La Organización Mundial de la Salud (OMS) ha establecido una hoja de ruta para hacer frente a los principales retos en el ámbito de la salud pública a los que se enfrentan los gobiernos de las diversas regiones del planeta. Así, la institución que dirige el doctor Tedros Adhanom se ha marcado unos cometidos ambiciosos para 2019.
El aumento de casos de sarampión o difteria como consecuencia de la falta de vacunación, el incremento de patógenos que presentan resistencia a los medicamentos, el aumento de la obesidad y la falta de actividad física, los efectos de la contaminación ambiental y las crisis humanitarias que asolan el mundo son las principales tareas a las que se enfrenta la Administración dependiente de la Organización de Naciones Unidas (ONU).
"En 2019 será preciso abordar todas las amenazas a la salud desde una gran variedad de ángulos"
Según informa Europa Press, la entrada de este nuevo año coincide con la puesta en marcha del plan estratégico quinquenal de la OMS, bautizado como 13º Programa General de Trabajo. Atendiendo a detalles concretos, el proyecto se centra en un propósito de 3.000 millones de euros. Un tercio de la cuantía buscará la cobertura sanitaria universal, otro la protección ante emergencias y el último punto tendrá como objetivo potenciar una mejor salud y bienestar.
No obstante, desde la OMS han admitido que el objetivo no será facil y que será preciso "abordar todas las amenazas a la salud desde una gran variedad de ángulos". En este sentido, una de las primeras metas es frenar la contaminación del aire y, por ende, los efectos adversos del cambio climático.
Hay que recordar que, según los últimos datos aportados por los especialistas en Neumología, nueve de cada diez ciudadanos del planeta respiran aire contaminado. Por este motivo, la Organización Mundial de la Salud entiende que la contaminación del aire será "el mayor riesgo ambiental para la salud" durante los próximos 12 meses.