Casi seis meses han pasado ya desde que el presidente del Gobierno, PedroSánchez, anunciara la próxima aprobación de un Proyecto Estratégico para la Recuperación y Transformación Económica (PERTE) para el ámbito de la salud de vanguardia. Desde entonces, pocos avances más se han conocido, más allá de la promesa de que se presentaría “en próximos meses”.
Recientemente, el Gobierno ha respondido a varias preguntas parlamentarias presentadas por el PP en las que cuestionaban por los plazos de este proyecto. Sin embargo, en estas respuestas, a las que ha tenido acceso ConSalud.es, no se ofrece ningún detalle al respecto. Tampoco el Ministerio de Sanidad ha respondido a las preguntas de este medio sobre cuándo se presentaría.
El Perte fomentará la colaboración público-privada en las áreas científico y empresarial, coordinando estas dos agendas de inversión específicas
A pesar de no dar información sobre este punto, el Ejecutivo sí que ha avanzado algunas de las particularidades que caracterizarán a este nuevo Perte que pretende “mejorar la salud de la población a partir de la innovación diagnóstica, terapéutica y preventiva en el Sistema Nacional de Salud, que a su vez permitirá fomentar la generación de tejido industrial y la creación de empleo de calidad”.
ALIANZA CIENTÍFICO-EMPRESARIAL
A falta de conocer las áreas concretas de inversión en las que se enfocará este proyecto, el Gobierno sí que ha indicado que, de forma general, coordinará “dosagendasdeinversión específicas”. Por una parte, se dirigirá al tejido científico y otra al tejido empresarial. Con este binomio, se pretende fomentar “las alianzas científico-empresariales”, a nivel público y privado, de forma que estén “alineadas con la consecución de los objetivos”.
Estos objetivos también están definidos, de forma general. En primer lugar, el Perte servirá para incorporar al SNS “técnicas y tecnologías innovadoras para el diagnóstico y la prevención de las enfermedades”. Estas tendrán “impacto sobre la práctica clínica” y con especial atención se aplicarán “en el punto de atención al paciente”.
El proyecto propone, entre otras acciones, desarrollar una plataforma de diseño y producción industrial de medicamentos y vacunas basados en ribonucleótidos
En segundo lugar, buscará “las alianzas necesarias” entre sectores para un mayor desarrollo de terapiasavanzadas “desde el ámbito académico” y propiciar “su transferencia a la práctica clínica”. La tercera meta se centra en desplegar “una plataforma de diseño y producción industrial de medicamentos y vacunas basados en ribonucleótidos con capacidad de respuesta ultra-rápida a las necesidades de salud pública”.
ESTRUCTURA DE GOBERNANZA “SINGULAR”
Junto a las agendas de inversión y los objetivos marcados, el Ejecutivo también da ideas de cómo debe liderarse el proyecto. Para llevar a cabo las acciones propuestas, apuestan por desarrollar “una estructura de gobernanza singular” que sea capaz de aplicar el modelo de colaboración propuesto, de forma que integre “todos los representantes indicados” y se alcancen “cotas elevadas de coordinación”.
El Gobierno indica que el Perte de salud de vanguardia, a pesar de que aún no se ha aprobado, tendrá una ejecución presupuestaria entre 2021-2023
En esta línea, desde el gabinete que dirige Pedro Sánchez conciben esta idea como “una propuesta país de interés general” tanto para el sectoreconómico, “por su capacidad de arrastre y potencial transformador”; y, para la sociedad, “por la cohesión territorial que presenta, con incorporación de las comunidades autónomas, ministerios, actores públicos y privados y al resto de agentes del sistema que sean necesarios para la consecución de los objetivos planteados”.
¿QUÉ ES UN PERTE?
Los PERTE son un nuevo instrumento de colaboración público-privada creados para modernizar la administración pública y para la ejecución del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia, el programa diseñado por el Gobierno para optar a los fondos europeos aprobados por la Comisión Europea tras la pandemia de Covid-19.
Desde Moncloa se han proyectado hasta cinco proyectos de este tipo, de los que únicamente se ha aprobado uno, el del vehículo eléctrico y conectado. Los otros cuatro se enfocarán en las siguientes áreas: salud de vanguardia; nueva economía de la lengua; aeroespacial; y cadena agroalimentaria inteligente y sostenible. El de salud, aunque aún no se ha aprobado, tendrá una ejecuciónpresupuestaria entre 2021-2023.