Cinco meses han pasado ya desde que el Gobierno de España pasara de ser dirigido por el PP a ser asumido por el PSOE, con Pedro Sánchez como presidente. En este tiempo, el Ejecutivo ha tratado de emprender acciones desde diferentes ámbitos, incluidos la sanidad. Sin embargo, se ha encontrado con la oposición del PP a iniciativas de importante consideración: eutanasia y universalidad.
Hace unas semanas, la formación popular intentó, sin éxito, darle un vuelco a la Proposición de Ley Orgánica presentada por el PSOE para regular la eutanasia en España. Lo que trataba de ser una propuesta alternativa para establecer unos mejores cuidados paliativos, se convirtió en una representación del rechazo a la ley de eutanasia socialista. Sin embargo, el Congreso tumbó la iniciativa del PP.
Los populares consideran que la norma sobre universalidad del Gobierno "vende humo" y "abre la puerta de par en par al turismo sanitario"
Tras este varapalo, la formación que dirige Pablo Casado va a intentarlo con otra normativa sanitaria. En este caso, los populares van a presentar una enmienda a la totalidad a la ley del Gobierno sobre el acceso universal al Sistema Nacional de Salud (SNS) y que procede de la aprobación del Real Decreto-ley 7/2018, de 27 de julio, que fue impulsado por la exministra de Sanidad, Carmen Montón.
Una vez aprobado el RD y convalidado por el Congreso, la iniciativa pasó a tramitarse como proyecto de ley con el fin de que las distintas formaciones políticas pudieran presentar mejoras al texto del Gobierno. En este caso, el Partido Popular ha optado por presentar una enmienda a la totalidad que vuelve a encubrir una oposición a la proposición del Ejecutivo.
“VENDE HUMO” SEGÚN EL PP`
Mientras se debatía el RD en el Congreso de los Diputados, la portavoz de Sanidad del PP, Teresa Angulo, defendía la aprobación del polémico RD 16/2012 de Mariano Rajoy al considerarlo “necesario y urgente” para dar “viabilidad” al SNS y garantizar a asistencia sanitaria a los “parados que no recibían prestación”.
En el mismo sentido, Anguloinsistía en que la derogación de dicha norma supondría “volver a un SNS quebrado, donde había un fraude importante con el turismo sanitario que costaba a los españoles 1.000 millones de euros al año”. Por este motivo, desde el PP creen que la nueva propuesta del Gobierno para recuperar la universalidad “vende humo” porque ya se estaba ofreciendo por parte de las comunidades autónomas y que “abre la puerta de par en par al turismo sanitario”.