La presidenta del Congreso de los Diputados, Ana Pastor, cree necesario revisar la asistencia sanitaria en relación a la integración de las personas con problemas de salud mental. Así mismo, la exministra de Sanidad admite desigualdades territoriales en su atención, ya que la cartera de servicios no es la misma en toda España. Las consideraciones de la exministra de Sanidad se han producido en una jornada que se ha celebrado en la Cámara Baja con motivo de la celebración, este martes, del 25 aniversario del Día Mundial de la Salud Mental, bajo el lema 'Trabajar sin máscaras. Emplear sin barreras'.
Durante el acto, organizado por la Confederación Salud Mental España, la presidenta del Congreso ha asegurado que España cuenta con una "muy buena red sanitaria" en este ámbito tras la reforma psiquiátrica de los años 80, en la que ella participó y con la que se abandonó el internamiento de estos pacientes, aunque se conservó la estancia de agudos integrada dentro de los hospitales.
"Se hizo un gran avance", según Pastor, pero en su opinión la cartera de servicios del Sistema Nacional de Salud (SNS) plantea a día de hoy "algunos problemas que tienen que ver mucho con el tratamiento en las unidades de agudos, que en muchos casos son insuficientes ".
"En muchos casos es tan importante atender el entorno familiar como al propio paciente"
Estos problemas se dan en las estructuras posteriores a esa hospitalización, es decir, las unidades de día, las de atención permanente y los programas de atención a las familias porque, según sus palabras, "en muchos casos es tan importante atender el entorno familiar como al propio paciente". Así, la presidenta del Congreso de los Diputados ha señalado que es fundamental que estos pacientes tengan igualdad de oportunidades en todo el territorio español a la hora de ser atendidos.
Sin embargo, esa igualdad real no es efectiva, pese a que existe una ley que dice que la cartera de servicios tiene que ser la misma en cualquier lugar de España. "No se cumple la ley, pero tendremos que reforzar los mecanismos para que haya una mayor coordinación y se pueda cumplir este reto", ha concluido la presidenta, quien también reclama una mayor coordinación entre los servicios sanitarios y los sociales para que los enfermos puedan hacer una vida como los demás.