Tres meses ha necesitado el Govern liderado por ERC para llegar a un acuerdo que permitiese aprobar los presupuestos de la Generalitat para el 2023. Han sido unas arduas negociaciones entre el partido independentista y los socialistas de Salvador Illa, que han dado sus frutos y que ha permitido desbloquear las cuentas catalanas para este año que acaba de comenzar y que, con casi toda seguridad, permitirá a Pere Aragonés acabar la legislatura.
Unas cuentas que tienen un importante componente social, especialmente en materia sanitaria. Este punto tan importante se encuentra dentro del cumulo de acuerdos que ambas formaciones han alcanzado para mejorar los centros de salud de la comunidad catalana, entre los que destacan además puntos como una comisión parlamentaria para estudiar la financiación de Atención Primaria, facilitar la capacidad diagnóstica o elaborar un plan para renovar los equipos que se encuentren en los percentiles más bajos de accesibilidad.
PRESUPUESTOS CATALANES 2023
El principal líder de la oposición y líder del PSC, el exministro de Sanidad Salvador Illa, ha destacado en rueda de prensa que su grupo ha conseguido un aumento de 1.284 millones para salud, lo que supondría un crecimiento de la partida presupuestaria, que crecería hasta un total de 12.212,8 millones. De esta cantidad un 24 por ciento se ha fijado que será destinada para la Atención primaria. Es un cuatro por ciento más de lo que estaba presupuestado en principio. "De todo este aumento, voy a resaltar lo que se dedica al ámbito de la salud pública, con toda la experiencia que he tenido durante la pandemia, 30 millones para salud pública, 30 millones para salud mental, 50 millones para reducir las listas de espera, y un plan de hospitales y de centros de atención primaria", ha destacado Illa ante los medios de comunicación.
Buena parte de ese incremento presupuestario va destinado al sueldo de los profesionales sanitarios. Unos acuerdos que van de la mano con el Acuerdo de Función Pública que firmo el Ministerio de Hacienda con los sindicatos y que permitiría activar el incremento retributivo del 2.5 por ciento que percibirán los santarios el próximo año. Unos fondos que también permitirán retribuir el 0.5 por ciento extra vinculado a la inflación.
Dentro de esta partida presupuestaria también constan los “30 millones de euros para políticas dedicadas a la atención de la salud mental y las adicciones” que el presidente de la Generalitat, Pere Aragonés, anunció en la segunda reunión de la Mesa del Pacto Nacional de Salud Mental de Cataluña. Una medida que defendió que ha de llevarse a cabo “necesariamente de manera transversal y prioritaria.
Se trata del Plan de decisiones anticipadas en salud mental y adicciones, que, como ha remarcado el jefe del Ejecutivo, servirá porque las personas que sufren problemas de salud mental “puedan dejar instrucciones específicas porque el equipo sanitario contacte con las personas de confianza que elija el paciente para ayudarle a recuperar la estabilidad y consensuar y determinar pasos a seguir en un momento de crisis para ofrecer así lo mejor acompañamiento”.
Dentro de esta partida presupuestaria también constan los “30 millones de euros para políticas dedicadas a la atención de la salud mental y las adicciones”
El presupuesto para Sanidad también incluirá una partida de más de 5,2 millones destinados hasta 2026 en investigación e innovación en salud. Así el Ejecutivo catalán autoriza a la Consejería de Salud a realizar gastos con cargo a los presupuestos de los ejercicios 2023, 2024, 2025 y 2026, con el objetivo de "desarrollar un sistema integral de investigación e innovación de excelencia que contribuya a promover y proteger la salud y el bienestar de las personas".
INVERSIONES INFRAESTRUCTURALES
En materia de inversiones para futuras infraestructuras sanitarias ambas formaciones han puesto como meta que las nuevas cuentas para este año permitan una “actuación inversora” Unas medidas que contarán con líneas de financiación de Fondos Europeos dentro del Plan Inveat.
En esta línea la Generalitat destinará: 51 millones de euros para la ampliación del Parc Salud Mar, 40 millones para la renovación de equipos en el Siscat, 30 millones para completar las obras previstas en una veintena de centros de salud, 500.000 euros a la reforma del Hospital del Vendrell, 500.000 para iniciar el proyecto del nuevo Hospital de las Terres de l’Ebre, un millón para arrancar las obras en el Vall d’Hebron o dos millones para el nuevo Hospital Josep Trueta.
Unos presupuestos en los que también se trata el tema de la ampliación de plazas en Formacion Sanitaria Especializada y el desarrollo de un “sistema de incentivos” para las especialidades deficitarias.
Por último, Esquerra Republicana y PSC han legado a un acuerdo que permitirá eximir a los médicos de Atención Primaria de gestionar las bajas hospitalarias, una reivindicación que ha sido la punta de lanza del programa que ha acordado y que ha servido para poder sacar adelante los presupuestos de la Generalitat.