Tras dos años de convivencia con el Covid-19, España ha dado este martes uno de los pasos más importantes a la hora de seguir ejerciendo un control sobre las consecuencias de la pandemia. Como estaba anunciado, el Gobierno ha aprobado el fin del uso obligatorio de las mascarillas en la mayoría de espaciosinteriores, con algunas excepciones ya dadas a conocer en las últimas semanas.
Así lo ha confirmado Carolina Darias, ministra de Sanidad, en la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros que ha autorizado la medida. La responsable del departamento sanitario ha defendido que aunque se trata de “un día importante”, se trata principalmente de un “paso más en la evolución de la pandemia”.
Las mascarillas ya no serán obligatorias en los andenes y estaciones pero sí en el interior de los medios de transporte; serán necesarias en centros y establecimientos sanitarios salvo para personas ingresadas o residentes
Entrando en detalles, y salvo que su publicación en el BOE este miércoles ofrezca alguna sorpresa, Darias ha garantizado que el decreto se aprueba “de acuerdo con la propuesta realizada por la Ponencia de Alertas del SNS y la participación del Consejo Interterritorial celebrado en Toledo”. En este sentido, ha sostenido que las mascarillas dejan de ser obligatorias de forma general “salvo en determinadas excepciones”.
¿DÓNDE SEGUIRÁN SIENDO OBLIGATORIAS?
En su intervención, ha concretado que en algunos entornos seguirán siendo obligatorias debido a la “vulnerabilidad” de la población que acude a ellos. Es el caso de los centros, servicios y establecimientos sanitarios que están catalogados como tal según el RD 1277/2003. En ellos entran los “hospitales, centros de salud, centros de transfusión de sangre o farmacias”. Darias ha indicado que deberán usarlas “las personas que trabajen en ellos y los visitantes”, salvo las personas ingresadas.
Con respecto a los centrossociosanitarios, como las residencias de mayores, tan solo deberán llevarla “los trabajadores y los visitantes”. Mientras tanto, las personas que vivan en ellas no están obligadas a usarlas, ya que estos espacios están considerados como sus domicilios.
En el entorno laboral, la mascarilla no será obligatoria "con carácter general"; los servicios de prevención, en base a una evaluación de riesgo, podrán establecer medidas preventivas, como el uso de mascarillas
En cuanto a los medios de transporte, también será obligatorio su uso en aquellos que sean “aéreos, por cable, ferrocarril, buses o guaguas” y en los barcos “cuando no se puedan cumplir los 1,5 metros de distancia”. En esta área, la ministra de Sanidad ha despejado una de las dudas que estaban en el aire: “en los andenes y estaciones ya no serán obligatorias”.
“USO RESPONSABLE” EN EL RESTO
Para el resto de espacios, Darias defiende que el decreto tiene como “vector” la recomendación de que se haga un “uso responsable” de la mascarilla. Por ejemplo, sí instan a usarla, aunque no de forma obligatoria, a los mayores de 60 años, a personas inmunocomprometidas, a quienes padezcan una enfermedad “de riesgo importante”, a embarazadas, a profesores con vulnerabilidad, en aglomeraciones y eventos multitudinarios y eventos familiares “cuando estemos con personas vulnerables”.
Para el entornolaboral, uno de los sectores en los que más dudas se han suscitado, la mascarilla “no resultará obligatoria con carácter general”. En todo caso, ha precisado que “los responsables de prevención de riesgos laborales, y de acuerdo con la evaluación del riesgo del puesto de trabajo, podrán establecer las medidas preventivas que consideren adecuadas, incluida el uso de las mascarillas, si así lo determinan”.
Darias justifica la retirada por la "amplia cobertura vacunal", el "nivel de riesgo bajo" que presentan los indicadores de seguimiento y el descenso "considerable" de la gravedad de la enfermedad
Por su parte, ha subrayado que en los centroseducativos “no se usará en ningún caso”. En este caso, ha apuntado que la Ponencia mostró una “posición unánime” sobre que en estos espacios deberían dejar de ser obligatorias, “al igual que ya dejaron de serlo en los recreos y patios”. Mientras, ha añadido que “no serán obligatorias” en eventos como “los partidos de fútbol y de baloncesto”.
CONTEXTO EPIDEMIOLÓGICO “FAVORABLE”
En la rueda de prensa, la responsable de Sanidad ha justificado que “el contexto epidemiológico favorable posibilita la flexibilización de uno de los elementos más simbólicos de la pandemia”. Así, se ha referido a la “amplia cobertura vacunal”, a que “todos los indicadores de seguimiento se encuentran en un nivel de riesgo bajo” y a que “la gravedad de la enfermedad ha descendido considerablemente”.
Finalmente, y preguntada sobre si el Gobierno se ha precipitado a la hora de aprobar la medida sin conocer los efectos que ha tenido la SemanaSanta, Carolina Darias ha apuntado que se trata de una medida “sopesada y meditada” que va “en línea del entorno europeo” y que va acompañada de una “monitorización” derivada de la nueva Estrategia de Vigilancia.