El pasado año 2023 registramos en España unastemperaturas sin precedentes. De hecho, y según los datos de la Agencia Estatal de Meteorología (AEMET), se ha superado la temperatura media mensual en todos los meses observados respecto al periodo de referencia 1991-2020. Además, el del pasado año fue el tercer verano más cálido desde el comienzo de la serie en 1961, por detrás de los veranos de 2022 y 2003 y, por tanto, también el tercer verano más cálido del siglo XXI.
Tal y como explicaba ayer la minsitra de Sanidad, Mónica García, durante la presentación de la campaña 'Efectos en la salud de las altas temperaturas', nos encontramos "en un momento crucial para nuestra salud y para nuestro bienestar". Momento además marcado por el cambio climático, que "es un fenómeno que ya no podemos ignorar" y que "está afectando de manera cotidiana y diaria a nuestra salud. No sólo es una crisis ambiental, también es una crisis de salud pública".
Con este contexto, y teniendo en cuenta que las autoridades europeas que monitorizan el estado del clima ya han alertado de que, con una probabilidad del 70%, este verano volveremos a vivir temperaturas similares, se ha renovado el Plan nacional de actuaciones preventivas por altas temperaturas.
Con una probabilidad del 70%, este verano volveremos a vivir temperaturas similares
Este nuevo plan contra el calor ha venido acompañado del 'meteosalud'. Esta nueva clasificación se basa en un mapa de España en el que se indican los umbrales de temperatura máxima de impacto en salud, es decir, la temperatura a la que nuestra salud comenzaría a correr peligro, tal y como se explica desde el Ministerio de Sanidad.
Como novedad, este mapa no sólo se ha dividido en las 52 unidades de referencia provinciales de siempre, sino que se han añadido más zonas para estudiar estas temperaturas, hasta llegar a las 182. De esta manera, en una provincia podemos encontrar variaciones de temperatura máxima dependiendo del territorio concreto y de la zona de meteosalud.
Dependiendo del nivel en el que se considera que cada zona empieza a presentar riesgos para la salud, se han establecido cuatro niveles: nivel 0, con ausencia de riesgo; nivel 1, con bajo riesgo; nivel 2, con resgo medio; y nivel 3, con alto riesgo. Esta caracterización también se basa en cuatro colores (verde, amarillo, naranja y rojo), que son los que indican el nivel de cada zona. Para poder consultar el nivel de riesgo de cada lugar, desde Saniad se ha habilitado un mapa interactivo en su página web, en el que se pueden consultar estos niveles.
En el nuevo mapa se han añadido más zonas para estudiar estas temperaturas, hasta llegar a las 182
Las temperaturas en cada zona de meteosalud son diferentes, pues 40 grados pueden suponer un riesgo para la salud en una zona pero no en otra. Los umbrales más altos los encontramos en Andalucía, comunidad en la que se suelen sufrir las mayores temperaturas. Así, en la zona de la Campiña cordobesa, en el centro de la provincia, el umbral máximo alcanza los 40,4 grados, la temperatura más alta de España.
También se han establecido los 40 grados de umbral máximo en la zona de Morena y Condado (Jaén), Antequera (Málaga), y la Sierra norte de Sevilla. Por el lado contrario, tenemos zonas en las que, con temperaturas mucho más bajas ya llegamos a umbrales perjudiciales para la salud. Sería el caso de la zona de A Mariña, en Lugo, cuyo umbral máximo, siendo el más bajo del país, está en los 25,5 grados.
En definitiva, desde Sanidad se explica que las altas temperaturas aumentan significativamente la mortalidad si se supera un determinado umbral térmico, pero este umbral no es igual para toda la población. Por ello, con este plan se quiere reducir el impacto sobre la salud de la población como consecuencia del exceso de temperatura.