El Grupo Parlamentario Socialista ha registrado una Proposición no de Ley (PNL) en el Congreso de los Diputados con la que instan al Gobierno a estudiar el refuerzo de la figura del tutor MIR, una persona que consideran “clave” en la formación de los profesionales sanitarios del futuro.
En la iniciativa, los socialistas proponen que mediante la Comisión de Formación Continuada de las profesiones sanitarias se impulse el “desarrollo de un diploma de acreditación de la formación continuada de la función del tutor de Formación Sanitaria Especializada (FSE)”.
Los socialistas defienden que el trabajo que ejerce el tutor MIR debe “tener un reflejo cuantificable en el desarrollo de su carrera profesional”
En la exposición de motivos de la propuesta, firmada por los diputados Antonio Hurtado y Ana Prieto, apuntan que la tutoría MIR es “una labor poco conocida” a pesar de ser una “figura clave” al constituir “el nexo de unión entre el aprendizaje del MIR y su práctica clínica”.
En esta línea, los socialistas redundan en que la labor de estas personas es “loable y voluntaria compatibilizando docencia y asistencia dentro de su horario laboral y extralaboral” debido a que “se dedican horas a preparación”. Por estos motivos, consideran que el trabajo que ejerce el tutor MIR debe “tener un reflejo cuantificable en el desarrollo de su carrera profesional”.
RECOGIDO EN LEYES SANITARIAS
La figura del tutor/a de Formación Sanitaria Especializada está recogida en varias normas legislativas. Desde el PSOE citan dos de ellas. Por un lado, la Ley 44/2003, de 21 de noviembre, de ordenación de las profesiones sanitarias que, en su artículo 20, regula el sistema de formación de especialistas en Ciencias de la Salud.
Esta norma establece que “los residentes deberán desarrollar, de forma programada y tutelada, las actividades previstas en el programa, asumiendo de forma progresiva, según avancen en su formación, las actividades y responsabilidad propia del ejercicio autónomo de la especialidad”.
Por otro lado, citan el Real Decreto 183/2008, de 8 de febrero, por el que se determinan y clasifican las especialidades en Ciencias de la Salud y se desarrollan determinados aspectos del sistema de formación sanitaria especializada. En este caso, este RD desarrolla y regula aspectos básicos de la ley anterior, como aquellos referidos a la figura del tutor.
En concreto, el artículo 11 define tanto el concepto como las funciones y el nombramiento del tutor, señalando que es “el profesional especialista en servicio activo que, estando acreditado como tal, tiene la misión de planificar y colaborar activamente en el aprendizaje de los conocimientos, habilidades y actitudes del residente a fin de garantizar el cumplimento del programa formativo de la especialidad de que se trate”.