El Congreso de los Diputados ha rechazado por mayoría (64 votos a favor, 191 en contra y 88 abstenciones) las dos enmiendas presentadas al proyecto de Ley de Equidad, Cohesión y Universalidad del SNS impulsado por el Gobierno, por lo que el texto continúa su tramitación parlamentaria. Sin embargo, el debate durante el pleno ha aventurado que la negociación de enmiendas en la Comisión de Sanidad será intensa.
Finalmente, el Ministerio de Sanidad y el PSOE llegaron a variosacuerdos en los últimos días para asegurarse que la ley se tramitara. En primer término, con Unidas Podemos. Tras el ultimátum lanzado por los socios de Gobierno de no garantizar su apoyo, las partes se han comprometido a cambiar algunos aspectos del proyecto en lo que respecta a la concreción de cuándo optar por los conciertos sanitarios.
La ministra de Sanidad y el PSOE reconocen las distintas "sensibilidades" que existen en torno a la ley y se muestran voluntarios a llegar a acuerdos para alcanzar "el mejor texto"
En segundo lugar, el departamento que lidera Carolina Darias tuvo que garantizar al PDeCAT, a Junts y hasta al propio consejero de Salud de Cataluña, JosepMariaArgimon, que la norma no afectaría al modelo sanitario catalán. En las últimas horas, estas fuerzas catalanas han insistido en que la mayoría de conciertos que rigen en esta comunidad se dan con fundaciones y entidades sin ánimo de lucro.
DARIAS Y EL PSOE PIDEN “CONSENSO”
A pesar de ello, ni el Ministerio de Sanidad ni el PSOE tienen garantizados los apoyos para que la ley salga adelante ya que todas las partes le han transmitido sus exigencias, con el ánimo de que sean incorporadas al texto final.
Pese a que no lo va a tener fácil, la ministra de Sanidad ha compartido su voluntad de “seguir trabajando juntos para llegar a un consenso”. Igualmente, AnaPrieto, portavoz de Sanidad del PSOE, ha reconocido las distintas “sensibilidades” que existen en torno a la ley, por lo que ha confirmado que trabajarán “por el mejor texto buscando acuerdos”.
Enfrente tendrán las aspiraciones de Unidas Podemos para que se derogue "de verdad" la Ley 15/1997 y se blinde la gestión pública de los servicios sanitarios. Junto a ello, las fuerzas nacionalistas de País Vasco y Cataluña han avanzado que estarán "vigilantes" para que no se invadan las competencias autonómicas. Finalmente, desde el PP, Vox y Ciudadanos avanzan que seguirán defendiendo que la sanidad privada colabore con la pública, por lo que aventuran meses "entretenidos" de negociación.