Cerca de 4.000 personas iniciaron en 2023 un tratamiento por adicciones sin sustancia en España. El Ministerio de Sanidad ha publicado los resultados de su informe sobre adicciones comportamentales y otros trastornos adictivos. Pese a que los datos han mejorado con respecto al año anterior, según las palabras de Joan Villalbí, delegado del Plan nacional sobre droga, la adicción al juego y apuestas ya se ha convertido en "una preocupación" para Sanidad.
No en vano, los datos del informe, centrado en la población más joven, de entre 14 y 18 años, reflejan que el 21,5% de los estudiantes han jugado con dinero online y/o presencial en los últimos 12 meses. Eso sí, los datos suponen una reducción con respecto al 2021, cuando el porcentaje era del 20,1% en 2021.
Además, el 23,5% de los estudiantes que han jugado dinero online en 2023 tendría un posible juego problemático, mientras que entre los que han jugado con dinero presencial este valor se sitúa en el 20,5%, se menciona. Igualmente, en cuanto al consumo de pornografía, el 66,8% admiten haber usado pornografía al menos una vez en su vida, el 58,6 en los últimos 12 meses y el 44,5% en los últimos 30 días.
La adicción al juego y apuestas ya se ha convertido en "una preocupación" para Sanidad
Por parte de la población de entre 15 y 64 años, vemos que en 2022, desciende, respecto a la encuesta de 2020, tanto el juego con dinero presencial (57,4% - 63,6%) como online (6,7% - 5,3%). Igualmente, cerca de 4.000 personas iniciaron en 2023 un tratamiento por adicciones sin sustancia en España.
Este informe aporta por primera vez datos sobre las personas que inician tratamiento por adicciones comportamentales en la red pública de atención a las adicciones. Esta información, que aportan las comunidades autónomas con los datos de sus servicios, pone de manifiesto que, aunque el dato es de 4.000 personas frente a las 70.000 por adicciones con sustancia, es un volumen importante.
De estas 4.000 personas, el 80% inician tratamiento por adicción al juego y apuestas; y un 10% por adicción a los videojuegos. Otras adicciones pueden ser sexo, drogas, o uso problemático de internet. “Los datos a personas adultas sobre adicciones comportamentales o uso de servicios que pueden tener potencial adictivo nos dice que el juego con dinero está relativamente extendido en nuestra sociedad, muchas veces sin que parezca problemático”, explica Villalbí.
De las 4.000 personas, el 80% inician tratamiento por adicción al juego y apuestas
En buena parte, son formas de juego presencial, comprando loterías o en sala de apuestas o bingos o casinos; y una parte más pequeña, pero creciente, de juego online, explica. Los datos sugieren un pequeño descenso con respecto a dos años antes, que es cuando se hizo la encuesta anterior, en lo que a la práctica del juego se refiere.
En cuanto al juego problemático, según estipula el manual de la Sociedad Americana de Psiquiatría, se ha observado una cierta disminución, relativamente importante incluso, entre el año 2018 y 2022. “Y esto es importante, porque durante estos años se han adoptado algunos elementos de regulación que seguramente han sido positivos: por un lado, regulación que afecta al juego online; y por otro lado regulación que afecta a la publicidad audiovisual”, apunta el delegado del PNSD.
De esta forma, en el año 2018 se estimaba que el 2,6% de las personas de 15 a 64 años tenía indicios de juego problemático y en el año 2022 esto se ha reducido al 1,7%. “Esto muestra que la regulación es positiva y puede limitar el daño que hacen determinadas prácticas”, apunta Villalbí.