Con la celebración este viernes del Consejo Interterritorial del Sistema Nacional de Salud (CISNS), y la confirmación de que ha sido el último para la actual ministra de Sanidad, Carolina Darias, quedan por delante muchos retos del sistema y otras tantas demandas de las Comunidades Autónomas que todavía no se han debatido en el seno de este órgano de coordinación entre el ministerio y las distintas regiones españolas.
Una de las problemáticas ya alertadas, y de la que es consciente Sanidad, es el déficit de profesionales en general, y en concreto de especialistas de medicina de familia y comunitaria. Ya en noviembre, varios consejeros de Sanidad del PP advirtieron que la escasez de médicos de familia se agravaría en los próximos años por las inminentes jubilaciones de profesionales veteranos. Ante esto, pidieron una mayor incorporación de médicos de familia en formación para la siguiente convocatoria MIR. El Gobierno ha respondido a esta problemática con datos: se han subido un 36% el número de plazas MIR para medicina de familia en los últimos cuatro años. El problema es la falta de atractivo que tiene esta especialidad por sus condiciones lo que se trasladó en que en el último reparto de plazas hubo 56 vacantes. El Consejo Interterritorial tendrá, sin duda, que debatir sobre este tema.
Otras de las propuestas, para paliar precisamente ese déficit de profesionales, que se presentaron es incentivar que los profesionales jubilados que lo deseasen pudiesen permanecer, al menos parcialmente, en activo, desarrollar herramientas para fidelizar a los médicos de familia en sus puestos, o promover el retorno de aquellos médicos que hayan desarrollado su carrera en otros países.
Esta petición ya ha sido respondida por el Gobierno, ya que recientemente ha anunciado la jubilación activa mejorada para los médicos de Atención Primaria, en forma de proyecto piloto con una duración de tres años.
Una de las problemáticas ya alertadas a Sanidad es el déficit de especialistas de medicina con familia
Un mes después, el pasado diciembre, varios consejeros instaron a recuperar el acuerdo alcanzado en abril de 2018. Es en dicho pacto donde se establecía un cambio en el modelo de acreditación de las unidades docentes de Medicina Familiar y Comunitaria. No obstante, sólo un mes después de alcanzar ese acuerdo, se produjo la moción de censura y el cambio de Gobierno, por lo que no llegó a desarrollarse.
Otras reivindicaciones encima de la mesa para los próximos interterritoriales son los incentivos para los profesionales del turno de tarde o la convalidación de títulos de médicos extracomunitarios. Muchas comunidades autónomas piden también la plena activación del Registro Estatal de Profesionales Sanitarios.
EVALUACIÓN DEL SNS, CANNABIS, TABACO Y ALCOHOL
Otro de los retos pendientes por el Ministerio de Sanidad será la puesta en marcha de un Comité de Evaluación del SNS debido a la irrupción de la pandemia. Lo único que se dio a conocer fueron sus expertos hace ya casi un año. Se desconoce también cuándo se regulará el uso medicinal del cannabis, después de que el Congreso rechazase su aprobación para uso recreativo.
También queda por establecer un nuevo Plan Integral de Prevención y Control del Tabaquismo. Todo ello, a pesar de que el Ministerio de Sanidad se comprometió a trabajar en los espacios sin humo. En la misma línea se encuentra la ley de prevención del consumo de alcohol en menores.
Queda igualmente por definir cómo se llevarán a cabo los procesos de estabilidad en la profesión sanitaria. Esto tras anunciarse que se harán fijos a 67.300 profesionales. Además, se debe tramitar en el Congreso la Ley de Equidad, que ha llevado al Ministerio a tener divergencias con Unidas Podemos, su socio de Gobierno.
Todo esto y mucho más tendrá que abordar un Consejo Interterritorial renovado. En los próximos meses se podrá observar un cambio en los miembros, ya no sólo en la ministra, sino de los consejeros autonómicos. Las elecciones del 28-M pueden provocar un amplio cambio de caras. Algunos de los consejeros ya han anunciado sus intenciones. Es el caso de Enrique Ruiz Escudero que no repetirá tras las elecciones de mayo. Por su lado, Jesús Fernández Sanz, consejero de Castilla-la Mancha se ha postulado para seguir en caso de que el PSOE gane las elecciones. Igualmente, es previsible que en otras Comunidades Autónomas, y tras los comicios, cambien de signo político algunos Gobiernos.