sueldo de los trabajadores públicos enun 0,9% durante el 2021, conforme a la subida del IPC. Así, más de 2,5 millones de empleados, entre ellos los profesionales de la sanidad pública, verán mejorada su retribución salarial. Los sanitarios también se beneficiarán de otras medidas sociales como la igualación de los permisos de paternidad y maternidad, hasta las 16 semanas.
El Gobierno de coalición ha aceptado la enmienda de Ciudadanos relativa a la implementación de una tarjeta sanitaria única para el SNS
Por otra parte, la Dirección General de Ordenación Profesional, dirigida ahora por Vicenç Martínez, se ha propuesto recuperar el diálogo con el colectivo y saldar varias cuentas pendientes. Así, en el marco de los PGE, se marcan entre otros objetivos la modificación legislativa vigente sobre la Formación Sanitaria Especializada (FSE), la resolución de la convocatoria extraordinaria de Enfermería Familiar y Comunitaria, el desarrollo definitivo del Registro Estatal de Profesionales o promover el retorno de los sanitarios españoles que emigraron tras la última crisis económica.
TARJETA SANITARIA ÚNICA
De todas las enmiendas presentadas por la oposición a la sección 26 de Sanidad en el Congreso, la única relevante que ha contado con el apoyo del Gobierno de coalición es una de Ciudadanos relativa a la implementación de la tarjeta sanitaria única. Guillermo Díaz, portavoz de Sanidad de la formación naranja, subrayó a ConSalud.es, que esta medida representa “una victoria importante” ya que permitirá a los españoles “recibir asistencia sanitaria en cualquier comunidad autónoma en las mismas condiciones que las personas residentes en ellas”.